-kookv-
(déjame verte para encontrarte) Yo no pedí sentir esto por ti, y aunque solo nos hallamos visto una ves, te fuiste metiendo poco a poco y ahora no se que hacer con eso, con esta necesidad de saber de ti, de pensarte, de sentirte y de amarte...
Finalmente llegó el fin, nada especial cómo siempre llegó tarde ya eran las 11:00 y él apenas venía llegó una hora más tarde, al subir al carro me di cuenta de que no estaba Bo-Gum, se me hizo raro pues siempre al igual que yo íbamos todos los fines de semana.
-Hola- dije un poco cansado, pues ya era muy tarde y yo siempre me acostaba temprano -Hola- me contestó la sra. Bogum
Me puse mis audífonos y me quedé dormido.
-Tae- sonó una voz tenue -Que pasa papá- conteste con los ojos entre abiertos -ya llegamos-
Me baje, y me fui directo a mi cuarto para cambiarme la pijama me acosté y me quede dormido en segundos. A la mañana siguiente mi padre tenia que ir al centro de Seúl al parecer a comprar algo de su bici, y por asuntos de trabajo, llegamos y nos metimos en un estacionamiento, pasamos por varias tiendas. Ya me había cansado llevábamos 2 horas caminando bajo el sol.
-Esperen aquí no tardó- dijo mi padre mintiéndose a un local
Nosotros nos sentamos en una banca que estaba afuera del local, estaba aburrido ya se había tardado, aparentemente soy un poco desesperado, de repente vi pasar a una familia en ella una niña y un chico con cabellera negra, ojos color café claro, al parecer se habían parado a preguntar algo al mismo lugar, volteé a verlo directamente a sus ojos ya que estos me tenían realmente cautivado, sentí un escalofrío en todo mi cuerpo al sentir un mirada de aquel chico hacia mi, baje la mirada sonrojado volví a dirigir mi vista a si arriba esta vez sin hacer contacto con aquel chico, prestando atención en lo que le decía el señor que atendía el lugar "está agotado señorita". Realmente me interesaba poco lo que le había preguntado, pero no sabía a qué otro lado mirar para disimular mi nerviosismo. Cuando se retiraron aquel chico volteo a verme, yo lo seguí viendo hasta que se perdió en la multitud, me había quedado atónito, al voltear la mirada vi a mi padre salir , al parecer había comprado muchas cosas.
-listo esto era lo único ya vámonos-
Caminamos a la dirección contraria en la que había ido aquella familia. Finalmente al llegar al estacionamiento donde estaba el carro y subirnos, fuimos a comer y pasamos a recoger algunas cosas y volvimos a casa. Yo aunque pareciera loco o extraño no podía sacarme a aquel chico de la cabeza.
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