Capitulo 3; Promesa

2.7K 327 221
                                    

Era de madrugada exactamente las 6 de la mañana, Lawliet ya estaba listo para ir al primer día del kinder estaría mintiendo si digiera que no me alegraba mucho.

-Mami ¿Ya nos vamos?-

-Si espera se te olvida tu almuerzo-

Misa llego con una lonchera para su hijo, a quien se la entrego, subieron al carro de Light quien estaba con la cara de querer matar a alguien por el retraso que tendría, yo solo estaba sentado esperando que llegara Misa y el pequeño Lawliet para irnos de una vez.

-¿Papi iras a recogerme hoy?-

-Claro-

Una vez Misa subió, Light arranco, al kinder el cual no estaba muy lejos, así que al llegar bajamos, y si yo decidí quedarme con él, Light y Misa se despidieron de él casi sin cariño a pesar de eso el pequeño Lawliet si se despidió rápido pero siendo muy amable y cortes con sus padres, cuando se fueron ambos entramos

-Señor L ¿Podemos jugar en los columpio?-

-Tendrás amigos que jugaran contigo Lawliet... quiero que tengas amigos-

-¿Usted tenia amigos?-

-Solo puedo decirte que tome una mala elección de un amigo-

-¿Por ese amigo esta aquí señor L?-

-Si Lawliet... pero evita hablarme frente a otras personas, será más complicado que consigas amigos, te creerán un loco-

-No vengo aquí para hacer amigos creo que es evidente que no me interesa que piensen los demás si estoy con usted señor L-

Me puse a reír un poco, eso si no se parecía a nada que diría Misa ni Light, me hubiera encantado escuchar a su padre decir aquello... supongo que tienen razón cuando dicen que los niños son como esponjas y absorben todo lo que los rodea, Lawliet sonrió al verme reír.

-Me parece fantástico lo que dices, pero obedece lo que te digo, evita contestarme ¿vale?-

-Bien-

Entramos al salón donde se sentó en la parte de adelante cerca de la maestra, esta lo saludo y Lawliet correspondió aquel gesto

-Buenos días Lawliet-

-Buenos días maestra ¿Que veremos hoy en clases?-

-Hoy veremos a contar del 1 al 0 ademas de que dibujaremos para no salirnos de las lineas-

Lawliet asintió emocionado ya que eso se lo enseñe hace unos días atrás ya que le argumente que yo le podría enseñar mejor que un maestro, pues el estilo académico es una perdida de tiempo, de apoco llegaron más niños, era consiente que Lawliet no se el mejor al comunicarse como su madre o padre a pesar de eso trataría de ayudarlo.

-Buenos días pequeños, hoy veremos los números del 1 al 0-

La señora apunto cada uno de los números, rodé los ojos fastidiando mirando al rededor, la mayoría de los niños estaban jugando o comiendo cosas sin sentido pero pues no son concientes de aquello.

-Bien niños repitan conmigo, uno, dos...-

Lawliet y yo repetíamos los números yo por aburrimiento, el pequeño Lawliet por interés supongo que le enseñe bien pues los números los comparamos con algunas cosas ademas de formarlos en su cuaderno.

-diez, once...-

La maestra y algunos alumnos ya habían acabado de repetir aquello pero Lawliet y yo continuamos contando al menos hasta que la maestra nos detuvo, mejor dicho lo detuvo.

-Veo que ya te lo sabes Lawliet, te dejo colorear, en lo que los demás estudiamos los números-

Durante todo el tiempo trataba de ayudar al pequeño en no salirse de la raya, colocando mi dedo en las orillas de león que el había escogido, casi lo conseguía, aun que al final la campanada sonó, los dos caminamos a los columpios donde quería que lo empujara, se sentó y voltio a verme.

-Me columpiare muy alto-

Sonreí por que entendí que quería aquello pero cuando estuve apunto de ayudarlo a columpiarse unos niños llegaron tirandolo de espalda a lo que callo.

-A nadie le importa si te vas a columpiar, ademas estos son nuestros columpios-

Lawliet me volteo a ver esperando que hiciera algo, sus ojitos rasgados se cristalizaron, sin embargo me quede quieto mirándolo sereno, como si nada, el pequeño se levanto camino hasta una de las casitas de platico que estaba abandonada ahí limpio su ropita quise ayudarle pero este se aparto.

-¿Porque no me ayudo señor L?-

Sus ojitos volvieron hacerse llorosos, mirándome a lo que yo mire a otro lado pensando en no ser cruel, pero honestamente no había manera

-Por que no soy eterno pequeño-

-¿Qué?-

-Esta claro que estoy muerto, de eso no hay duda sin embargo... nadie te asegura que tal vez mañana no desaparezca o que tal vez que mañana dejes de verme, en pocas palabras no soy eterno pequeño... no estaré para ti aun que quiera-

-Señor L... prometame que hasta que desaparezca estará conmigo... por el meñique-

-¿Tanto así me quieres?-

-Le quiero tanto que podría buscar una manera de regresarlo a la vida con tal de ver a mi papá sonreir y que este a mi lado... tanto así lo quiero señor L-

Me sorprendió un tanto lo dicho por Lawliet... sin pensarlo más junte mi dedo pequeño al suyo para mostrarle que prometía aqullo.

-Lawliet me sorprendes... tu padre me hubiera reclamado ciertamente-

-No soy mi papá señor L-

-... Tienes razón, debo dejar de compararte con él-

Lawliet termino de quitarse la suciedad para estirar su mano, la cual tome.

-Quiero que durante el tiempo que este conmigo... solo usted señor L sea mi amigo-

-¿Por qué desearias eso?-

-Por que siento que es usted el primer amigo que tengo-

Me empece a reír por lo raro que fue aquello, pues eso mismo le dije a su padre, Lawliet abrió sus ojos cristalizados no solo por la caída si no por lo recién comentado.

-Señor L deje de reirse, yo no quiero que desaparesca-

Pare por lo dicho pues su voz estaba sonando más quebrada ademas de estar limpiandose el rostro con las mangas de su suéter, aparte sus bracitos para limpearle las lagrimas que no dejaban de salir con mis pulgares.

-Ya deja de llorar, aun me puedes ver-

-Quiero que mi papá me quiera como a usted señor L, soy un buen niño-

-Tu papá esta pasando por algo por eso debes quererle más, eres un buen niño Lawliet pero deja de llorar-

-No quiero dejar de verlo señor L-

El hijo de Light intento abrazarme pero como lo esperaba tropezó, me le quede viendo pero solo sonrió al recordar que no puede tocarme, le regrese el gesto con una sonrisa apenas visible ... Supongo que ahora tengo otra razón para quedarme aquí.

Solo un día másWhere stories live. Discover now