𝕿𝖗𝖊𝖘

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— ¿Cuidar de mí? Ya soy suficientemente grande como para poder cuidarme solo — reclamó el castaño omega

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— ¿Cuidar de mí? Ya soy suficientemente grande como para poder cuidarme solo — reclamó el castaño omega.

— Sí, pero necesita a alguien que lo guíe —explicó el omega con cabello rubio —. Usted en este momento está perdido, necesitaba de mí — rió levemente.

— B-Bueno... es cierto —susurró el castaño.

— ¿Qué edad tienes? —preguntó el contrario.

— Dieciocho años — respondió el castaño.

— ¡Yo tengo veinticuatro! Debes decirme hyung —el rubio sonrió.

— E-está bien, hyung —se sonrojó levemente.

— Querías ir al jardín ¿Verdad? —el menor asintió a la pregunta del Yìxíng —. Está bien, acompáñame.

Yìxíng caminó hacia el jardín. ChanYeol iba caminando detrás de él, como un pollito siguiendo a su madre, pues el castaño estaba muy pegado al mayor. Ambos llegaron al jardín, el castaño se sorprendió por lo bello que era aquel lugar, todos los colores y animales que habían allí.

— Puede que el rey parezca una persona cruel y fría, pero a él le encantan los colores y los animales — dice el mayor con una sonrisa—. Él es quien manda a que este lugar esté así de bello.

— Vaya... es hermoso —susurró ChanYeol, pero igual el mayor le pudo escuchar.

Ambos se adentraron más al jardín. Llegaron hasta un lago, donde habían peces y el agua estaba tan limpia, que se podía ver con claridad los animales y plantas que habían dentro del agua.

Yìxíng y ChanYeol siguieron paseando por extenso jardín, hasta que empezó a llover. Estaban un poco alejados del castillo, por lo que se tardaron un poco el llegar, mojándose.

Cuando llegaron al castillo, el rey estaba allí, frunciendo el ceño y cruzando los brazos, notoriamente molesto.

— ¿Qué hacían allí? —fue lo único que dijo el rey—. ¡Están todos mojados! — gritó el alfa acercándose a Yìxíng.

— U-usted dijo q-que podía ir a-al jardín —habló con timidez el castaño.

— ¿Acaso no notaron las nubes? Era obvio que iba a llover —respondió el alfa, aun molesto.

— ¿Y cuál es el problema? No te vamos a mojar a ti —el de cabello rubio le respondió.

—Lay, mojaste toda tu ropa —seguía reclamando el rey.

— ¿Y qué importa? — Lay no entendía la actitud del alfa—. ¿Acaso estás molesto de que el omega ChanYeol se enferme? — se burló.

— ¿Q-qué? ¡Claro que no! — respondió nervioso, pero aun estando molesto—. ¡U-ustedes dos váyanse a sus habitaciones! —gritó fuertemente.

Lay rió y se llevó al castaño a la habitación en la que se estaba quedando. Ambos llegaron y el omega rubio le ayudó al castaño a secar algunas de sus prendas.

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Era de mañana, Chanyeol acababa de despertar, repentinamente la puerta de abre, dejando ver al omega que había estado con él el día anterior. Este omega fue hacia la ventana, deslizando las cortinas para que la luz del día pudiese entrar a la habitación.

— ¡Buenos días! —gritó con alegría el mayor.

— Buenos días —dijo en voz baja el castaño.

— Hyung... que no se te olvide que soy tu hyung —le regaño el de cabello rubio.

— Lo siento... Hyung —sonrió con nerviosismo el castaño.

Chanyeol notó que alguien entro, dándose cuanta que era Mina, quien traía una bandeja con comida. La beta simplemente dejó la comida en la mesa de noche y se retiró.

— Debes desayunar —le dice el mayor.

— ¿Por qué me traen el desayuno? El rey dijo que podía ir al comedor — respondió agarrando la bandeja con su desayuno.

— Bueno, creemos que lo mejor es que no tengas tanto contacto con el rey —dijo más serio el mayor—. Él puede llegar a ser... muy difícil.

— Eso ya lo noté —ríe el castaño.

ChanYeol empezó a comer, pero mientras comía, sentía ardor en la garganta, hasta que empezó a estornudar constantemente. Yìxíng lo noto, por lo que rápidamente se acercó a él.

— Creo que el rey tenía razón — susurró Lay.

— ¿E-En qué?— preguntó inocentemente el castaño.

— Ayer dijo que te enfermarías debido a la lluvia —el de cabello rubio mordió su labio inferior, nervioso —. Llamaré al doctor.

Lay salió de la habitación, dejando al omega castaño solo. Yeol sólo se acosto nuevamente en su cama, quería cerrar los ojos y dormir nuevamente.

La puerta siendo abierta hace que el castaño abra los ojos nuevamente, ChanYeol puede ver que estaba el doctor, Lay y extrañamente también estaba el rey allí.

— Te dije que te ibas a enfermar — dice con molestia el alfa, pero al mismo tiempo se burlaba.

— Lo siento —el castaño agacha su cabeza.

El doctor se acercó a la cama del omega y empezó a revisarlo. Minutos después, justo cuando el doctor terminaba el chequeo, entró Mina con un plato de sopa caliente.

— Su majestad —llamó aquel beta —.  Su omega está bien, sólo está un poco irritado de la garganta y sus defensas están bajas —todos los presentes allí se sorprendieron por las palabras del doctor.

— Disculpe, pero él no es mi omega — frunció el ceño el rey.

— Lo siento — se disculpó —. Lo supuse porque nunca hay omegas en esta parte del castillo, además del omega Yìxíng, pero él es de la familia — aquel doctor se inclinó como era debido y se retiró.

— Quiero que te tomes esa sopa que trajo Mina — fue lo único que dijo el alfa para luego partir de aquella habitación.

— Hyung ¿Usted es familia del rey? — Yeol preguntó debido a las palabras del doctor.

— Bueno... somos primos — hablo aquel omega—. Mi padre, al notar que era omega, me echó del castillo — dijo cabizbajo.

— ¿E-En serio? — ChanYeol mordió su labio inferior.

— Ya sabes, sólo los alfas pueden asumir el trono. Era el mayor de mis hermanos, al ser omega, me echaron. Cuando SeHun se enteró, decidió darme alojamiento aquí —sonrió.

—¿S- SeHun?

— El rey, aún con su mal carácter, sigue siendo buena persona con la gente que ama —explicó sonriendo el rubio.

ChanYeol por fin terminó de comer la sopa que Mina había hecho. Lay le dijo que tomara una siesta, así que el menor no se negó. Quedando así, profundamente dormido en aquella cama.

My King ❦ SeYeolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora