❪ 29. THE HANDLER ❫

Start from the beginning
                                    

-No estoy alucinando, ¿cierto? -el negó.

Estaba ahí, frente a nosotros. Una mujer en un elegante saco largo de piel negra, con cabello blanco perfectamente peinado y un, lo admitía, ridículamente pequeño sombrero negro sobre su cabeza que cubría su rostro ligeramente con un velo.

-Buen truco, ¿No lo creen? -nos pregunto, levantando el velo y después unas enormes gafas negras -Hola, Cinco -su mirada entonces fue hasta mi, que me encontraba a un costado del castaño. Su penetrante mirada era imposible de ignorar, y mucho menos si me observaba tan lentamente, analizando cada parte de mi -Vaya... Que suerte tienes -fruncí el ceño, lo había dicho tan al aire que no sabía a qué se refería.

No dejaba de observarla tampoco, incluso cuando su penetrante mirada se encontraba nuevamente en Cinco, y comenzaba a sentir la extraña tensión en el aire.

-Ah, no me malinterpretes, linda -me removi un poco, cruzando mis brazos sobre mi pecho -Son muy lindos juntos, una ternura -arrugó el puente de su nariz al mencionar aquello. Dios, que incómodo era esto -Es bueno verte de nuevo, Se siente como como nos hubiésemos conocido ayer, eras más viejo entonces...

Resople aburrida, y ahora la mirada que sentía encima sabía que no era de aquella alta mujer de negro.

-¿En realidad es muy necesario el discurso sobre lo mucho que se extrañaron? -me queje antes de que continuará hablando -Sin ofender, no te conozco de nada -me excuse al instante -Además, he tenido unos días horribles, de pesadilla y creo que después de mandar una orden para asesinarlo no deben ser los mejores amigos -el castaño trataba de reprimir una sonrisa de lado, soltó un suspiro por lo bajo, negando lentamente.

-Oh, no tomara tanto tiempo, linda -y ahí iba otra vez, su tono sonaba como si estuviera hablando con una niña. Lucía como una, pero no lo era -Pero, ya que veo que has tocado el tema de "tratar de asesinar a Cinco"... -volvio a mirarlo -Felicidades por la regresión de edad, realmente nos despistó -me estaban cansando, desviandose del tema que se suponía nos tenía aquí.

-Me gustaría tomar crédito de eso, pero solo calculé mal las proyecciones de la dilatación del tiempo y, bueno, ya sabes, aquí estoy -Cinco soltó un suspiro, señalando su cuerpo uniformado.

-Sabes que tus esfuerzos son en vano -la encargada hizo una mueca al decirlo -¿Por qué no me dicen que es lo que quieren realmente?-cruzo sus brazos detrás de su espalda, sosteniendo su maletín con una de sus manos.

-Queremos que le pongas un alto -respondio Cinco, asenti secundando la idea, después de todo, era lo que importaba.

-¿No han notado que lo que quieren es imposible?, incluso para mí. Lo que debe ser, será. Es nuestra razón de ser -sonrio, como si lo que hubiera dicho arreglará todos nuestros problemas.

Pero no era así, de hecho no servía de nada.

Cinco suspiro, me miró por un instante antes de meter la mano en uno de sus bolsillos, mismo del que saco un arma y apunto a la encargada frente a el.

-De acuerdo... -solte algo aburrida también, comenzaba a dolerme la cabeza -¿Y que hay de la supervivencia como una razón? -cuestione.

-Sere reemplazada, chicos. No soy nada más que un engrane en una gran máquina -respondio, alargando cada palabra -Esta fantasía con la que se han alimentado, usar a su familia para detener el apocalipsis -con cada palabra daba un paso más cerca a nosotros -Es solo eso... Una fantasía, aún que debo decir, estamos bastante impresionados con su iniciativa. Tu determinación -el agarre de Cinco en el arma iba lentamente aflojandose, trate de hacérselo entender tan solo mirándolo, pero parecía tan absorto en lo que escuchaba que parecía inútil -Es verdaderamente, algo notable. Por lo que queremos hacerte una propuesta, ¿que te parecería una nueva posición en la comisión? -y aquellas palabras habían logrado tomarme por sorpresa, mi respiración se entrecorto ligeramente y pude notar como se volvía un poco más pesada. Trate de mantenerme quieta, procurando que no notará lo mucho que me había descolocado aquello -En administración -sonrio una vez más, Cinco me miro confundido, me encogí de hombros sin entender muy bien la situación -¡Oh! Por su puesto que puedes llevar a Cherry, si eso te hará aceptar, claro -y volví mi vista a ella al instante.

-No, Cherry no va -me defendí con molestia, aunque Cinco hablo al mismo tiempo.

-¿Que dijiste? -pregunto el pelinegro.

-Trabaja con nosotros, sabes que perteneces ahí -ahora se dirigia solamente a el, ¿que acaso a nadie le importaba lo que yo quería?

Pero algo me alarmó, Cinco mordía su labio inferior con constancia, sabía que lo estaba pensando, pero el no podía estarselo planteando realmente, no nos haría eso.

-Eso no funcionó la última vez -respondio finalmente, solté el aire que ni siquiera note que había estado reteniendo.

-Pero esta vez no estarías en la división de correcciones, estoy hablando de... -hizo una pausa dramática -La sede central -agrego con emoción, moviendo sus manos como si aquella fuera la mejor noticia que habíamos recibido -Con un mejor plan de salud y pensión, eres un profesional distinguido... En pantalones cortos -dijo eso último mirando el uniforme de Cinco.

Y esa era la mayor estupidez que había escuchado, ¿volver ahí? Si había escapado en primer lugar tenía una razón, ¿por qué querría volver a lo que lo llevo al borde del delirio? ¿y que tenía de especial aquel plan de salud y pensión?

-Ahora, Cinco, tenemos la tecnología para revertir el proceso, digo, no puedes ser feliz así -señalo su cuerpo en adolescencia por segunda vez, lo mire también.

-¿Que tiene de malo que se vea así? -pregunte confundida, ella se encogió de hombros.

-Tambien podríamos hacerlo contigo -agrego mirando mi cuerpo, desvíe la mirada, seguía siendo incómodo.

-Estoy bien así -bueno, no, no lo estaba, era un gran obstáculo que me viera como una niña, pero ir con ella me haría desaparecer de la vida del resto de las personas que conocía, y ahí no sabría como explicarles eso.

-No estoy buscando felicidad -se limito a decir Cinco.

-Todos buscamos felicidad -y lo siguiente que hizo, junto a la reacción de Cinco me confundieron aún más. Acariciaba su mejilla, de una manera tan íntima que solo tornaba la situación cada vez más incomoda para mí.

Lo dije, y lo repito, ten-sión.

Cinco trato de cruzar su mirada conmigo, podía sentirlo, aunque yo tenía la mirada en otra parte debido a lo raro que se había vuelto todo. Elevó el arma nuevamente a la encargada que se sobresalto y alejo su mano de su mejilla.

-No -me apresure a negar, notando como Cinco estaba dejándose llevar, aunque mi voz salió un poco más elevada de lo que deseaba, ambos me miraron -Esto no solo se trata de Cinco o... De mi -agregue al recordar que también estaba incluida en eso -¿Qué hay sobre ellos? ¿Qué hay sobre nuestra familia? -cuestione

Y por su mirada, sabía que no habría nada bueno.

¹ 𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘 | cinco hargreeves (reescribiendo)Where stories live. Discover now