One Shots (Kageyama Tobio × lectora)

~32~

Al final, el domingo se me pasó rapidísimo jugando con mi hermano a voleibol y llegó el esperado lunes.

– ¡Vamos Asahi! –

– Voy, voy –

Salimos de casa y empezamos a caminar. El camino se hizo agradable y corto, más corto de lo que esperaba, por una parte me alegró, por la otra... no tanto. No lo dije, pero... también soy tímida aunque no tanto como mi hermano.

– (T/n), ¿nos vemos en el recreo? –

– ¿Podrías venir a buscarme? –

Él asintió y le di un beso en la mejilla, después de que sonrojara, se fue a su clase.

– ¡Asahi! –

Una voz apareció al lado de mi hermano asustándolo, pero me giré y entré a mi clase. Tal vez era ese Nishinoya.

[...]

– ¿Puedo ir contigo? –

– ¿Estás segura? –

– Sí, me gustaría conocer a tus amigos –

– ¿Segura? –

– ¡Asahi! Estoy muy segura, así que... vamos –

Empecé a caminar sin rumbo, así que me paré y dejé que fuese primero y así, me guiase.

Tenía que cambiarse, por lo que esperé en la puerta y poco después volvió a aparecer para entrar.

– Chicos – los llamó mi hermano.

Cuando entramos, todos estaban practicando. El típico sonido de las zapatillas y los balones era lo que más se escuchaba, lo echaba de menos. Después de que mis hermano los llamara, se giraron hacia nosotros, algunos con más interés y otros con menos.

– Esto... yo... ella, es mi hermana –

– Esto... me llamo Azumane (T/n), e-encantada de conoceros –

Hice una reverencia para no verlos, aunque igualmente, intenté hacerla lo más corta posible para que no se viera rara.

– ¡Asahi! ¿Tienes una hermana? –

Un chico más bajo que yo se acercó.

– Me llamó Nishinoya Yuu –

Lo señalé y él se extrañó.

– ¿Tú eres el amigo de mi hermano? –

– ¿Te habló de mí? Sí, ese soy yo, encantado de conocerte –

Fue a abrazarme, pero enseguida noté como alguien me jalaba hacia la derecha, haciendo que le pobre Nishinoya cayera al suelo.

– Perdón, mi nombre es Shimizu Kiyoko –

Después, cada uno se empezó a presentar, hasta llegar a un chico de pelo naranja.

– ¡Hola! Me llamo Hinata Shôyo, encantado –

Se notaba que era un chico bastante enérgico y amable, me cayó bien desde un principio. Además éramos de la misma altura, aunque tuviese algunos genes de Asahi, lo altura no vino a mí.