Todos ellos me observan como si quisieran detectar algún indicio de que lo que digo no es cierto, pero se convencen de que digo la verdad. Se genera un silencio incómodo y lo aprovecho para beber lo que queda de mi jugo.

-¿Hubo sexo?- Rocky rompe el silencio. Y mis hermanos se relajan.

-No tiene que haber sexo siempre, Rocky.- respondo tomando una tostada en las manos.

-¿Pero hubo?

-No seas estúpido, claro que hubo.

Luego de decir eso recupero el sentido del humor y todos reímos de una manera inexplicable, quizá por que notamos que somos adultos, ya no más adolescentes, y sin embargo seguimos viviendo por las historias, los chismes y los secretos.

Escuchamos a _________ despedirse y pronto aparecer por el corredor camino hacia nosotros y todos tratamos de hacer algo que no delate lo que estuvimos haciendo, por supuesto que fallamos epicamente y _________ me mira tratando de encontrar una respuesta a nuestra actitud colectiva de lucir despreocupados. Al ver que nadie dirá nada, viene a mi lado y me abraza por la espalda, yo continuó comiendo mi tostada para no levantar sospecha pero me ahogo en el instante que ella pregunta a qué se debían nuestras risas.

Riker, tratando de no reir, le responde:

-De hecho, hoy nos invitaron a una fiesta, la organiza Derek, es un amigo de la infancia, pero Ross parece más entusiasmado por regresar a su cama.

-Eso es genial.- dice ______ con auténtico entusiasmo.- ¿Por qué no vas?

Clava la mirada en mí y yo siento que estoy por caer en una trampa. ¿Quiere que vaya? ¿Quiere que diga que prefiero quedarme con ella? Claro que prefiere que diga que prefiero quedarme con ella, y yo estaré feliz de hacerlo.

-No se me antoja mucho ir de fiesta.- respondo y hago una mueca que la convenza.

Riker levanta los hombros dando a entender que se resigna.

-Yo creo que te divertirás.- insiste _______. Y siento sus dedos jugando con el borde de la camiseta cerca a mi cuello.- Además que tus padres se llevaron a los niños de compras, van a poner carpas en el patio y pasarán la noche ahí.

Mis hermanos la observan atentamente tratando, al igual que yo, de descifrar su verdadera intención. Y eso resulta incómodo.

-¿Podemos tener un poco de privacidad?- me quejo y automáticamente ellos se van de la mesa como si de pronto recordaran que mi vida no puede ser su entretenimiento.

Cuando nos quedamos solos la acerco a mi cuerpo.

-No te encontré esta mañana cuando desperté. Estaba casi seguro de que me prometiste despertarme de una manera que particularmente me gustaba mucho.- mis manos se quedan en sus caderas.

-Estabas dormido como una roca...

-¿Sabes que más puede ponerse como una roca?- le dejo un beso en el cuello y ella se aparta pero no lo suficiente para que quite las manos de sus caderas.

-Deberías aceptar ir con tus hermanos.

-Solo quiero estar contigo.- respondo, algo irritado ya por la insistencia en un tema que yo ya daba por zanjado.

-Puedo ir contigo.- y antes de que yo pueda protestar, ella añade.- Si tus hermanos están libres deberías aceptar pasar más tiempo con ellos, finalmente por ellos estamos ambos aquí.

Arrugo la nariz pero acepto que tiene razón, los momentos con mis hermanos son ocasionales y casi siempre falta alguno, quizá no volvamos a salir de fiesta en años ya que progresivamente vamos ocupándonos cada vez más.

Black (Ross Lynch) (Hot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora