La Bruja Y El Pirata

Two shot

Kid y Sakura

—Entonces que debo de hacer? –pregunto inocente a Heart, el pirata con costuras por todo su cuerpo–

—Lo primordial que tienes que recordar es que no debes de hacer enfurecer al capitán.. por lo demás, bueno simplemente ocúpate de tu trabajo como médico...

—Va-Vale...

Los días habían pasado volando después de unirse a la tripulación de los piratas de Kid y con todo lo acontecido por parte de la muerte de Barba Blanca y uno de sus comandantes. Su vida ahora era sencilla, por así decirlo, tenía un camarote para ella sola ya que era la única mujer abordo del barco, un armario lleno de ropa esencial para cualquier tipo de isla y una sala para ella misma, la cual era la enfermería. No sabía mucho sobre los temas de medicina ya que ella simplemente tocaba a las personas y estás mágicamente se sanaban, aunque eso no le impedía estudiar sobre el tema y de hecho la morfología del cuerpo humano la había dejado muy fascinada. Ahora por lo regular se la pasaba leyendo dentro de la enfermería o el la cubierta del barco, cercas del mástil admirando todo a su alrededor como ahora. Después de escuchar las advertencias de Heart se quedó muy calladita sentada al pie del mástil y viendo a todos los tripulantes del barco ir y venir de todas direcciones, en una de las barandas laterales se encontraba el capitán mirando por un catalejo, a simple vista parecía enojado por algo, aunque eso era usual en el.

Kid se sentía extraño, hace días que se encontraba pacífico y eso lo traía algo inquieto, por lo general se la pasaría dando órdenes a sus subordinados o amenazándolos para que hicieran las cosas como a él le gustaban, pero desde que la chica llegó a su tripulación todo había cambiado, su comportamiento era más dócil, no le importaba mucho lo que hacían sus nakama y, para terminar con todo, le atraía un poco la actitud de la pelirrosa. Hace días que no anclaban en alguna isla habitada y, pues.. no tenía como calmar sus urgencias, por así decirlo. Todos en el barco le tenían un ojo puesto en la chica, ella era tierna al igual que su personalidad, no tenía un cuerpo de diez pero atraía con solo verla, sus ojos verdes y su cabellera rosa eran razgos no muy comunes que para aquellos piratas eran muy adorables, a todos les agradaba y estaban felices con la desición del capitán al comprarla, a todos menos a el. Kid creía que todo eso lo estaba volviendo débil aun cuando era todo lo contrario...

—Sucede algo capitán?? –pregunto la rosada tocando la manga del abrigo de su capitán. Kid volteó a verla con mala cara–

—No sucede nada... –dijo cortante. Ella torció la cara de una forma endemoniadamente tierna–

—Desde que llego se le escuchaba gruñir y tabien traía una cara como si algo le hubiera caído mal... No está enfermo?.. lo puedo curar en un segundo... –Kid estalló, aquella molesta mota rosa le estaba provocando cosas que para el eran una completa molestía–

—Eres tu!!...

—Yo??.. hice algo malo?? –peregunto preocupada–

—¡¡Desde que te traje al barco todo se a vuelto más.. más rosa!! Mis tripulantes se comportan más dóciles e incluso Killer ha sonreído, no se cómo lo sé porque siempre trae puesta esa máscara pero se que ha sonreído.. y el olor!! Por qué todo huele dulce?!! –aquel grito retumbó en el barco entero, todos los que se encontraban al rededor se alejaron rápidamente ya que el capitán era muy peligroso cuando perdía los estribos. Sakura bajo la mirada triste, lo primero que le habían dicho fue lo primero que hizo mal. Kid se quedó callado al ver a la rosada en aquel estado–

—L-Lo lamento.. pe-perdon... –las lágrimas se desbordaron de sus ojos y fueron a caer a la cubierta, rápido y sin que ellos lo notarán pequeñas flores fueron apareciendo al igual que enredaderas, las cuales comenzaron a enroscarse en los pies de la chica. El pelirrojo trago grueso, ya que nunca estuvo en una situación como aquella, por lo general no le tomaría importancia y se iría a otro lugar, pero está vez era muy diferente– N-No quise hacer enfadar a nadie...

—Hag.. como sea, no es como si dijera que no me importas o algo así... –dijo sonrojado, buena fue su suerte pues nadie de la tripulación lo había visto. La chica rosa sonrió sorprendida y algo caliente de la cara–

—E-Enserio?? S-Si le importo?.. –Kid carraspeo para luego desviar la mirada–

—No lo demuestro mucho, pero cada integrante de la tripulación me importa.. –la chica sonrió feliz y se lanzó a abrazar al pelirrojo, pero al tratar de hacerlo simplemente sus brazos quedaron alzados, el pelirrojo miró extrañado a la chica– ..Que sucede??

—No me puedo mover.. –Kid miró a los pies de la joven y se percató de las enredaderas que ahí se encontraban, la tomo por la cintura y tiro de ella hasta que aquellas yerbas la soltaron– ..Gr-Gracias...

—Solo deja de hacer que todo huela a dulce... –desvío la mirada sonrojado, aún cargando a la pelirrosa en sus brazos–

—No puedo, en verdad me siento muy a gusto aquí.. me agradan todos, en especial usted... –Kid frunció el entrecejo ya mirándola de frente. Ambos se quedaron mirando fijamente, la rosa entre los brazos del pelirrojo y el embobado mirando aquel tono tan curioso de sus ojos–

—No se si lo han notado pero nos dirigimos al ojo de una tormenta... –dijo Killer aún lado de ellos. Kid volteó enojado a su posición. Sakura no entendió nada–

—Y por qué no cambian la posición del barco?!! Que todo lo tengo que hacer yo?!

—No, pero esperábamos su informe del clima hace horas... –Killer levanto los hombros desinteresado. Kid frunció el entrecejo avergonzado–

—Giren el timón ahora malditos!!!

Sakura río aún siendo cargada por Kid, el ni le tomo importancia cuando vio que todos los estaban viendo, lo único que le importaba era seguir sintiendo esa paz que le llenaba el alma cuando estaba junto a la pelirrosa. Ella nunca se imagino que la vida de esclava fuera tan genial...

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Omake

—Hey tu!! –griro señalando a un integrante de su tripulación, este traía un catalejo y miraba al cielo en busca de alguna tormenta–

—S-Si capitán!!

—Entregame eso y vete lejos!!!

El tripulante, quién estaba en la cubierta cercas del mástil salió corriendo despavorido a alguna otra parte del barco. Kid miró a lo lejos y luego, disimuladamente observó a la mota rosa que estaba al pie del mástil leyendo un libro, tal parecía que estaba tan concentrada que no noto cuando el le gritó tales cosas a aquel muchacho...

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Espero que les haya gustado, ni se les ocurra decirme que continúe porque no seguiré!. Neko se despide!!! Bay bay!!