- Tú me estás lastimando - soltó Taehyung, armándose de valor, alzando la mirada, mucho más determinada ahora.

Jungkook se quedó de piedra, viéndole con el ceño fruncido, mientras el otro se alejaba un paso de él. Con decisión, volvió a asegurar el bolso sobre su hombro, y tomó el asa de la maleta, para marcharse de una vez de esa casa.

- ¡Taehyung! - vociferó el castaño, interponiéndose delante de la puerta, sosteniéndolo nuevamente de los brazos, sin ninguna delicadeza, casi sacudiéndolo, haciendo caer el bolso de regreso al suelo - ¿Cómo puedes dejarme así? - el menor estaba siendo dominado por su desesperación - ¡Eres un idiota! ¿No te das cuenta de todo lo que siento por ti? - el rubio abrió los ojos como platos, ante la repentina reacción del otro - ¡No puedes simplemente marcharte y dejarme! - lo sacudió con más fuerza, enterrando las yemas de sus dedos en los brazos del otro - Después de todo lo que hemos compartido... ¡Después de dejarte entrar en mi corazón!

- ¡Suéltame! - exigió con furia, empujándolo lejos - ¡Jamás te pedí que lo hicieras! - le increpó - No pretendas que me sienta culpable ahora.

Jeon pasó una mano por su cabello, viendo salir de su casa a Taehyung, como alma que lleva el diablo.

- ¡NO! - gritó a la nada, dándole un puño a la pared a su lado, dejando sus nudillos lastimados - ¡Maldita sea! - tomó un jarrón, arrojándolo al otro lado de la sala, rompiéndolo en mil pedazos.

Continuó tirando y destruyendo todo a su paso, desahogando la ira que sentía, ahora que veía la realidad. Aquella en la que Taehyung no estaba con él y su plan había sido un total fracaso. Aquella en que Kim Seokjin, una vez más, ganaba el corazón del rubio.

- ¡Te odio! - volvió a gritar, entre lágrimas - ¡Te odio, Kim Seokjin! ¡Hijo de puta!

~o~

Ya era media tarde, cuando Taehyung bajó del taxi, pagando y arrastrando su maleta, con un nudo en su garganta. Había llorado demasiado, sentado en un pequeño parque, y parecía que jamás acabaría. El fuerte enfrentamiento con su amigo, le drenó todas las energías, y ya ni siquiera sabía si podía llamarlo su amigo. Jungkook dijo cosas que lo lastimaron mucho y su comportamiento estuvo fuera de lugar. Tae no podía contarlo como alguien en quien depositar su confianza, ni mucho menos, buscar consejo.

Sólo pedía que Jimin pudiera recibirle, ya que era la excusa perfecta para estar más cerca del círculo que rodea a Seokjin, y confirmar si las cosas que le dijo por teléfono eran ciertas. Al menos, agradecía haberle dado el beneficio de la duda, pues consiguió ver la cara oculta de Jungkook que, en otra situación, no hubiera revelado.

Llamó al timbre, esperando pacientemente, con los ojos brillando por el llanto que amenazaba constantemente en desbordarse. El seguro sonó y la puerta se abrió ante él.

- ¿Taehyung? - cuestionó el pelinegro, con la más sincera expresión de sorpresa pintada en su rostro - ¿Q-Qué...? Pasa, pasa... - se hizo a un lado, dejándole entrar, ayudándolo con su equipaje - ¿Qué pasó?

- Jiminnie... - la voz del rubio se quebró, y no pudo decir nada más.

- Cariño, estás tan delgado... - reparó en sus mejillas ahuecadas y los pómulos resaltando ante su delgadez - ¿Te sientes bien? ¿Quieres algo caliente? - ofreció, guiándolo a la sala para que se sentara. Kim asintió, incapaz de hablar.

Jimin se encargó de prepararle un té y poner un par de bocadillos en un plato, antes de regresar a la sala, sintiéndose en un dejavú. El chico lucía realmente afectado y la preocupación de Park acrecentaba ante el mutismo del rubio.

- Me sorprende que estés aquí por tu propio pie, después de todas las veces que intenté contactar contigo - comentó, viendo al otro beber su té en pequeños sorbos - Incluso fui hasta la casa de Jeon, pero él aseguró que te marchaste a Daegu, a casa de tus padres - Taehyung frunció el ceño al oírlo - Perdí la cuenta de cuántas llamadas hice... No había manera de llegar a ti, como si estuvieras escondiéndote del mundo entero.

- Lo siento, Minnie... - logró decir, tragándose las ganas de llorar - Me dejé influenciar por Jungkook... creyendo que era por mi propio bien, y terminé alejándome de todos.

- Entiendo, Tae, pero... ¿qué fue lo que pasó? - dudó.

- Al parecer... Jungkook tiene sentimientos por mí y... - carraspeó para aclarar su garganta - Yo no puedo corresponderle - comenzó a decir - Él estaba empeñado en que me quedara en su casa indefinidamente, me aconsejó cambiar mi número de teléfono y tomarme un descanso de mis clases... supongo que quería evitar que me vieran con... Seokjin - susurró el nombre de su ex novio.

- Hablando de Jin - Jimin tomó la palabra - Él me contó de la llamada que tuvieron.

- Sí, dijo muchas cosas y estoy empezando a creer que son ciertas - murmuró.

- Precisamente, hoy vamos a resolver uno de los tantos misterios - entonó con algo de emoción - Hoy voy a encontrarme con el tipo que, supuestamente, le puso algo en el trago a Seokjin esa noche.

- ¿Qué? - la sorpresa se coló en su tono de voz.

- Has llegado en el momento ideal - le dio una sonrisa sincera - Nam y Jin fueron a comprar algunas cosas, no deben tardar.

- Pe-pero, yo... - Taehyung no esperaba encontrarse con su ex novio tan pronto.

- Si todo sale bien, por fin podrás tener la verdadera razón de todo esto - le habló el pelinegro, poniendo una mano en su hombro - ¿No quieres aclarar de una vez por todas, las dudas que tienes? - Kim asintió - Entonces, hoy lo harás.

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Ya todo se va aclarando, y JK mostró su verdadera cara...

Aprovecho la instancia para avisar que sólo quedan 3 capítulos

Nos leemos.

𓅪

¨Forgetting¨ [JinTae]Where stories live. Discover now