❪ 3O. SELFISH ❫

Start from the beginning
                                    

Me negaba a creer que Cinco era un asesino, uno a conciencia.

Un nudo se había instalado en mi pecho, como si presionaran el final de mi garganta haciéndome casi imposible hablar, y el que hablara tan bajo lo hacía aún más difícil, pero me negaba de alguna forma a que ella me escuchará.

—No viviste cuarenta y cinco años en ese infierno para que cuando finalmente pudieras salir... No volverás —más que una pregunta, me trataba de convencer a mi misma de ello.

Levantó mi mirada, que no tenía idea de en qué momento se había agachado.

—Lo arreglaré, lo arreglaremos todo —aseguro, pero aquellas palabras que me incluían me habían tomado por sorpresa.

Me aleje, como si su solo tacto quemara, aunque muy contrario a ello, el escozor tan solo se debía a la falta de este.

—¿Lo arreglaremos? —mi tono de voz había aumentado, el nudo me impedía seguir hablando por lo bajo, por lo que levantando este era la única forma en la que podía seguir confrontandolo —¿No me escuchaste acaso?

Su ceño se frunció ligeramente, estaba confundido.

Habían miles de palabras cruzando por mi mente, pero parecía que ninguna encontraba su lugar, las frases que se formaban no tenían sentido alguno.

—¿O de nuevo no importa? ¿En algún momento pensaste si quiera en qué es lo que quiero? —su cuerpo se tenso, no soltó palabra alguna, y supe en ese momento que había vuelto a pasar.

Podrían pasar siglos incluso, y Cinco no cambiaría ni un poco. No cambiaría ni por el mismo, y yo ya me había cansado.

Un inevitable suspiro escapo de mis labios, deje caer mis brazos a mis costados, observandolo bien en lo que suponía sería la última vez.

—No lo estas entendiendo, Cherry —trato de acercarse aunque de manera simultánea evite su tacto.

—Claro, perdona Cinco, olvidaba que soy demasiado ingenua para entenderte —hable con ironía, mordía su labio inferior constantemente —Vamos a arreglarlo —escupí aquellas palabras con tanto odio que la sensación que había quedado en mi boca.

—Cherry, escúchame —trato una vez más de tomar mi mano, y por un segundo agradecí que mi padre fuera un obsesionado con la perfección, evite que me tocara moviéndome cada vez más lejos de él, pero aún así  lo suficientemente lejos de ella —Pense que estábamos juntos en esto, que querías proteger a nuestra familia también  que querías estar conmigo —su voz había sido tan baja que me confundía aún más no sabía si era porque estaba tan afectado como yo o porque no quería que ella nos escuchará.

—Esto no se trata solo del apocalipsis, esto se trata de toda nuestra vida, Cinco —mi voz comenzaba a tomar fuerza, poco a poco. Y sabia que ella podía escucharme, pero que más daba ahora... Si no el no me escuchaba ahora y se iba, no tendríamos otra oportunidad para hablarlo —... ¿En algún momento pensaste si quiera en como me siento? —cuestione.

—Cherry... Cariño, por favor, no lo entiendo —se había acercado lo suficiente para colocar sus manos sobre mi rostro una vez más, pasó su pulgar por mi mejilla, limpiando una lágrima que no había notado que caía —Siempre he tratado de hacer lo mejor para nosotros, ¿no es eso lo que debemos hacer?

¹ 𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘 | cinco hargreeves (reescribiendo)Where stories live. Discover now