04 "Reto"

7.5K 832 654
                                    

Me adentro en el baño. Giro la manija del agua para que esta caiga sobre mí.
Enjabono todo mi torso desnudo para luego pasar shampoo sobre mí cabeza.

En mi mente se pasa aquel niño con delantal marrón y con una libreta en mano con el rostro sonrojado.
Hago énfasis en su boca, en sus labios abultados y rosados, que bien sería tenerlo sobre los mios, que lindo sería saborearlos.

¡Espera! ¿es amigo de Seungmin?, ¿por qué no le dije que lo invitara a la fiesta? ¡qué estúpido de mi parte!. Pero también me interrogaría "¿cómo lo conoces? ¿no era que los pobres no te agradan?" Y así con un sin fín de preguntas tontas que él suele hacer. Pero con respecto a la última pregunta, no me agradan, con excepción a Seungmin. Solamente para una noche, hacerlo mío, sería grandioso. Pero por ahora, lo tendría que hacer yendo a esa cafetería.

Cierro el agua y envuelvo mi cintura con una toalla.

No sé cómo, pero en mi mente se cruza una excitante imagen; Minho envolviendo mi cintura con sus piernas, mientras yo le beso el cuello.

¿Cómo alguien, con el que interactué solo por cinco minutos me podría excitar así?

Muevo mi cabeza tratando de que esa imagen se borre de mi mente, no quiero tener una erección con una simple ilusión. Aunque, conociéndome bien, haría lo que fuera para que se haga realidad.

Me visto rápido para salir del baño e ir a la sala. Bajando las escaleras, me encuentro con un grupo de personas, ¿tan larga fue la ducha?. Éstas están bebiendo y bailando, ¿qué no es muy temprano?, giro mi brazo izquierdo para fijar mi vista en el reloj, son las siete. En fin, yo haría lo mismo.

Va a ser una larga y movida noche.

—¡Jisung! —dice Seungmin colocando una mano sobre mi hombro, llamándome la atención—. Te presento a unos amigos —se acerca a mi oído—. Y por favor, deja tus actitudes de chico rico, solo por hoy, por mí, ¿sí?

Hizo un puchero con sus labios, lo que se me hizo muy tierno, pero yo solo hago una mueca en modo de aceptación, aunque no creo que llegue a pasar.

Seungmin me lleva hacia aquel grupo de personas, mientras que a lo lejos ví a una persona que me desagrada.

—Jisung, él es Félix, Chan y Changbin—son los chicos de la cafetería; el pelirosa, sentado en las piernas del que creo es su novio y el morocho con una bebida en la mano. Todos al ser nombrados asintieron. Si supieran que no me interesan, pero de todos modos sonrío, todo por Seungmin—. Y el que está por allí —señala la entrada principal—. Es minho.

¿Es el Minho que yo creo que es?

En mi rostro se forma una sonrisa. Ignoré a los demás, ellos no me importan, solo él.
Voy hacia Minho, pero una persona se me interpone en mí camino, deshaciendo mi sonrisa.

—Soobin —dije sin ganas, pero con mi vista puesta en ese niño.

—¿Cómo estás, lindo? —preguntó en un tono coqueto, tocándome el pecho con su mano.

—Eso no te importa —se me fue el humor completamente.

—Arrogante —dice con una sonrisa.

—Déjame en paz —pongo una mano en su hombro, empujándolo, pero al darme cuenta, Minho ya no estaba ahí.

—¿A quién buscas, Jisung? —Soobin es como el maldito mosquito que te molesta cuando duermes. Él es jodidamente parecido a mí.

Simplemente lo ignoro y me dirijo hacia Hyunjin.

—¿Has hablado con...—Iba a preguntar hasta que veo como una persona le toma la mano—. Jeongin —digo sorprendido, los rostros de mis menores se tornaron rojos—. Parece que sí, entonces, ¿es formal?

