Capitulo 9 "Arrepentido"

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  • Dedicado a al idiota que inspira todo esto
                                    

Hola!!! esta capitulo... como ya adivinaran, no esta editado, algun dia les contare porque no los he podido editar jjajaja lo siento! se que la ortografia y todo eso le da un toque, pero si el dia tuviese mm no se, tal vez treinta horas alcanzaria a hacerlo, pero bueno es lo que hay jajja  He quedado con un nudo en la garganta al terminar de escribirlo y con ganas casi desesperadas por seguir escribiendo.

Gracias por leer! no me enojo si votan y comentan, eso ayuda mucho a escribir, saber que a alguien mas le gusta y le importa lo que haces es motivante.

Saludos! :)

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Mi alma estaba tan divida que cualquier cosa me confundia, una palabra, una seña, una mirada. Habían tantas cosas en mi vida que estaban mal que me costaba concentrarme en lo que estaba bien.

Recorde el tatuaje de Matt, tan identico al mio que no había espacio para que fuese simple coincidencia, salvo que no decía exactamente lo mismo. Mi tatuaje solo decía “Destinantur”, que en español significa: “Destinados”. La marca siempre había sido parte de mi, la recordaba desde que tenia memoria. 

Sentía que debía preguntarle a Matt sobre esto, la incertudumbre se apoderaba de mi, era insoportable. Pero por mucho que quisiera saber la verdad, me asustaba, no podía, simplemente no me atrevía a descubrir lo que se escondía detrás de todo lo que me pasaba. ¿Y si los dolores no eran mas que los sintomas de una enfermedad mortal? Había tanto que debía conocer y tenía tan poco valor para hacerlo.

Luego de haber tenido a Matt tendido sobre mi cama, retorcido de dolor, habiamos dejado que la situación nos consumiera, poniendo detrás todo lo que nos parecia extraño, dejando las preguntas inconclusas vagar en el aire, aceptando que lo único que cada uno recibiría del otro sería su silencio.

Apoyada en el pecho de Josh, los recuerdos no dejaban de acecharme, era como si jamas pudiese desaserme de ellos, porque cada vez que los olvidaba, algo ocurria y ellos sin previo aviso volvian a mi.

-¿Te ocurre algo?- la voz de Beth me trajo de vuelta a la realidad.

-Pensaba en que deberiamos salir todos juntos hoy- mentí.

Emma se dejaba acariciar por las manos de Ian, mientras Beth jugeteaba con el cabello de Nathan.

-Me encanta la idea- comento Emma.

Subi la cabeza para mirar a Josh, me beso dulcemente en la frente y acaricio con el pulagar la palma de mi mano que estaba entrelzada con la suya.

-Nosotros tambien estamos de acuerdo- aporto de Beth.

-¿Lo estamos?- Nathan enarco una ceja.

-Como te tienen- bromeo Josh, soltamos una carcajada.

-Calla - Beth le lanzo una mirada simpatica mientras le sonreia.

Era extraño como las cosas volvian a ser lo de antes, tan simples, tan divertidas, era como retroceder  en el tiempo.

 -Juntemonos todos a eso de las diez en mi casa, puedo pedir el auto- sugirio Beth.

Su padre era un empresario exisitoso, el dinero nunca habia sido algo que faltara en la vida de Beth. Sin embargo, el amor no se puede comprar y ella tenia tanto rencor guardado hacia su padre que cada vez que lo veia era apenas capaz de esbozar una sonrisa, era como si le succionaran la alegria del cuerpo. Su madre se mantenia al margen de todo, incapaz de tomar las riendas de su vida y ayudar a sus hijos. El señor Sweeney no era un mal padre, pero no era uno bueno, eso era lo que más le dolia a Beth, no era ni lo uno ni lo otro. La verdad, no se que es peor.

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