La historia de un Secuestro

VII.La super casa

Bajamos del coche, al salir, pude ver por completo lo bonita que era la casa.
Avanzamos por el jardín delantero, lleno de unas flores preciosas, llegamos a la entrada. Se detuvieron un momento para abrir y entramos.
Lo primero que vi fueron unas escaleras que habían justo delante, que iban tanto para arriba como para abajo.
A los lados, dos salas mas, a la derecha, el salón y al fondo el baño, y a la derecha el comedor, y al fondo la cocina.
- Sube - me dijo Skyler sonriendo - la habitación está arriba.
Subí las escaleras, de caracol por cierto , con barandilla de madera y unos hierros que bajaban en espiral hasta el suelo de mármol. Toda la casa estaba en colores amarillos suaves y bays.
Llegamos arriba, era una habitación enorme, y no exagero, pero me di cuenta de algo.
- Para que tiene dos camas?
- Ah no te lo he contado, antes había dos habitaciones, pero hicimos obras y decidimos juntarlas.
- Entonces...?
- Si - dijo ella sonrojándose.
Pero en seguida dejamos el tema cuando miré hacia la pared y vi la PS3.
- Ti- tienes la play 3?
- Si, con un par de juegos, jugamos?
- Nose me parece mal jugar a la consola estando mi familia como esta.
- Me han dicho mis padres que van a ayudarte a conseguir el dinero, pero que es una sorpresa y tendrás que esperar unos días.
- Como que una sorpresa? Lo siento pero no voy a quedarme sin hacer nada unos días, no hay tiempo.
- Tranquilo, confía en mi, lo solucionaran.
- Nose... Me siento mal.
- Tranquilo, total, se sincero, que pensabas hacer? No tienes ni idea de que hacer, estas muy perdido.
- Oye... - tenía razón.
- En unos días lo solucionarán, te lo prometo.
- De acuerdo.
Jugamos toda la tarde y casi toda la noche. Cuando empezó a amanecer decidimos irnos a dormir.
Al despertar, alrededor de las 5 de la tarde, lo primero que pensé fue el volver a jugar, pero Skyler me recordó que teníamos que comer.
Bajamos y sus padres estaban sentados en el sofá.
- Buenos días dormilones-dijo su madre.
-Vamos a comer algo- respondió Skyler- Espera aquí, ahora vuelvo.
Me senté en uno de los tres sofás, sus padres se quedaron mirándome, hasta que al final dije:
- Me ha dicho su hija que están intentando ayudarme.
- Si, así es, pero como te habrá dicho es una sorpresa, espera unos días-dijo su padre.
- De acuerdo.
- Por cierto, no nos hemos presentado, yo soy Bob, y ella Ally.
- Encantado, yo soy Jake- ya lo sabían, pero eso es lo que se solía decir.
Después de un rato incómodo, llego Skyler con una gran pizza.
- Subimos?
- Claro
Una vez arriba, nos comimos la pizza mientras hablábamos, descubrí varios de sus gustos, no teníamos muchos en común, diría que mas o menos la mitad.
Estábamos hablando tranquilamente cuando de repente empezó a llorar.
No hacia falta preguntar por qué, así que simplemente le dije que seguro que todo saldría bien. Intenté decirlo lo más convincente posible, por que no podía estar seguro de eso. Parece que se lo creyó, sonrió, dejó de llorar y me abrazó. Me dió las gracias mil y una vez, nose por qué, simplemente dije lo que sabía que necesitaba oír, pero al parecer, le bastó.
Unas partidas mas a la play y nos fuimos a dormir.