《LA PRIMERA PELIRROJA》JAMES POTTER

{We're back, bitches}

Malia, intentando no sonrojarse al notar la intensa mirada de james en su cuerpo, sonrió ladeando la cabeza — ¿disfrutando las vistas Potter?

Acto seguido, James sacudió la cabeza. Por morgana, malia era su mejor amiga, se recriminó al instante, malia no era objeto de miradas así, tan solo estaba creciendo y las hormonas hacían un gran efecto en ella, cosa que puso en alerta al joven.

Tendría que tener un tercer ojo de ahora en adelante para vigilar a los depravados sexuales.

Tan perdido estaba en sus pensamientos que no se esperó el peso muerto de la chica cayendo encima.

— Quita ese ceño fruncido anda — dijo la pelirroja sonriendo encima suya — ¡nos vamos a hogwarts!

James agarró a la joven de la cintura para que no se cayera mientras escuchaba a la joven reír. Jamás se cansaría de ver a malia sonreír.

— Hoy me estás observando mucho miope — dijo la pelirroja sonrojada.

¿Se ha sonrojado por mis miradas? Se preguntó James. Negó con la cabeza.

— Los monumentos siempre tienen que ser vistos y revistos pecas — dijo james acariciándole la espalda.

La pelirroja tuvo que apoyarse en el pecho de james para que no notara su sonrojo y se burlara de ella. ¿Que le pasaba aquel día?

Había entrado por la puerta y no quería admitirlo pero su mirada se desvió hacia el torso desnudo de su mejor amigo, porque si, señores y señoras, malia se encontraba encima de un james desnudo. Por arriba, claro está.

Luego había venido la intensa mirada de james hacia ella entera que puso sus pelos de punta ¿porque le había mirado así y porque le había electrizado de aquella manera?

Sabía que el cuerpo de su mejor amigo estaba cambiando, la pubertad y el quidditch le ayudaban bastante pero... joder, era su mejor amigo.

— Maly, ¿me estás escuchando?

— ¿Qué?

James soltó una pequeña risa que hizo a malia moverse encima suya — decía que que expectativas tienes de este año.

¿Qué que expectativas tenía? Pues las de siempre, hacer bromas todos los días, hacer nuevas amistades, descubrir nuevos rincones del castillo, sacar las mejores notas, ganar la copa de quidditch...

Aunque aquel año debía añadir una más.

— Las de siempre jamie... bueno, y ayudar a remus con su ppp.

Al instante, malia notó como james se tensó abajo suya. El pelinegro no quería involucrar a malia en nada que concerniera al "pequeño problema peludo" de remus. Aún se despertaba algunas noches con pesadillas de malia muerta, no, se negaba a pasar por algo parecido.

Además, como si fuera poco, se lo había jurado a alec.

Porque claro está, los merodeadores no se iban a quedar sin hacer nada por ayudar a su amigo. Durante todo el verano, sirius peter y el habían buscado información para ayudar a remus, y habían conseguido cierta, pero nada suficiente. Sabían que el hombre lobo se podía volver más dócil con los animales, que había algunas lunas llenas peores que otras y que los días antes de la luna llena el hombre lobo solía estar de un humor de perros.