volar y aterrizar.

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Durante el vuelo, Carmín no paró de hablar sobre la nostalgia que le producía volver Buenos Aires. Manuel le respondió sin revelar sus verdaderos sentimientos al respecto. En gran parte porque no sentía nostalgia, sino más bien una mezcla de tristeza con ganas de huir. Al segundo que su amiga cayó dormida sobre el hombro de él, se tomó el tiempo de realmente procesar todo lo que estaba pasando. Habían sido dos meses de idas y venidas, de andar a las corridas para llegar con la plata, de hacer trabajos horribles y morirse de frío, y estar ahí sentado finalmente se sentía como un respiro, como un segundo de claridad y calma antes de que se jodiera todo.

¿Extrañaba a Bia? Más de lo que nunca extrañó a alguien, algo o algun lado. La extrañaba como quien extraña su persona favorita. Porque si, Bia y Manuel habían pasado por muchas cosas en sus años juntos, pero eso nunca iba a matar el cariño, admiración y respeto que se tenían. Al menos, no por lado de Manuel. Y creía conocerla lo suficiente como para asegurar, mano al corazón, que ella se sentía igual con él. La pregunta de porqué lo había invitado le había estado rondando la cabeza sin parar y creía por fin llegar a una respuesta clara: Bia seguía considerándolo una persona importante en su vida. Eso le llenó el corazón de un calor que no recordaba sentir en mucho tiempo. Casi tres años, para ser exactos.

Mirando el reloj en la muñeca de Carmín, no dejaba de pensar en su ruptura con Bia. La decisión que sonaba, en su momento, tan final como las diez previas, realmente había tomado vueltas que ninguno de los dos esperaba. A medida que se acercaba más a ella era como si se agudizara el dolor de garganta que lo estaba ahorcando desde el día cero. Todas las palabras no dichas, los conceptos no explicados, las personas metidas en el medio sin necesidad. Manuel miró a Carmín dormir en su hombro ¿Acaso ellos lo habían sentido también?

Y a ellos, ¿los extrañaba? Manuel hablaba con sus amigos, si, pero la ida a España había sido tan abrupta, tan repentina, tan poco meditada, tan poco él, que ocasionó que varios lazos se tensaran. No quería pensarlo de aquella forma, pero sí él había huido como cobarde, como si tuviera algo que ocultar, era normal que todos tomaran mayor partido por Bia. Aunque eso no lo sabía. Porque, volviendo al comienzo, tampoco era como si hablara tanto con ellos. Amargamente agradecíó en su mente esa falta de contacto, ya que era la excusa perfecta para explicarles como no sabían de su romance con Carmín. Esto debido a que se enteraban más sobre la vida del otro a través de lo que contaban en redes que lo que contaban en una conversación. Ya se había vuelto algo un poco aburrido y rutinario, lo que lo llenaba de tristeza. Habían sido su familia durante años y años. Se habían visto en sus mejores y en sus peores. Pero aun así se habían distanciado y era algo notorio. Le generaba pánico pensar que tal vez pudiese ser incómodo reunirse nuevamente con todos ellos.

Para su suerte, se habían puesto todos en contacto nuevamente cuando las invitaciones llegaron a la puerta de cada uno.

"¿Y vos, Manu, vas a ir?"

"Que copada Bia por invitarte"

"No se si podría ir a la boda de mi ex"

"Nunca voy a entenderlos"

Manuel solo se reía o respondía como podía. ¿Por qué la gente pensaba que esa clase de comentarios aportaban en algo? Al final cambiaban el tema a cualquier otra cosa. Cualquier cosa relacionada con la boda, claro.

"Ay Bia, pasanos fotos de tu vestido!"

"Ya los quiero ver"

"¿Como vas a tener tiempo para nosotros? ¡Debes estar corriendo estos días previos!"

La última pregunta vivía en la cabeza de Manuel. Se suponía que iban a estar haciendo varias cosas esta semana previa a la boda, al menos alguna que otra salida a almorzar o cenar, o eso habían dicho. El asunto del tiempo libre de Bia lo había discutido con Carmín una de esas noches donde discutían su plan maestro. Ella le había dado una respuesta entre las líneas de "debe haber planeado todo para ya tener esa semana libre". Manuel creía que se trataba más de una clase de despedida de soltera. "Ya vas a ver, cuando terminemos con un tío vestido de policía haciendo strip tease..." Carmín solo dio vuelta los ojos y dijo algo sobre como no quería saber tanto. Pero la realidad era que dejar una semana libre previa a tu boda solo para invitar a tus amigos sonaba como una locura. Bia los quería mucho, y los valoraba todavía más, de eso no había dudas. De nuevo el sentimiento de calidez se apoderaba de Manuel.

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⏰ Last updated: May 15, 2020 ⏰

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too late to say goodbye -binuel/carminuelWhere stories live. Discover now