Siempre Te Amaré

CAPÍTULO 3

Los sollozos de la bicolor se descontrolaron y esta escondió su rostro en el pecho del pecoso.

Izuku: No es que no quiera que vuelvas pero no sé si sea lo correcto

Shouta: Dame una última oportunidad, prometo volver a ganarme tu corazón y el amor de Ishomi por favor Izuku, dame solo una oportunidad

Este no sabía qué hacer, por un lado aun la amaba y por otro no quería volvier a pasar por eso.

Izuku: Okey te daré una ultima oportunidad, pero al primer indicio que des de volver a hacer algo así nos iremos Shouta

Shouta: Muchas gracias Izuku, prometo no volver a lastimarlos

En ese momento Izuku la abrazó y la consoló puede que lo que haya hecho haya sido imperdonable pero el sentia que todos podían cambiar.

Después de eso Izuku fue con Ishomi a comprar cosas para la otra casa secreta púes Izuku a pesar de haberla perdonado no se fiaba del todo de ella.

La bicolor se había ido y quedaron en que ella los vería en la noche en la casa principal.

Ishomi: Papá ¿Por qué volveremos con mamá si ella es mala?

Izuku: Tranquila cielo, ella dijó que estaba muy arrepentida y que hará todo para volver a tener nuestro amor

Ishomi: Entonces ¿Por qué compramos cosas para la otra casa si esta todo como antes?

Izuku: No es que desconfíe pero es mejor prevenir, si vuelve a pasar ya no tendremos que estar separados para que yo consiga un lugar para los dos

Ishomi: Está bien papá

Después de eso llamaría a Katsuki para avisarle que ya no era necesario que el fuera a dejar a Ishomi pues ya estaba todo arreglado y que le había gustado volver a hablar con su mejor amiga.

Seguido de eso fueron a dejar las cosas en su nueva casa y regresaron a la antigua donde Shouta los estaría esperando.

Izuku: Hola Shouta

Shouta: Hola amor, Oh hola hermosa

Dijó mientras se agachaba y besaba la cabeza de su hija.

Ishomi: Mamá ¿Podemos pasar ya?

La pequeña había dicho esto algo incomoda por el como su madre la trataba después de que hace unos dias ella la habia golpeado.

Shouta: Cla-Claro cielo

Decía la bicolor un tanto desanimada al ver que su hija se sentía incómoda con ella.

Izuku: Bueno pasemos

Era obvió que el pecoso trataba de aligerar el ambiente para que no se sintieran incómodos.

Después de eso entraron y vieron que Shouta estaba cocinando algo de Katsudon para cenar.

Shouta: Y cuentenme ¿Cómo les fue comprando?

Dijó mientras cortaba vegetales.

Izuku: Púes bien, compramos cosas para Kacchan porque me ayudo un poco y quise regresarle el favor comprando por ella

Cuando el pecoso dijó el nombre de la chica peliceniza se escuchó como la tabla de madera con la que Shouta cortaba los vegetales fue partida por el cuchillo.

Shouta: Oh ¿Así que fuiste con ella?

Dijó algo seria pues ella le había prohibido hablar con la peliceniza por obvias razones.