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Blair.
Veo a Jaden destrozado viendo cómo el auto de Anthony acelera alejándose de la casa. Carajo no pensé que las cosas pasarían de esta manera, pensé que podríamos hablarlo pero todo se fue a la mierda en solo segundos.
—Jaden..—susurro tomando con cuidado su brazo intentando buscar su mirada.— no te preocupes, vamos a arreglar esto, superar esto y volverá todo a la normalidad.
Entonces sucede, un Jaden que jamás ví se voltea con destellos de irá en sus ojos, se soltó de mi agarre como si le quemara y sonrió sin gracia negando.
—¿Que?¿Por qué diablos saliste, Blair?— escupió enfadado.— te pedí que te quedas adentro.
Intente acercarme a calmarlo, pero lo primero que hizo fue alejarse soltando un bufido. Mi corazón se hundió en mi pecho, él estaba echándome la culpa.
—Parece que quería empeorar todo, Blair, ¿Que carajo sucede contigo?— apreté los labios al escucharlo, salía veneno de sus palabras. Este no es mi Jaden.
—¿De qué hablas? Jaden, no puedes culparme por esto— sentí como mis ojos se llenaban de lágrimas por el dolor que mi corazón estaba sintiendo.
—Solo déjame en paz, alejate de mí— murmuró esta vez mirándome a los ojos, asentí pasando por su lado lo mire esta vez y negué.
Eso significa que hasta aquí llegan las cosas con nosotros.
Dicen que el amor duele, duele como un infierno cuando piensas que la persona que te ama, con la persona que piensas que pasarás toda la vida, pase lo que pase sabías que no ibas a poder vivir sin esa persona.
Pero en este momento lo único que pasó por mi mente sin importar cuánto mi corazón se esté hundiendo el mi pecho. Fue Jaden Hossler y Anthony Reeves, los mejores amigos inseparables.
