CAPÍTULO 25 (CORREGIDO)

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Sobre todo, por qué Boris le dijo que irían dentro del mes a verlo.

Aww reencuentros familiares, son adorables, ¿No?

Lo mismo pensaba Tania, los días para ver a su familia en persona otra vez estaban contados.

Nunca se había sentido tan feliz, estaba en ese momento de la vida en el que estabas a punto de conseguirlo todo. Sus hermanos en buenas escuelas, su madre cerca donde podrá cuidarla una enfermera, unos meses más en ROM y un chico bueno que podría llegar a ser su novio.

Ya era seguro, estaba enamorada de Adrien, estaba tan hipnotizada por el hombre que negarlo sería ridículo. Sabía que a él igual le gustaba, lo notaba en la forma que le sonreía, le habla o simplemente se sentaba a su lado mientras comían en su sofá.

Le gustaba la forma en la que la escuchaba hablar sobre su familia, como se daba cuenta de que la había pasado mal después de estar con un cliente o el simple hecho de notar que necesita un abrazo.

Era el hombre que siempre había deseado conocer, en realidad era ese hombre que toda mujer deseaba tener y ella se sentía afortunada de hacerlo.

Hanna decía que no se hiciera ilusiones hasta que no tuvieran sexo, ya que si no era bueno en la cama lo demás no lo recompensará.

A diferencia de lo que decía su amiga, Tania pensaba que no importaba si era malo en la cama, seguiría siendo el hombre perfecto.

Y hablando de la rubia, Tania ya la amaba, le gustaba juntarse con la chica, incluso le hablaba de Adrien y ella la escuchaba, claro que cuando se ponía empalagosa la conversación, Hanna soltaba comentarios sobre lo asqueada que estaba al respecto.

A Tania le divertía que su amiga fuera sincera.

Iban al cine, de compras y algunas veces a otras discotecas donde la chica le insistía que intentara irse a la cama con otro chico, pero Tania solo pensaba en Adrien y sentía que irse con otro chico sería traicionarlo.

Aun cuando no tenían nada y cada noche, hombres adinerados se adueñaban de su cuerpo.

Hanna no la entendía, y Tania se rendía a la hora de explicarle por qué ella nunca sabría lo que es estar enamorada, es Hanna Morgan, ella solo se ama a sí misma, y así sería siempre.

Todos se daban cuenta de lo feliz que se sentía, incluso sus clientes lo notaban, y pensaban que sus embestidas eran la razón de eso, qué equivocados estaban ellos.

Riámonos de ellos por pensar que ella disfrutaba tener sexo con los clientes.

Su felicidad después de estar con un cliente, se debía a que luego iría a la casa del príncipe azul y tomarían desayuno — Cena para ella. — Juntos antes de que él fuera a la universidad.

Oh diablos, Tania era muy feliz en ese entonces, ¿Quien en su lugar no lo sería?

En esos días había una persona que no estaba feliz, era una persona que estaba sumergida en la tristeza.

¿Adivinan quién?

Alice Romanov, la chica que viene de la dinastía incestuosa y chiflada. Resulta que su prometido era gay y estaba enamorado de un americano.

¿Cómo nunca me di cuenta?

¿Por eso no veía a otras chicas cuando éramos pareja?

¿Por eso en el sexo sentía que no era él mismo?

Alice se hacía mil preguntas, pero no se atrevía a preguntarle a Adrien si lo que tuvieron fue falso, no podría con el dolor de que su única relación fuera falsa. No sabía qué hacer, tenía su vida planeada junto a él, y sin él, ya no estaba de qué sentido tenía seguir viviendo.

Escapando del infierno (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora