—Tampoco yo, mis amigos me obligaron... — hizo una leve mueca.

—A mí también, me prometió que no me dejaría sola y... Aquí me tienes. — rió por lo bajo.

Le pareció que era un chico demasiado atractivo.

Así que solo una pregunta rondaba por su cabeza.

¿Por qué le hablaría a ella?

Al cabo de los minutos, la conversación entre ambos se daba naturalmente.

Reían y bromeaban mientras que se conocían mejor.

Estaba claro que una gran amistad saldría de ahí.

Cuando el ambiente se pudo más...

Adulto.

Los dos se miraron un una terrible mueca en el rostro.

—Salgamos de aquí, ¿qué dices?— se levantó para extenderle la mano.

Nuestra protagonista dudó por unos cortos segundos si aceptar.

Pero decidió aceptar cuando miró a su amigo besarse con alguien en una de las esquinas de la sala.

—Sí, salgamos de este lugar. — tomó su mano y corrieron a la salida.

Tenían unas sonrisas enormes en sus rostros.

—Ven conmigo.

El rubio le hizo seguirle por unas cuantas calles.

Continuaron así hasta que las casas se hacían menos menos grandes y comenzaban a ser pequeñas y abandonadas...

Ya no le estaba gustando el paisaje...

—¿A dónde me llevas?— trató de no sonar nerviosa pero falló.

—Ya lo verás. — le guiñó el ojo.

Se detuvieron frente a un parque que parecía no haber tenido nada de mantenimiento en mucho tiempo, los juegos estaban destruidos y viejos y los árboles totalmente secos.

—Espera aquí.

La femenina obedeció aún desconfiando un poco, se preparó mentalmente para empezar a correr si resultaba ser lo que pensaba.

Dejó de tensarse al ver una patineta en las manos de su acompañante.

—¿Sabes usarla?— preguntó al colocarla en el suelo.

—Mi padre me enseñó cuando era pequeña, así que estoy un poco oxidada. — dijo apenada.

—Bien, veamos qué es lo que recuerdas.

Subió con algo de temor a aquello tabla y comenzó a andar en ella.

—Para estar "oxidada" empezaste muy bien. — bromeó.

「️유독 한 」️ T O X I C  ━━  YeonjunTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang