Señor Optimista

62 8 0
                                    

🔞🔞🔞🔞

Todo comenzó con un beso.

¿Cómo es que termino enamorado?

¿Tan optimista era?

Claro que lo era el amor vuelve ciegos y sordos a los hombres y Steve Roger no fue la excepción.

Pero como llegaron a eso.
.
.
.
Un mes antes.

En un pequeño departamento de Brooklyn se encontraba dos jóvenes pasando el rato después de una semana intensa de trabajo.

Ambos sentados en el sofá bebiendo unas cervezas ya que en esa epoca del año hacía bastante calor y nada mejor para refrescar su garganta que esa bebida fría.

—Te aseguro que te vas a divertir—invitaba Bucky a su rubio amigo pues sabía que llevaba demasiado tiempo sin salir a divertirse de hecho dudaba que alguna vez lo hubiera hecho y eso debía cambiar.

—No lo sé yo no soy de ir a esos lugares—hablo Steve incómodo  a pesar de que agradecía la invitación él no era de ir a ese tipo de lugares a donde su amigo lo invitaba.

—Lo sé Punk, pero hasta alguien tan aburrido como tú debe divertirse de vez en cuando y me han dicho que ese lugar lo tiene todo—insistió alzando sus cejas sugerentemente —Sabes a lo que me refiero.

—No soy aburrido y se a lo que te refieres, pero yo no voy a pagar por sexo.

James solo lo miro como si hubiera dicho la peor mentira del mundo.

—Vale tal vez lo soy, pero aún así no pagaría por sexo—se negaba a hacer algo así para el hacerlo significaba algo más que placer carnal.

—Bueno ya lo vas aceptando—dijo no muy seguro sabían que el rubio tenía una moral impecable ante ese tipo de cosas, pero no perdida nada con intentar convencerlo—Ahora ve a cambiarte nos vamos en una hora—termino la platica y tomando el mando de la tele empezó a cambiar de canales ante la mirada reprobatoria de su amigo.

Steve soltó un suspiro y sin ganas de hacerlo realmente camino a su recamara tomo una toalla metiéndose al baño dispuesto a tomar una ducha.

Minutos después salió del baño se vistió con un pantalón de mezclilla, una camisa azul, una cazadora de cuero, se peinó pulcramente una vez listo se miró en el espero al ver que no se veía tan mal  salió de su habitación.

Bucky al escucharlo salir apago la televisión se puso de pie y mirando a su amigo sonrió no se veía tan mal.

—Te ves bien—halago Bucky a su amigo mientras se agacha a tomaba sus llaves, cartera y teléfono que se encontraban sobre la pequeña mesa de centro—¿Nos vamos en mi coche o en tu moto? —le pregunto al rubio que parecía no querer  salir de su casa.

—En tu auto no tengo ganas de manejar—respondió sin ganas de verdad no quería ir.

—Bien entonces andando —hablo mientras caminaba a la puerta para después salir.

Steve sin poderse ya negar camino detrás de él cerrando la puerta.

Sería una noche larga.
.
.
.
En un antro del centro de Nueva York se encontraba un castaño en un camerino vistiéndose con un pequeño short de cuero que resaltaba sus atributos.

Aunque él odiaba tener que venderse para poder sobrevivir no tenía otra opción al ser huérfano esa era la única manera que conocía para poder mantenerse.

—Tony ¿Estas listo? —preguntó una pelirroja que iba entrando al lugar donde el castaño se vestía si es que a lo que usaba se le podía decir de alguna manera.

Pequeñas historias, Basadas En Canciones O Momentos Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz