【🌊】𝐅𝐚𝐤𝐞 𝐏𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐬
𝐃𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐑𝐚𝐯𝐞𝐧, una hija de aristócrata francesa, se ve forzada a abandonar su país después del asesinato de su madre y a refugiarse en la isla de Outer Banks. Pero todas las mentiras con las que ha estado jugand...
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No creo poder describir en palabras como me sentía en ese momento. A mi alrededor el sol amanecía al otro lado del horizonte de Outer Banks, las gaviotas volaban por encima de mi cabeza graznando hambrientas y las olas llegaban hasta la arena para convertirse allí en espuma. Todo era tan normal a mí alrededor que era casi inimaginable el dolor que sentía yo por dentro. Sentía mi pecho arder, y dolía, dolía pensar que ahora me odiaba. Avance por la arena hasta llegar a casa de John B, ahora ya nadie vivía allí así que para mi era puerto seguro. Cuando iba a forzar la cerradura gire la cabeza hacía el mar, sus aguas eran tranquilas y reflejaban el color anaranjado del cielo. ¿De verdad quería encerrarme?
Trepé entre las ramas del árbol más grande del jardín hasta llegar a la parte más alta y me senté allí, frente al océano. No quería pensar, no quería sentir, no quería sufrir más. Dejé las lágrimas caer y borrar todo el dolor, lista para vestir una máscara de aparente normalidad. Pero las lágrimas solo trajeron a mi más y más dolor. Agarre con fuerza la camiseta de la parte del pecho y tire de ella despegándola de mi piel para dejar de sentir que me ahogaba, pero no funcionó. Cerré con fuerza los ojos y apreté los dientes ahogando los gemidos de dolor. Si eso era tener el corazón roto... imposible, el mío se había quedado con el de JJ.
Seguí llorando, dejé que la brisa me acunara entre las hojas del árbol y que las olas ahogaran mi dolor.
Cada vez que había provocado dolor a personas ajenas, si hubiese sabido que se sentían como me estaba sintiendo entonces, habría obrado de otra manera, aunque nunca hubiese conocido a JJ y aquello me hubiese traído a mí la muerte.
...
Caminé con la vista pegada al suelo arenoso hacia la casa de JJ para encontrarme con los demás. Sabía que no podía ocultar las horas que había pasado llorando, tenía aun las mejillas rosadas y los ojos rojos.
-¡John B! -se oyeron gritos des de lejos y tuve el tiempo justo para apartarme y no ser atropellada por una moto. Me gire mirando al conductor, era John B. Tras de él aparecieron corriendo Kiara y Pope, JJ no estaba y no sabía si eso me aliviaba o dolía aún más. Quería verlo, realmente lo quería, pero no quería el dolor que aquello supondría.
-déjalo Kie -dejo de correr Pope a mi lado- déjalo...
Andamos juntos hasta casa de JJ. Y lo vi. Tenía el pelo rubio atrapado bajo una gorra roja y vestía una camiseta sin mangas de color blanco. Sus ojos se deslizaron por mi cuerpo hasta los míos, los tenía rojos y las ojeras eran mucho más profundas de las que jamás le havía visto.
-¿qué haces aquí? -su voz sonaba cortante y asqueada.- vete.
-no -negué y el volvió a mirarme con furia esta vez- estos también son mis amigos y el tesoro lo buscamos juntos.
