Señor presidente, no me casare de nuevo con usted

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Jing Mu estaba fumando

No era un hábito que él tuviera anteriormente, pero en los últimos tres meses su estrés había aumentado hasta el punto de fumar

Primero el constante rechazo de Cheng Huan era aun más humillante al saber que ella se había quedado embarazada de Gu Xian. ¡Ese cabron de Gu Xian que siempre estaba por delante de él!

Además, los negocios no iban bien. Tampoco iban mal, eso ya era algo, pero cada vez que quería avanzar y lograr darle más poder a su empresa era como si fuera frenado. Y no había ocurrido una sola vez, había ocurrido varias veces

Tratos que se cancelaban o perdían beneficios. Aliados que se marchaban en el último minuto para volver como si nada hubiera pasado. ¡De esta manera la empresa no podría crecer!

¡Así no podrían llegar al siguiente nivel, no podría derrotar a los Gu y demostrar de una vez por todas que era el mejor!

Dejar de estar en la segunda línea y pasar a la primera línea, como se merecía. Como había luchado todos los días de su vida desde que era un niño por lograr. Para que no le consideraran un rico de tercera categoría

La familia Jing se hizo rica en la generación de su abuelo, antes de eso eran simples agricultores ordinarios. Su abuelo mismo había conservado la granja de sus antepasados intacta para no olvidar sus orígenes humildes.

Y, aunque talentoso y lleno de determinación y orgullo, había tenido que bajar su cabeza casi toda su vida. Porque no era un rico de la clase alta de verdad. Acababa de ganar su fortuna y la gente solía decir que tenia aun barro bajo las uñas

Su padre, por su parte, no era tan ambicioso como su abuelo. Era y seguía siendo un hombre tranquilo que hizo crecer la empresa con lentitud y seguridad. Mucha lentitud. No hizo enemigos pero era conocido como un hombre bastante ingenuo así que muchos no se lo tomaban en serio. Pero hacia contactos con facilidad y era invitado con frecuencia a fiestas dado lo agradable que era.

Su padre era una mariposa social que volaba con facilidad entre las plantas venenosas y las arañas que conformaban la cúpula de los negocios.

Pero Jing Mu quería hacer crecer su empresa aun más. Más grande, más fuerte. Y sabía que podía lograrlo

Pero había una barrera que no podía romper, pese a la mariposa social que tenia por padre.

La barrera del círculo de las antiguas fortunas.

Allí, las cantidades que él movía eran simplemente calderilla. Era un lugar donde se podía convencer a los políticos para que las leyes se volvieran en su favor. Pero, para lograr entrar a ese círculo, tenía que casarse con una mujer de esas familias antiguas

Y encontró a la perfecta gracias a un amigo. Ella tenía doce o trece años, Cheng Huan. Con un compromiso no oficial con un hombre diez años mayor también del mismo circulo. Que el matrimonio pactado se rompiera fue un regalo del cielo. Y enamorar a Cheng Huan también fue fácil

Pero ahora era como si todas las puertas abiertas anteriormente se hubieran cerrado de golpe

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Cheng Huan estaba enfadada mientras caminaba por el pasillo.

Su vientre de embarazada había surgido de la noche a la mañana y la gente parecía haber tomado constancia de que estaba embarazada de golpe. Y por alguna razón eso enfadaba bastante a Cheng Huan a pesar de que se acercaba al sexto mes de su embarazo.

La gente había empezado a hacer cosas y verla de menos en el ámbito de los negocios. Si otro hombre la ayudaba a caminar o apartaba una silla para ella.... Mordería cabezas, literalmente mordería cabezas