Nota XIII
22/04/2020 23:14 p.m
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Cuando no puedo pensar en palabras propias.
Cuando mi intelecto me falla y mi léxico se reduce al de un neonato, donde las gotas saladas predominan y la humedad es mi compañera.
Cuando mis emociones parecen más grandes que todo y la incertidumbre se cierne despiadada.
Yo escucho...
Palabras ajenas.
Sonidos creados.
Combinaciones de nuevos mundos.
Universos prestados que asemejan a mi realidad.
Ellos hablan por mí, cuando lo único que puedo hacer es temblar.
Ellos sienten por mí, cuando mi rostro y cuerpo solo expresan quietud.
Palabras ajenas.
Sonidos creados.
Me arrullan cuando la desesperación me domina.
Suaves caricias que besan mis párpados cansados, permitiéndome descanso y deteniendo las afluentes que nacen de mis ojos.
Les cedo el control...
Lloren por mí.
Sientan por mí.
Hablen por mí.
