—Me alegra saber que la pasas bien, ¿te parece si vamos a tomar algo?— Y como si tuviera una alarma, Jennie reaccionó de inmediato y tomó la muñeca de su amiga para llevársela de ahí.
—¡Jisoo, necesito que me acompañes al baño!— amabas salieron como rayo de ahí y Jisoo apenas pudo mover la mano a manera de despedida, dejando al apuesto chico de ahí.
—¿Qué pasa? estaba hablando con Jinyoung.— dijo Jisoo con el ceño fruncido debido a la repentina acción de su amiga.
"piensa Jennie, piensa"
—Uhm... Solo no quería que hablaras con el, he escuchado cosas malas de el, no quería que te hiciera algo.— un sentimiento de culpa se instaló en el pecho de la castaña, el chico era realmente dulce pero no quería que tomara el amor de Jisoo.
Jisoo solo sonrió agradeciendo el gesto de su amiga, pasaron unos minutos cuando la pista de baile abrió paso a toda la gente y por supuesto Jisoo corrió hacia ella, haciendo su mayor intento para bailar acorde a la música. Jennie se quedó cerca sin intención de bailar, pensó que todo iba a ser tranquilo hasta que vio como un chico se le acercaba bailando.
Sintió su pecho latir de forma dolorosa, quería dejar de sentirse así, detestaba sentirse así porque sabía que si hacía algo para impedirlo todo saldría mal, intento controlar aquella sensación que no sabía cómo llamar pero fue imposible al ver cómo Jisoo recibía al chico con una sonrisa y el colocaba sus muñecas con los hombres y se movían al ritmo de la música.
No pudo controlar su cuerpo y por inercia propia corrió hacia la chica de cabello morado.
Detente, por favor no hagas lo que estás a punto de hacer, Jennie. Se repetía para si misma mientras se acercaba a ambos chicos.
—¿Qué pasa? estaba bailando y la estaba pasando bien.— dijo Jisoo después de que Jennie la tomara de la muñeca y la arrastrara fuera de la pista de baile.
—Lo lamentó.— bajo la mirada.— Es solo que no me siento muy bien.
Fue lo único que se le ocurrió decir. Algo tonto.
—¿Te sientes mal? ¿Te duele algo?— cuestionó Jisoo asustada abriendo un poco los ojos a modo de asombro, Jennie solo señaló su ojo haciendo referencia al dolor (inexistente)— Déjame ver.
Jisoo uso una de sus manos tomó la barbilla de la castaña y acercó su rostro para examinar, quedando demasiado cerca, tanto que podía sentir la respiración de la mayor sobre su piel, sintió sus piernas temblar ante el contacto y pudo jurar que si corazón iba más rápido que otras veces. Entro en pánico y se separó de golpe.
—¿Qué pasa? ¿Te lastime?— Jisoo hizo un puchero. Jennie negó.
—Iré a checar al baño.— dijo mientras se daba la vuelta y se dirigía al mismo.
Al llegar al baño puso el seguro y sintió como las lagrimas se avecinaban. Odiaba sentirse así, odiaba no ser correspondida, odiaba el amor. No quería a Jisoo solo para ella, no, pero quería que supiera de sus sentimientos, lamentablemente no podía, no si quería continuar cerca de ella. Sabía que lo que había hecho anteriormente estaba mal, Jisoo tenía todo el derecho a hacer su vida amorosa con quien quisiera, pero ella quería ser esa persona.
Secó las lagrimas que habían salido y con aquel ya conocido dolor el el pecho salió dispuesta a dejar el lugar, no quería arruinarle la noche a la chica de cabello por sus tontas acciones, pero cuando miro a su derecha pudo observar cómo la nombrada entablaba una conversación con una chica la cual parecía tan feliz como ella, podía escucharlas reír, sintió su corazón romperse. Estaba dispuesta a irse hasta que vio como la chica que hablaba con Jisoo tocaba su cabello. Y todo el dolor que sentía se convirtió en ira.
Rápidamente corrió hacia ellas y tomó a Jisoo para sacarla de ahí, la cual forcejeó con ella y soltaba algunos quejidos pidiendo que la soltara.
—¡¿Qué démonos te pasa ahora?! Estas insoportable.— dijo claramente enojada a la vez que azotaba su pie.
—Y-yo... e-es que te vi hablando con esa chica y-
—¿Y qué? Desde que llegamos no puedo hablar con nadie sin que vengas a arruinarlo, Jennie.— la interrumpió y sintió como cada palabra entraba a su corazón como un cuchillo.
—No eres mi puta dueña, ya no tengo cinco años para que estes detrás de mi todo el tiempo, ¡¿por qué haces todo esto?! es ridículo, no tienes control alguno sobre mi.— y todo lo que dijo era verdad.
—¡Tal vez lo hago porque me gustas!— espetó sin pensar ni una sola palabra.
Mierda, mierda y más mierda, pensó Jennie al darse cuenta lo que había dicho, sintió como su corazón dejó de latir y las lagrimas amenazaban con salir en cualquier instante. ¿Qué había hecho?
—¿Qué dijiste?— dijo Jisoo acercándose a ella con el rostro tan confuso.
Tampoco pensó las cosas cuando en menos de un segundo atrapó las mejillas de Jisoo y cortó el espacio que las separaba con un beso. Todo lo que siempre soñó se estaba cumpliendo pero por algún motivo no es como lo imagino, tal vez porque sucedió de la peor forma existente y por existir. Sus lagrimas llenas de impotencia y dolor bajaron sin cuidado, haciendo que se separaran y tallara fuertemente sus pómulos para secarse.
Agacho la mirada y notó que sus manos temblaban, iba a correr dispuesta a esconderse en su casa y no salir de ahí jamás, pero su acción fue interrumpida al sentir como Jisoo la jalaba del brazo y... ¿la beso?
¡Si! la estaba besando, le tomó unos segundos continuar el beso porque no sabía cómo reaccionar, ¿el amor de su vida? ¿Kim Jisoo? ¿El crush de una gran parte del colegio la estaba besando? ¿besando a Jennie? Parecía un sueño, y si lo era, pidió que no la despertaran jamás.
—También me gustas, Jennie Kim.
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// no estaba segura de publicar esto porque no sabía si era un forma de romantizar conductas algo tóxicas :( espero que no.
