¨Forgetting¨ [JinTae]

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- Tengo que buscar entre mis contactos, porque fue mi amigo quien me dio su número... - explicó, rebuscando en la agenda del teléfono – No sé si lo guardé o no... - murmuró, pasando su dedo por la larga lista, mirando atentamente – No, creo que no... Pero, hablaré con mi amigo y se lo pediré – aseguró – Cuenta con eso.

- Gracias, Hoseok... - Seokjin le envolvió en un medio abrazo, algo incómodo, porque ellos no era lo suficientemente cercanos como para ese nivel de contacto físico, sin embargo, a Jin no le importaba, si podía conseguir lo que buscaba por medio de él. El pelinegro estaba enormemente agradecido.

Su celular vibró en su bolsillo y el mayor se alejó del pelirrojo para contestar.

- Hyung... - la voz apesadumbrada de Namjoon le habló del otro lado – Le he preguntado a cada infeliz que he encontrado y nadie lo conoce... - comentó, ignorando la sonrisa en los labios de su amigo – Es como si se tratara de un maldito fantasma, ¿cómo puede ser que nadie lo haya visto? – se quejó con un berrinche infantil - ¿Sería muy mala idea poner afiches en la universidad con la cara del tipo, para llegar a más personas?

- Eso nos delataría, Nam – se burló Seokjin, negando con la cabeza, aunque el otro no pudiera verlo – Además... creo que encontré algo...

- ¿En serio? – exclamó el pelimorado, elevando la voz - ¿Qué?

- Hoseok me conseguirá el número del barman que estuvo en la fiesta, y que es el único que puede recordarlo – aclaró, despidiéndose de Jung con un gesto de su mano, y caminando hacia el punto de encuentro definido previamente con su amigo. La cafetería – Si él no sabe quién es ese tipo, entonces no sé quién podrá.

- Confiemos en que el barman nos dé alguna pista – le animó el menor.

~o~

Era miércoles y Park Jimin no había obtenido ni una sola noticia de su rubio amigo, que parecía desaparecido en acción. Tampoco había asistido a las clases que compartían, como si le estuviera evitando y aquello lo tenía con los nervios a flor de piel. Taehyung y él solían ser muy unidos, mucho más cuando compartían departamento, antes de que Seokjin apareciera, por lo que le conocía muy bien y sabía que el chico era demasiado responsable y dedicado, como para ausentarse sólo por lo que estaba viviendo. Temía que el rubio hubiera caído en una depresión silenciosa y que ahora esté encerrado en casa de Jungkook, deseando morirse. No estaba seguro si su amigo sería capaz de atentar contra su vida, pero la duda lo estaba desquiciando, por lo que, antes de ser plenamente consciente, ya se encontraba de camino a casa del castaño, en busca de Tae.

Dio un par de golpes firmes a la puerta, esperando, en tanto movía su pie impacientemente sobre el suelo, mordiendo la uña de su dedo meñique para contener su ansiedad.

- ¿Jimin hyung? – un malhumorado Jungkook apareció tras la puerta, frunciendo el ceño en cuanto lo vio - ¿Qué hace aquí?

- Hola, Kookie... es un gusto verte también – ironizó, ante el distante tono de voz que el otro estaba empleando - ¿Puedo hablar con Taehyung? En realidad, vine a verle a él – fue directo al grano. La expresión molesta no cambió en el rostro del menor.

- No – declaró, tomando con la guardia baja a Park, quien parpadeó, asimilando la ruda respuesta.

- ¿Disculpa? – ante su sorpresa, se vio obligado a que le repitieran la contestación, para asegurarse de haber oído bien - ¿Qué has dicho?

- Taehyung me dijo que no quería ver ni hablar con nadie que estuviera relacionado con Kim Seokjin – explicó con aquel frío tono de voz que estaba mosqueando a Jimin – Lo siento.

- Mira, Jungkook... - el mayor tomó una bocanada de aire, para intentar mantenerse sereno – No quiero ser grosero contigo, pero lo que tengo que hablar con Tae es algo que nos compete a él y a mí, y es realmente importante... - habló con firmeza – Así que, no te metas.

- Me meto, porque Taehyung es mi mejor amigo también – rebatió el castaño, con evidente molestia – Y no quiero que nadie le haga daño de nuevo, porque él ya ha sufrido demasiado... - Jimin le mantuvo la mirada, desafiante – Sé que vienes a hablarle de ese perro infiel, pero he logrado que Tae ya no llore por él, ni esté recordándole a cada rato y no tiraré todo eso a la basura por su capricho, lo siento hyung – finalizó, dispuesto a cerrar la puerta.

- No puedes pretender mantener encerrado a Taehyung en una burbuja – alegó Park, con la vena de la frente resaltando – Él necesita hacer su vida con normalidad... No conseguirá nada con faltar a sus clases y aislarse del mundo...

- Eso no es asunto suyo – insistió el menor, finalmente consiguiendo cerrar la puerta en sus narices.

- ¡Eish! ¡Mocoso insolente! – gritó el mayor a la nada, resoplando repetidas veces, con maldiciones y juramentos susurrados, frustrado por no poder ver a Taehyung una vez más.

Todo aquello le parecía el colmo de lo extraño. ¿Estaría Tae realmente superando a Jin, con ayuda de Jungkook?

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👀

Ya no sé que poner aquí...

Quiero leerlas 😬

𓅪