Ambos asienten cabizbajo por la vergüenza.
Me retiro de ahí yendo hacia el patio. Las luces que le hemos colocado le dan un toque vintage a este jardín tan vacío y grande.
Cerca de la piscina, sentados en uno de los sillones, visualizo a Seungmin con sus amigos y a ese pelinegro que logra hacerme una erección con tan solo una imaginación.
Voy hacia ellos, pero en una esquina se encuentra Soobin con sus amigos, ¿quién mierda los invitó?, bueno, eso no es lo importante.
Pero siento la mirada penetrante de aquel mosquito.

Al llegar, aquél pobretón pelirosa me sonríe, seguro necesita dinero.
Seungmin me tiende un vaso con cerveza, el cual acepto y bebo.
Mi empleado favorito se dió cuenta de quién soy. Abre sus ojos como platos y su rostro se vuelve rojo al notar que yo estaba delante suyo.

"No te hagas amigos de esos pobres, solo quieren tu dinero". Mi padre resuena una y otra vez.
Es solo una noche papá, lo hago mío y no lo volveré a ver.

—Jisung, Han Jisung —digo tendiendo una mano, ¿hay que ser amables, no? —. ¿me recuerdas?

—Lee Minho —dice con voz grave, haciendo que nuestras manos se toquen. Piel suave, muy suave.

Nunca quité la vista de su boca. Como me encantaría besarlo, pero todo a su tiempo.


Cerveza tras cerveza, ya estoy algo mareado, aunque todavía consciente de lo que hago.
He bailado, bebido, coqueteado con cualquiera, menos con él

Soobin no me ha quitado la vista de encima.

Los pobretones ya están embriagados, menos él.
Hyunjin se levanta de su asiento, separándose de Jeongin. Puedo jurar que es la primera vez que se separan en toda la noche.

—¿Jugamos verdad o reto? —dice aclarando su garganta.

Todos estaban casi dormidos, nadie respindió y yo solo largué una carcajada. Eso es un juego para niños.
Jeongin agarra a su, ahora, novio para que se vuelva a sentar, callándolo de un beso.
Quedé boquiabierto. De la nada, mi menor se volvió un atrevido.

Siento como una mano agarra mi brazo, jalándome hacia un rincón de la sala.
Acorralado por sus brazos pegado a la pared, a cada lado de mi cabeza, veo claramente que es Soobin.

—¿Verdad o reto, bebé?

¿A caso es un niño?

—No me vengas con esas estúpideces —trato de safarme de su agarre pero no puedo.

—¿Verdad o reto, bebé? —pronuncia de nuevo esas palabras, más lento, dejándome a entender que no tengo escapatoria si no elijo.

—Reto.

—Haremos una apuesta —su respiración choca contra mi oído, ¿qué esta tratando de hacer?—. He sido testigo de como mirabas a ese chico pobre, que fue invitado por tu otro amigo pobre —lo miro con seriedad, solo yo llamo pobre a mi amigo pobre.
No sé a donde quiere llegar.

— Te voy a dar un mes —ahora lo miro confundido—. Un mes para que enamores a ese pobretón y luego lo tires como la mierda que es, si lo logras, te dejaré en paz y te haré un cheque por todo el dinero que quieras por todo el daño que te he causado —ahora se me vino a la mente el parabrisas de mi auto dañado por culpa de suya—. Es solo enamorarlo, acostarte con él y lo descartas, sé como eres, lo tuyo es de una sola noche.

—¿Y si no lo logro? —mi voz suena interesada, pero me asusta su respuesta.

—Tienes que acostarte conmigo —dijo, mordiéndose el labio y pasando sus manos por mi cuello.

¿Si lo logro se alejará de mí? ¿A demás me dará dinero?
Todos caen ante mis encantos.

—Está bien, ¿un mes? —extiendo una mano para pactar la apuesta.

—Si es que no te rindes antes, entonces sí.

—Eso jamás, Soobin —una sonrisa se forma en mi rostro.

Una noche con él y seré libre, a demás dinero gratis.

Yo salgo ganando.

━ 𝑬́𝒍 𝑫𝒆𝒃𝒆 𝑺𝒆𝒓 𝑴𝒊́𝒐 ¹ ᯽ 𝑯𝒂𝒏𝑲𝒏𝒐𝒘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora