➹〔04〕

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Gumball logró escapar de la situación con el corazón acelerado, casi lo habían descubierto, tenía que ser más cuidadoso... el problema es que Gumball Watterson es lo opuesto a cuidadoso.

Llegó a casa y corrio directamente a su cuarto, posiblemente pasando por encima de algunos muebles, escuchando gritos incomprensibles de su madre y los ronquidos de su padre. 

Unos diez minutos más tarde, Darwin entra al cuarto.

—¿Por qué tardaste tanto?— Dijo el gato, molesto.

¿Tardar?¿De que estas hablando— El menor responde confundido.

¿¡Por qué tardaste tanto en llegar a casa!? Sabes que quiero hablar contigo—

Amigo, literalmente salimos de la escuela al mismo tiempo, tu fuiste el que salió volando al autobús y ordenó a Rocky que arranque antes de que ni yo ni la mitad de la clase pudiera entrar— Darwin dice cruzado de aletas.

En silencio, el gato por fin responde —Si, tienes un buen punto... pero eso da igual tenemos que hablar de algo más importante—

Gumball pasa los siguientes quince minutos explicándole el simple problema a su hermano, a veces teniendo que parar para hacerle dibujos porque el pez no entendía, pero finalmente lo hizo.

Ooh, ya entiendo ¿Cuál es tu plan?—

¡Ese es el punto, no tengo uno!— Exclama el gato.

Oh, ya veo...— Darwin queda en silencio por unos segundo, rascando su barbilla, hasta que por fin se le viene una idea, jadeando en respuesta —¡Ya se, deberíamos comer galletas!—

Tres minutos más tarde ambos comiendo galletas, aún pensando. Darwin jadea otra vez.

¿Ahora que quieres?¿Jugó?— El azul dice sarcástico a su hermano.

Si, pero también tengo una idea—

Gumball se acerca, interesado.

Creo que deberías pedirle ayuda a alguien que sepa más de estas cosas—

Gumball, se aleja otra vez, mirándolo en silencio. Entonces responde.

No

Oh vamos— Se queja el pez —¿Qué es lo peor que podría pasar?—

 —No sé, ¿Qué tal si la persona a quien se lo cuento resulta ser un supervillano cuyo plan es destruirme y decide contarle a todos para avergonzarme antes de hacerlo?— El gato lanza un posibilidad ridícula en su paranoia.

Por favor Gumball, nadie gastaría tanto tiempo de su vida en intentar destruirte—

El pez intenta calmar a su hermano, accidentalmente bajando su autoestima.

—Además…— Continúa su amigo —Las personas en nuestra clase son buenos y confiables, estoy seguro de que guardarán tu secreto—

¿Acaso vamos a la misma clases? Piensa Gumball. Darwin se pone de pie, preparándose para salir del cuarto.

Vale, voy a la cocina, por si me necesitas— Se gira para irse, pero entonces para repentinamente y ve a Gumball— Oh, y la señora mamá quiere que bajes a ordenar todo el desorden que hiciste o iba a...— Darwin para abruptamente dejando la oración incompleta.

—¿Va a que?— Dijo el gato en un tono confundido.

El menor se encoge de hombros —No se me permite usar esa palabra aun— Vuelva a girarse para esta vez irse de verdad.

Gumball quien estaba sentado en silencio se para rápidamente y corre a donde Nicole lo había llamado.

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—...Y básicamente ese es problema— El gato de explica a alguien, aparentemente —¿Qué debería hacer?¿Debería arriesgarme a revelarle mi identidad?¿O encontrar una forma de esconderme mas para que no lo descubra?— El chico finalmente acaba.

Mientras tanto su hermana dos años, a quien acaba de contar todo, continúa garabateando con crayón en un papel.

No se que estaba pensando— Se da una bofetada mental —Claro que no entendiste, eres una bebé, gracias por escuchar igualmente— 

Se para, pero entonces su hermana le lanza el papel en forma de pelota.

—¡Auch!— Lanza una queja, entonces abre el papel y encuentra es escrito.

"Si, deberías decirle"

Gumball mira el papel por un segundo, pero entonces lo tira al suelo, algo nervioso. —Pff, bueno ya que eres una bebé aún, no puedes razonar aun...adiós—

Anais lo mira irse, claramente molesta, abre el papel que tiró y continúa garabateando.

《Respuestas》[Tawog] [Gumnny]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora