Ojos dorados (ZhanYi)

I.

Un nuevo día comienza, YiBo esta emocionado por el nuevo comienzo que va a tener ese día que hasta su mamá le da la bendición para que le vaya bien.

Toma su auto para ir directo a la empresa en la que tiene una cita para su entrevista, esta nervioso pero no lo demuestra en absoluto.

Al llegar entrega el auto a un vallet y así entrar al edificio, el elevador lo puso más nervioso pero hizo sus respiraciones y logro calmarse.

Desde que entro al edificio todos comenzaron a verlo de manera denigrante y unas que otras con un gran asombro, si bien sus ojos siempre han sido el centro de atención ya no le extrañaba o asustaba.

Llegó a la oficina de la persona que lo iba a entrevistar y se sento frente a él una vez estuvo dentro de la oficina.

Bien, ¿usted es Wang YiBo?-le preguntó la persona.

Si, soy yo-frotaba sus manos.

Bien-tomó una carpeta y lo miro directamente a la cara-, si, sin duda eres Wang YiBo, tus ojos te diferencian bien de un impostor-se dejo de charla y comenzó a entrevistarlo para ver si era bueno para el puesto al que iba a ser asignado.

Después de una cuantas preguntas, se dio cuenta que tenía muchas capacidades y por lo tanto ya estaba dentro.

Felicidades joven YiBo, ya forma parte de nuestra empresa-le dio la noticia.

Muchas gracias señor Kang, no sabe cuanto necesitaba este trabajo-iba a llorar de la emoción.

No me lo agradezcas, te has ganado ese puesto y puede que con tus capacidades puedas subir de rango-le dijo con una sonrisa.

YiBo no podía con tanta emoción que lo único que pudo hacer fue dar las gracias una y otra vez, cuando salió de la oficina no quiso esperar a contarle a su mamá de lo ocurrido.

Al llegar a casa abrazo a su mamá levantandola del piso lo cual le tomo por sorpresa a la mujer que acomodaba la mesa para comer.

YiBo, te ves muy feliz hijo-acarició su mejilla.

Mamá, ya tengo trabajo, ME LO DIERON-le dijo feliz y emocionado.

¿De verdad hijo?, felicidades mi amor-le dio muchos besos en el rostro-. Yo sabia que lo lograrías-le dijo orgullosa de su hijo.

Gracias mamá, tu apoyo me hizo lograr lo que deseaba, te agradezco que me hayas cuidado por tanto tiempo-la abrazo fuertemente.

A pesar de que se divorcio del padre de YiBo, no permitió que a este le faltará nada, no necesitaba de un hombre para salir adelante.

Vamos a celebrar tu triunfo con la comida que preparé-le dijo al separarse de su hijo y este solo asintió feliz.

La comida estuvo muy amena debido a que platicaron de como era el edificio y otras cosas en general hasta que la mirada preocupada de su madre le preocupo.

¿Qué pasa mamá?, de pronto te preocupaste-le dijo YiBo sin dudarlo.

Lo que pasa es que...en esa empresa...trabaja tu padre-lo dijo casi en voz baja.

¿Qué?-estaba en shock por lo que dijo-, jamás me dijiste que trabajaba en una empresa-le dijo algo aturdido.

Nunca te lo dije por que no le vi el caso hacerlo, ya estabamos a punto de quiebre en nuestra relación y no quería causarte más daño del que ya tenías-lo dijo con voz triste.

Mamá, no me importa que trabaje en la misma empresa que yo, yo lo único que quiero es dar lo mejor de mi para que me respeten por mi trabajo no por mis ojos-el brillo en sus ojos casi enceguecía a quienes lo vieran pero la madre ya se había acostumbrado a ellos.

Me alegra que sepas que es lo que quieres para tu futuro y que no necesitas la ayuda de un padre para salir adelante, estoy muy orgullosa de ti YiBo-tomó su mano y le regalo una sonrisa.

Ya no dijeron nada y terminaron de comer, YiBo subio a su habitación para arreglar algunas cosas de la universidad para volver a salir de la casa para así no tener más distracciones para el día lunes comenzar su trabajo.