capítulo 18

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Te despertaste en tu cama sin recordar como, seguramente alguno de tus hermanos te habría llevado al quedarte dormida en el coche.

Abriste la ventana y una brisa de aire fresco recorrió todo tu cuerpo.

-Hoy es un buen dia- te metiste rápidamente en el baño y después de una ducha te vestiste con ropa casual, cojiste tu cámara y fuiste a desayunar.

-Buenos días pequeña...¿Saldrás a hacer fotos?- pregunto Akiteru preparándose un café.

-Si, hoy ha quedado muy buen día...además, hace mucho que no salgo a hacerlo- dijiste sentándose en la mesa.

Tu hermano te sirvió un café y dos tostadas con mermelada.

-Gracias- dijiste empezando a desayunar.

Entonces tu hermano mayor se asomó por las escaleras.

-Si vas a salir recuerda tener cuidado y no irte muy lejos...no conoces el lugar- dijo tsukishima sentándose también.

- Eso no es cierto Kei, yo también he vivido aquí, además, aunque así fuera la gracia está en salir a explorar y por el camino encontrarte cosas maravillosas que fotografiar- dijiste mirando al techo.

-Ya...tu no te pierdas y si necesitas algo llámanos ¿Vale?- dijo el tomando un sorbo de café.

Tu asentiste y terminaste rápidamente tu desayuno, le distes un beso a ambos y te marchaste en busca de algo nuevo que fotografiar.

Te pusiste los cascos y empezaste a caminar sin rumbo alguno, mirando a todas partes en busca de algo que llamase tu atención.

Llegaste a una carretera que subía a las montañas, te lo pensaste pero de todos modos subiste.

Ibas mirando el paisaje, era bastante temprano así que aún se podía ver al sol saliendo de entre los árboles a lo lejos.

Sacaste tu cámara de la funda y empezaste a fotografiar el lugar, la verdad que ese lugar era precioso.

Seguiste subiendo y te diste cuenta de que habías llegado a una especie de mini pueblo.

Te adentraste en el y quedaste fascinada, era precioso, como si volvieras en el pasado.

Te sentaste a descansar junto a un árbol que daba vistas a el horizonte..

La verdad es que esa subida te había reventado pero no había nada mejor que un buen paseo por las mañanas.

Te recostaste en la hierba era suave, podrías ser capaz de quedarte dormida ahí mismo.

-¿ (T/n)?...- oíste una voz conocida.

Abriste los ojos y te encontraste con unos color avellana.

Pegaste un salto y te diste un cabezazo contra el individuo.

- ¿Pero que coño haces chaval?- te gritaste la frente para luego mirar al culpable de tu molesria-¿Hinata?

-Si, Auch...¿Que haces tú aquí arriba?- dijo también frotándose la frente.

-Estaba haciendo fotos y este sitio mebllamonla atención...¿Y tu? Esto está bastante lejos de casa-elnchico te miro confundido.

- (t/n)...yo vivo aqui- te quedaste de piedra.

- ¡¿¡¿ AQUI!?!?- el chico asintio- Aggg, que envidia- te levantaste y volviste a mirar aquel paisaje- este lugar es una verdadera maravilla- respiras te ondo- hacía mucho que no respiraba un aire tan puro.

El chico también se levantó y se puso a tu lado.

- ¿Como es posible que viviendo en un lugar tan natural no crezcas nada?- el chico te miro enfadado- jajajaja, es broma...oye ¿Que haces despierto tan temprano? Deberías descansar, los partidos empezaron dentro de nada.

La Hermana Del Cuatro OjosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora