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-¿Siempre es así?-pregunto el chino mirando a su alrededor.-¿No tienes privacidad? ¿Molestan a Jara?-La última pregunta la hizo con notable preocupación.

-Está todo bien Junnie.-se encogió de hombro mientras tomaba la mano de Jara.-No molestan y se mantienen a distancia porque mi representante habló con varias revistas que han publicado fotos de Jara sin autorización, ella está bien, no te preocupes.

Renjun asintió sin estar totalmente convencido.

-¿Te molestan a ti?

Jeno lo miro sonriendo para luego negar y abrir la puerta para que entrarán al pequeño pero acogedor local donde ya habían varias personas desayunando. Tomaron asiento en una mesa lejos de las ventanas por petición de Renjun y rápidamente fueron atendidos para ordenar.

-Papi, ¿puedo comer tocino?-pregunto observando el menú como si supiera leer.

-Claro princesa.-susurro sin mirarla ya que estaba concentrado en tomar de su agua lentamente.

-¿Estas bien?-pregunto Jeno posando su mano en la suya por encima de la mesa.

-Si, no te preocupes.-intento darle una sonrisa.

-Papi parece como el día que lo llamé.-dijo Jara mirando a su padre con un puchero.-Y luego colgaste.

-Jara...-empezó Renjun.

-¿Estas enfermo?-pregunto inmediatamente Jeno con tono preocupado.

-No, claro que no.-hizo un ademán despreocupado.-No pasa nada, estoy bien.

-Bueno...

La camarera llegó con sus órdenes minutos después. Jara y Jeno habían ordenado el típico desayuno americano mientras que Renjun había ordenado un panecillo de moras con un té de jengibre, esa mañana especialmente se sentía horrible.

-Eres aburrido.-dijo Jara tomando el tenedor con el puño y clavandolo en el tocino.

El tocino grasoso, luego en sus huevos estrellados. Jara estaba tomando un batido de ciruelas y el sólo pensar en comida tan pesada a horas tan tempranas hizo que su estómago se revolviera y tuviera arcadas.

-Renjun.-dijo Jeno incorporándose preocupado.

Renjun se paró a punto de decir algo pero no pudo por la ganas inmensas de vomitar, así que llevo su mano a su boca y corrió a donde parecían estar los baños.

-¿Papi?-Jara se puso de pie pero fue detenida por Jeno.

-Vamos a quedarnos aquí bebé, ¿si?, Si papi se sigue sintiendo mal nos vamos.-le sonrió para no preocuparla más y la niña asintió con un puchero.

Jeno moría de ganas por ir hacia donde estaba Renjun y ver que sucedía, pero definitivamente no podría dejar a Jara sola, eso no estaba en discusión. Cuando el rubio salió de los baños con su rostro pálido Jeno se puso de pie inmediatamente tomando la mano de Jara.

-Nos vamos, ¿si?

Renjun simplemente asintió y salieron del restaurante dando las gracias. Nada más llegar a la casa Renjun se tiró en el mueble de la sala de Jeno sintiendo su mundo dar vueltas.

-¿Vomitaste?-pregunto Jeno agachandose a su lado.

-No.-susurro.-No pude.-lloriqueo.

-¿Quieres ir al hospital?, ¿Algo pasó?, ¿Algo que comiste te hizo daño?

Renjun empezó a negar con la cabeza.

-Papá, papi, el tío Taeyong me llamo, voy a hablar con el.-dijo mostrando la llamada entrante en su celular, Jeno asintió y la pequeña fue corriendo a su habitación a hablar con su tío.

-Junnie...-susurro tocando su frente.-No tienes fiebre, por ahora.

-Estaré bien, no te preocupes, en serio.

Jeno lo miro inseguro con una mueca para luego acariciar sus mejillas con delicadeza.

-Tus mejillas.-susurro.

-¿Qué?

Pestañeo varias veces.-Ah, no, sólo es que están más rellenitas.-sonrió.

Renjun dejo de respirar por varios segundos pero luego se calmó al saber que Jeno nunca lo había visto embarazado así que no había de que preocuparse.

-Casi no hago actividad física.

-Entiendo, claro.-se incorporó.-Te haré una sopa, ¿si? Para que mejores y ya no tengas ningún malestar.-acarició su cabello y dejó un beso en su frente para luego irse.

Renjun ahogo su grito contra los cojines del sofá. ¿Que mierda le sucedía? Ya iba a tener dos días en América y no le había dicho a Jeno lo que se suponía debia decirle. Era horrible, era definitivamente escalofriante la situación porque cuando Jeno conoció a Jara está ya era una niña grande, pero tener que vivir el proceso del embarazo junto a el, más una niña era algo totalmente diferente. Así que tomando en cuenta un nuevo bebé, sumandole que Jeno era un padre genial pero no sabía decir no, que Jeno parecía querer intentar algo nuevamente y que Jara se estaba volviendo toda una Real princesa era algo que lo iba a volver loco. Debía explotar, debía decir la verdad en algún momento, necesitaba ayuda y manteniéndose en silencio no lo iba a lograr.

Pero luego volvía el miedo. Jeno no era simplemente un chico universitario o trabajando en una empresa, Jeno era modelo y era bastante reconocido y admirado. Aparecer de repente con una hija de seis y luego con un nuevo bebé del mismo chico que le había ocultado a su hija era realmente horrible. Se imaginaba todo Internet atacandolo, acusándolo de ser el malo de la historia sin saber realmente las dos partes. Suspiro girandose a mirar el techo mientras tocaba su pequeña pancita.

De todos modos, no volvería a cometer el mismo error con Jeno, no con respecto a ocultar bebés ni con el tema del sexo.

Por todos los cielos, ambos eran adultos y debían saber los límites a los que se enfrentaban porque sino Renjun terminaría dándole todo un equipo de fútbol para malcriar a Jeno.



















Debo editar el otro, ¿subo dos más o un sólo? Iqhsuqjsis ❤

Jara [noren]Where stories live. Discover now