Sí me preguntan sobre mi futuro, realmente no sé que decir o que pensar sobre ello, realmente habrá un futuro para mí?, realmente quiero un futuro para mí?.
-en qué tanto piensas?
-en nada- mire a la persona que estaba delante de mí, estaba en un cuarto completamente oscuro, de un momento a otro sentí como otros dos hombre me jalaba y me ponía unas esposas en mis manos, sonreí, el otro un poco mayor como por unos 10 años más que yo, me miró y comenzó a acariciar mi blusa negra,rompió mi blusa y dejaba marcas en mí, luego prendieron las luces y en ese lugar se encontraba varios juguetes y objetos sexuales, hice una media sonrisa, lo mire a los ojos.
-hoy seré tu sumisa o traerá a otros de tus amigos- dije y sonreí por que quería una persona más, no me bastaba con uno solo, él solo negó.
-solo serás mía- dijo y me quito las esposas, me dejó completamente desnuda, lo seguí con la mirada y cogió un pequeño cinturón de cuero y me indico que me pusiera en cuatro en la cama de aquella habitación, no dije nada y camine sexualmente hacia él, me puse en la posición que él me había dicho, sentí uno, dos, tres, cuatro, cinco.....no volví a contar más, solo disfrutaba aquello, luego se quitó su ropa y acarició mi cuerpo.
-te amaría, pero solo eres una puta- dijo y yo sonreí.
-no necesito tu asqueroso amor,solo necesito tu pene nada más y tu asqueroso dinero-dije y puse mi pecho completamente en el colchón y alce más mi trasero, el me pegó en mis nalgas, luego sentí como metió su pene en mí, Dios entra la puta gloria, agarro mi pelo fuertemente, volvió a salir y me puso boca arriba y metió su miembro nuevamente,era tan brusco que me encantaban, me pegó en la cara y lo mire con una cara que decía claramente "quiero más" me siguió penetrado pero de un momento a otro no sentí sus movimientos, lo mire confundida, me cogió por mi pelo y comenzó a pegarme como nunca antes lo había hecho, volvió a entra y se vino dentro de mí, ésta sería, la 7 veces que lo hago con él y lo odio tanto.
- en la mesa está tu asqueroso dinero,puta - lo mire y reí, me vestí y él me pasó una camisa nueva, cogí mi dinero y salí de aquel lugar, luego de salir de aquella casa gigante, me subí a un taxi y llegue al hospital.
-Adriana, 19 años.
Tiene sexo para poder pagarle el tratamiento a su pequeño hermano de tan solo 7 años, vive así desde aproximadamente cuatro años y nunca se ha quejado de su vida y de su asqueroso cuerpo, como le decía ella, pero todo eso se iba cuando podía ver a su querido hermano sonreí, era la única persona que amaba en este mundo, y cuidaría de él hasta su final.
