Capítulo 1.

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Flashback (unos pocos meses atrás).

Todo comenzó con un concierto. El concierto más mágico y maravilloso que alguna vez pude haber asistido en mis 19 años de edad.

- ¿Emocionada? (interrogó George, mi mejor amigo, mientras comprábamos algunas cosas antes de ingresar al estadio).

- Ni que lo digas (respondí a punto de comerme las uñas). ¡Al fin podré ver a mis más grandes ídolos en vivo y en directo Georgi!

- Ya cálmate niña, todos nos miran como si estuviésemos locos.

El lugar era enorme. Estaba lleno de luces y mis ojos parecían salirse de su lugar. Ya podía ver la gran batería de Tico, los geniales teclados de David, el increíble bajo de Alec, el micrófono con el que John hizo su magia y las maravillosas guitarras de Richie.

Ambos tomamos nuestros lugares en primera fila, ¡¿pueden creerlo?! Estábamos tan cerca del escenario que hasta podía tocarlo con tan solo estirar mi brazo. Minutos más tarde, aunque en mi opinión fue una eternidad las luces se apagaron. En el aire se podía respirar la emoción y reinaba el silencio. Entre todo aquello, noté en la oscuridad algunos movimientos sobre el escenario y luego de unos segundos todo el estadio explotó...

Desde el momento que pisó aquel escenario, mis ojos no se despegaron de él. Cuando conocí las canciones de la banda, en primer momento mis ojos fueron hacia su cantante, John Bongiovi. Si bien todos eran atractivos, tenía cierta obsesión con él y desde pequeña mi sueño era conocerlo en vivo.

En verdad es que, durante toda la noche, esperé a que John cantará "Bed of roses". Había visto, en varios conciertos, que casi al final de la canción dejaban subir alguna fan con suerte. Díganme loca, pero quería ser una de ellas.

- ¿Todo bien?

- George es la pregunta más estúpida que me has hecho en toda tu vida...

- ¡Oye! (se quejó fingiendo estar ofendido).

- Claro que estoy bien, tengo a las cinco personas más perfectas delante de mí... (grité por el volumen de la música).

- ¡Awww corazón!, ¿tan perfecto soy para ti que valgo por cinco?

- Ya cállat... (una melodía entró a mis oídos y captó mi atención por completo) ¿eso es?

Una vez más, el rubio con su entonces pelo largo y alborotado, se acercó a la esquina donde me encontraba. Nuestras miradas, se cruzaron durante una milésima de segundos y extendí mi mano para tocar la suya. Aunque no lo logré. Algo frustrada, lo seguí con la mirada mientras escuchaba a Richie tocar la introducción de la canción.

- Señorita.... (se acercó un hombre de seguridad del otro lado de la barrera).

- ¿Si?

- Acompáñeme, por favor...

- ¿Qué?

- No pregunte nada y sígame, rápido por favor (me extendió su mano, y como toda fan loca me trepé por la baranda, mientras la tomaba para ayudarme).

- ¿Qué diablos estás haciendo? (gritó George desde el otro lado).

Sin darle una respuesta, pues ni yo misma sabía qué hacía, alcé mis hombros y seguí a aquel sujeto. Era unas dos veces más grande que todo mí cuerpo y estaba vestido todo de negro...

- Discúlpame... (traté de llamar su atención, pero lo único que hizo fue dejarme parada delante de una gran tela negra desconcertada).

De pronto, una mano apareció del otro lado de la tela, tiró de mí y me dejó parada sobre el gran escenario delante miles de personas. En tanto mi cabeza trataba de procesar todo aquello, giré y pude ver a la persona con quien soñé, desde que era apenas una chiquilla de 9 años.

- Hola (susurré aún en shock).

- Encantado, señorita...

- ¡Dios!, ¿puedo abrazarte? (pregunté mordiendo mi labio inferior).

- Claro, preciosa... (dijo abriendo sus brazos en señal de aceptación).

Sin pensarlos dos veces, me aferré a él. Mi sueño se había cumplido y solo podía disfrutar de aquellos minutos, en tanto John cantaba "Bed of Roses".

Casi al término de la canción, nos separamos. De pronto, nuestras miradas se conectaron nuevamente, haciendo que me perdiese en sus hermosos y profundos ojos....

- Después de esto espérame, saldremos a saludar... (susurró alejando el micrófono para que únicamente yo lo escuchase).

- Cla...

Me encontraba a punto de responder, cuando sin previo aviso unió sus labios con los míos en un rápido y efusivo beso. Esto hizo temblar todo mi espacio...

- Te veo luego bonita (susurró por última vez antes de separarse y ayudarme a bajar por las escaleras).

Continuará... 

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