Nia y Romi están en una planicie llena de hiervas, se sientan en una manta de lana con rayas y colorines ambos disfrutan del día del momento de la calidad de la mañana, respiran hondo en ese idílico paisaje de. Jesús
Ángel Chino: Hola señores
Nia: Ya esta aqui Chino, no hacemos nada solo descansamos nada más
Chino: Si están aqui, será por algo
Nia: Estamos aqui, para no hacer nada
Chino: Pues tienen que hacer algo, están siempre muy nerviosos no les entiendo imposible entenderles siendo mayores actúan como niños y cuando son viejos no quieren ser adultos quienes son qué hacen, se encuentran mal
Nia: No estamos, nervioso
Chino: Están nerviosos se les ve, siempre están pidiendo por que no esperar los acontecimientos lo que se les dice por qué no esperar ha Jesús, sus promesas están retrasando las cosas al hacerlo mal
En sus manos el Chino, trae una manta idéntica a la que estamos sentados
Chino: Tengan saquen de esa manta, cien hilos de lana que no sea más ancho de un dedo la longitud de un metro cincuenta, no quiero madejas oh hilos revueltos los quiero rectos estirados limpios y muy bien hecho
Nia: Cien trozos de esa manta, cien
Chino: Si cien trozos, de un metro cincuenta
Nia: Vale dame una tijera
El Chino, la miro con mala cara
Nia: Vale pues una aguja de tricotar, bueno dos mejor
Chino: Dos agujas de tricotar una para cada uno así lo hace cualquiera, tienen que hacerlo sin nada haya ustedes sin herramientas, da lo mismo el tiempo, que usen háganlo tranquilos
El ángel Chino, desapareció
Nia: Cómo lo hacemos. Oguines
Ambos mirando la manta, pensamos como sacar el hilo con un palo del campo donde estamos pudiera ser, si sacamos cuatro oh cinco hilos ya comenzamos a ha sacar mas y mas
Todo era más fácil de esa forma llegamos ha sacar los cien hilos de lana, tardamos todo el día pero lo sacamos
Chino: Ya terminaron, con la manta
Nia: Si ya sacamos los cien hilos, terminamos están extendido y estamos tranquilos
Chino: Pues ahora hagan lo mismo con la manta, donde están sentados
Nia: Chino con esta también, no quiero hacerlo es mucho trabajo y tiempo
Chino: Comiencen con esa manta, hagan lo mismo
Así lo hicimos con la manta donde estamos sentados, durante toda la noche más la mañana del siguiente día, las doscientas tiras de hilo estiradas y colocadas
El tiempo fue día y medio, con la noche incluida
Chino: Bien ya lo terminaron
Nia: Ahora qué hacemos con estos hilos
Ambos miramos al Chino, mas las tiras de lana ya no habían tiras eran dos mantas
Nia: Grito ya no hay ya no hay hilos las mantas otra vez, con lo que nos a costado tanto trabajo con las horas que pasamos para deshacerlas
Chino: Recojan una manta cada uno, vallan a su casa
Así lo hicimos con la señora (Gritando) con lo que nos ha costado las tenemos como al principio las dichosas mantas
Posdata. Bendito el nombre de Jesucristo, viviente padre y Dios nuestro