°Capítulo 3°

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Cuando Wei Ying lega a la Primavera Fría, no se le dificulta para nada evadir al discípulo en guardia que cuidaba los alrededores, agradeciendo a su hijo por traerle túnicas tan ligeras y cómodas que no llegaban a limitar sus movimientos

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Cuando Wei Ying lega a la Primavera Fría, no se le dificulta para nada evadir al discípulo en guardia que cuidaba los alrededores, agradeciendo a su hijo por traerle túnicas tan ligeras y cómodas que no llegaban a limitar sus movimientos.

No era tan tarde aún, el sol todavía proporcionaba buena luz, por lo que pudo llegar con mayor facilidad, escondiéndose detrás de un arbusto en cuanto su mirada captó la imagen del cuerpo de su esposo, quien al parecer meditaba concentradamente, pero una leve mueca de molestia aún adornaba su cara.

Era fácil de ver, entre sus cejas se veía una línea apenas visible y las esquinas de sus labios estaban más debajo de lo normal, además de que sus hombros seguían tensos.

Rayos, no pudo evitar suspirar.

Incluso así, su esposo se veía tan angelical y bello bajo la tenue luz del sol, con solo su pantalón interior cubriendo su cuerpo inferior. Era bellísimo, su cuerpo tan varonil y bien cuidado que incluso algunas veces, desde que había despertado como Mo XuanYu, llegaba a sentir envidia por él.

Luego recordaba que ese cuerpo no era como el suyo, pero que aun así se lo comía por las noches, y se le pasaba.

Bueno, el mundo sí era justo con él en esta vida.

—¿Quién...?

Oh, bueno, ahora Wei Ying se sentía como ese primer día en que volvió a Gusu luego de haber revivido, donde, al igual que ahora, había acosado a Lan Zhan para poder conseguir algo con lo cual salir y evadir la barrera que rodeaba a la secta.

Esta vez, bueno, simplemente quería entrar a las aguas frías con él y conseguir lo que tanto buscaba.

—Oh... Segundo maestro Lan, soy yo de nuevo —rio bajito, saliendo de su escondite y caminando con toda tranquilidad hasta la orilla del estanque.

El Lan le vio con incomodidad y molestia una vez más, desviando su mirada en cuanto sus ojos dorados cayeron sobre el cuerpo de mujer frente a él.

—¿Oh? ¿Acaso no reconoces a tu esposo cuando lo vez, Hanguang-Jun? —cuestionó, arrodillándose y apoyándose con las manos en el borde de una piedra, tratando de estar más cercas de lo que ya estaba de su marido.

Su plan inicial era meterse al agua a escondidas y acosar un poco a su esposo para hacerlo perder un poco la compostura, pero pese a la hora y a que el sol aún estaba en el cielo, el agua del manantial seguía siendo realmente fría, algo que no le agradaba demasiado al Wei.

Entonces, cando vio la cara de real molestia de su esposo, simplemente optó por atacar frente a frente, revelando su identidad de una vez por todas para no provocar confusiones o simplemente la furia de su marido.

Su trasero aún no se recuperaba desde la última vez.

—Lo hago.

Lan Zhan asintió y Wei Ying no pudo evitar sonreír con amor, deseando que el contrario estuviera entre sus brazos para comenzar a besarlo.

From Talismans to Blessings {°WangXian°}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora