Begging her for mercy

Mulai dari awal
                                    

- De seguro te preguntas porqué estás aquí. - Frank se dirigió a la chica, ella solo asintió. - Tengo algo muy importante que decirte.

- No me asustes. - Respondió preocupada la rubia.

- Primero lo más urgente. - inició el magnate.  - Estuve hablando con tus padres y queríamos saber si quieres ser parte de la compañía de tu madre, básicamente iniciar a modelar y ser la imagen de mi compañía, y participar en mis eventos. - Frank Walker era un famoso diseñador además de todas las empresas que poseía.

- Sí. - Había estado unos minutos comiendo y sumida en sus pensamientos hasta que volvió a hablar.

- Harry, - se dirigió a su hijo - sé todo lo que le hiciste a Violet, sé que es por tu inmadurez que se mudaron aquí. - Violet moría por reírse al ver la cara de Harry. - En su momento decidí no hacer nada porque estabas esperando este momento. - Sacó unos papeles de un portafolio que traía consigo. - Siento que tengas que presenciar esto. - Se dirigió a Johnny.

- No estoy entendiendo nada. - Dijo Harry.

- Yo tampoco. - Habló Violet.

- Ese día descubrí que nunca serás la mitad de lo que es Violet, me decepcionaste en todos los sentidos. No hay algo que deteste más que un idiota, y aunque me duela decirlo, eso es lo que eres. - Mostró los papeles que había sacado. - Es por eso que declaro a Violet como mi única heredera. - Les mostró a ambos los papeles que tenía. - Desde ahora Violet es la próxima dueña de todas mis empresas y, espero, la próxima presidenta.

Violet estaba sorprendida, no podía creer que Frank le estuviera dando una responsabilidad tan grande como la de ser dueña de su imperio, su herencia.

Harry estaba furiosos, no podía creer que la chica siempre obtuviera lo que quisiera sin siquiera esforzarse por ello. Esa herencia era suya, no de ella.

- Veo que después de todo revolcarte con mi padre te funcionó. - Se levantó Harry ofendido y molesto.

Antes de que Violet hiciera algo, su padre se levantó de la mesa y le dio una cachetada que, según la rubia, nunca olvidaría.

- Yo no puedo aceptarlo, es demasiado. - La rubia se paró de la mesa y el canadiense igual.

- No es una oferta, es una realidad. No hay nadie mejor que tú para tomar está responsabilidad. Tenemos que hablar, tomen asiento. - Se volvieron a sentar.

- No puedo creer que le declares a esta como la heredera y no a mí, yo soy tu hijo. - Violet sabia que el chico debía sentirse terrible luego de las palabras de su padre. - Ella no es nada para ti, es solo una perra, una chica astuta que va detrás de tu dinero, nuestro dinero.

- Tú y yo hablaremos luego, ya puedes irte. - Eso fue lo último que le dijo a su hijo antes de que esté tomara sus cosas furioso y saliera del lugar. - Violet, sabes que eres como la hija que nunca tuve y sería un honor para mí que fueras la nueva imagen de mis empresas. - Dejó los papeles a un lado

- Esto es mucho para procesar. - Violet no podía dejar de pensar en que su destino había cambiado drásticamente y ahora tenía que pensar en todo ello, era solo una adolescente.

- Será un honor que seas la imagen y la dueña de mi compañía.

...

- Gracias por todo, siempre te llevo a las peores cenas. Prometo que lo recompensaré. - Estaban afuera de su casa, la cena había terminado bien después de todo. - Nos vemos, Canadá.

- Adiós, New York. - Ella le dio un beso en la mejilla y entró a su casa. Luego de unos segundos el canadiense hizo lo mismo.

Tan solo unos minutos después de que Violet entró a su casa, alguien timbró. Su primer pensamiento fue que era Johnny o sus padres.

- Violet. - Saludó el chico en la puerta.

- Harry. - Saludó ella al abrir. - ¿Qué quieres?. - cerró la puerta detrás suyo.

- A ti. - Se acercó a la chica.

- No puedo creer tu bipolaridad. - Se alejó de él. - Lo mejor es que te vayas. - Dijo cortante.

- Violet, eres perfecta y lo sabes. - Se acercó de nuevo. - Seríamos la pareja perfecta, solo piénsalo.

- Eso debiste haber pensado la primera vez que pudimos salir, Harry,  no ahora después de todo lo que hiciste. - Violet estaba gritando y llamó la atención de su vecino. - Es mejor que... - La besó, impidiendo que pudiera decir otra palabra.

- ¿Qué les pasa a todos los chicos? Es como si se les hiciera costumbre el interrumpirme. - Pensó enojada.

- ¿Segura que quieres seguir con el chico ese? - Preguntó luego del beso.

- Déjame en paz, todo lo que llegué a sentir por ti murió cuando me di cuenta de que eras un imbécil. - Gritó por lo bajo. - Lo irónico de todo esto es que ahora soy yo quien te está botando. - Se acercó a él como si lo fuera a besar pero en cambio susurró en su oído. - Ahora estás rogando por piedad, pero yo no la tengo. Entró a su casa enojada y luego de eso decidió simplemente dormir hasta el día siguiente.

Mientras tanto Johnny había visto hasta el beso de Violet con Harry y sintió como si algo se rompiera, no pudo seguir viendo la escena y fue de nuevo al interior de su casa.

- Te lo dije, Johnn, ella nunca se enamora. - Dijo Lauren consolando a su hermano.

¿Qué les pareció?

Gracias por todo el apoyo, espero que les vaya gustando.

See you in the next part.

XOXO.

The girl behind the phone.

My Addiction - Johnny OrlandoTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang