Siempre te amé, dobe

Parte 3

He pasado maravillosos momentos junto a él. Lo ha sido todo para mí, sin mi madre, vivía el día a día junto a mi amado padre una vida normal.

Pero me sentía solo. Nadie quería ser mi amigo y no sabía por qué. Hasta que los nuevos vecinos llegaron al frente de mi casa y con él... mi mejor amigo.

Si Sasuke se va de mi vida yo...

—¡¡¡¡¡SASUKE!!!!!

Yo me iré con él.

El moreno estaba paralizado. El alarido de su rubio no lo dejó continuar con lo que estaba dispuesto a hacer y además... los brazos de Naruto rodeando su cintura con fuerza tampoco lo dejaban pensar con claridad.

Estaba ahí.

Había venido por él.

—¡¡NO TE MATES!! ¡¡NO TE MATES, SASUKE!!-soltaba su llanto gritándole con furia y dolor-¡Maldito hijo de puta, no dejaré que hagas una estupidez como esa! ¡¡¿Me oyes, bastardo?!!

—Na... ruto...-la voz de Sasuke se escuchó quebrada-¡¡¡MALDITO DOBE!!!

El rubio abrió los ojos como plato al ver como el azabache lo tomaba por los hombros y lo zamarreaba de adelante hacia atrás.

—¡¡¿Cómo mierda pensaste que iba a suicidarme?!!

—Es que...-las manos del blondo apretaron el traje negro del Uchiha mientras sus zafiros se llenaban de agua salada-Estabas aquí en la orilla... ¡¿Qué otra cosa podía pensar, eh?!-Naruto se dio cuenta de los ojos rojos del ojinegro, también había llorado.

Sasuke suspiró y lo soltó. El rubio entonces bajó la mirada y pudo ver lo que su amigo llevaba en la mano.

—Sasuke... ese colgante...-murmuró.

—Es el que me regalaste cuando cumplí 12 años, Dobe. No iba a tirarme, iba a tirar este colgante.

—¡¡¿Por qué?!!-gritó sollozando el rubio-¡¡Es un tesoro muy valioso para mí!!

—¿Leísta la carta? Si has visto su contenido, entenderás que no puedo vivir sufriendo sin tenerte a mi lado-las mejillas del oji-azul se sonrojaron-tengo que deshacerme de todo lo que me recuerde a ti, solo así podre... seguir. Pero es imposible...-sollozaba-Te amo tanto-se agarró el pecho-que no podre ser feliz con otra persona. Moriré solo con tus recuerdos-levantó la mano y la acercó al rostro de su mejor amigo-Eres tan hermoso, Naruto...-acarició sus marquitas y le sonrió-no quiero arruinar tu vida, por eso... vete de aquí por favor-se alejó de él.

—Y tú eres un... un estúpido teme-se secó los ojos con la manga sin importarle lo costoso que había salido-y aun así...-tomó desprevenido a Sasuke de las mejillas y acercó sus labios rozándolos con los contrarios-aun así... te amo, Sasuke.

El azabache no podía reaccionar con lo escuchado, su corazón estaba retumbando dentro de su pecho con unas ganas inmensas de salirse.

—¿Q-qué acabas... de decir?-tartamudeó.

Naruto rió y juntó sus frentes sin dejar de romper el contacto con esos bellos ojos ónix de Sasuke.

—He dicho...-susurró-Que te amo con todo mi corazón, maldito bastardo.

Sasuke lo jaló contra su cuerpo abrazándolo efusivamente y dejando al rubio sorprendido.

—¿Lo dices en serio?

Naruto correspondió su acción y apoyó su cabeza en el hombro de él.

—La dejé, Sasuke. No quiero casarme con ella, no es lo que aparentaba ser. Además... acabo de darme cuenta que tú eres la persona con la que quiero pasar mis días.

—Usuratonkachi...-sollozaba-me amas a pesar de ser un hombre, la vida para nosotros será difícil.

—Lo sé. Lo sé y no me importa, Sasuke. Siempre has estado conmigo... te quiero demasiado.

—Naruto...-se separó y tomó con ternura su rostro para unir sus labios a los suyos.

El corazón de ambos palpitó velozmente trasmitiendo millones de sensaciones placenteras a sus cuerpos. Sasuke metió su lengua en la cavidad del rubio sintiendo como este se estremecía en sus brazos con tan hermoso beso. Cuando el aire comenzó a faltar, se separaron sonrojados y llenos de alegría.

—Dame eso-Naruto le arrebató el colgante a Sasuke y pasó sus manos por su cuello para poder anudarla de nuevo-No quiero que te la quites. Se ve linda en el lugar que esta-sonrió.

El moreno lo abrazó posesivamente y escondió su rostro en su cuello oliendo su deliciosa fragancia en su piel.

—¿Te quedaras conmigo?

—Hasta que la muerte nos separe-susurró abrazándole la cintura.

Sasuke le tomó del mentón y le miró con ternura.

—Nadie me va a separar de ti, ni la muerte, Naruto. Estaremos juntos siempre-besó sus labios con intenso amor y el rubio cerró sus ojos dejándose llevar por ese acto tan puro y hermoso.

—¿Te casarías conmigo, dobe?

El rubio rió y se abalanzó en sus brazos.

—¡Sí, teme!

Nuevamente, Sasuke sonrió y tomó al rubio para amarlo delante del anochecer que se abriría pronto.

Sus padres no sabían nada. Pero bueno, él ama a su rubio, se escaparía con él sin importar que le dejaran sin herencia.

Te amo mi amor.