III•(Actualizado)

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Las semanas pasaron y muchos cambios ocurrieron en la Hacienda Las Dianas. Deborah se volvió una esposa más atenta y considerada, quería estar lo más cerca posible de Victoriano; después presenciar la curiosa escena entre él y la criada el día del torneo, decidió que necesitaba ganarse la confianza de su marido. Sus habilidades sexuales no bastaban para saciar las necesidades de Victoriano, no después de que la rechazó aquel día.

Por otro lado, Inés seguía siendo atormentada por sus miedos y preocupaciones; ahora más que nunca después de que  Loreto había salido de la prision y la busco en el Mercado. Ella no podía creer que el hombre que abuso, maltrato, e hizo miles de perversidades con su cuerpo estaba libre. Ganas no le faltaron para darle una mera cachetada pero sabía que la gente hablaría y los chismes podrían llegar a los oídos de Victoriano. Por eso esa razón decidió no contarle a Victoriano sobre el regreso de Loreto. Inés sabía que si le contaba, Victoriano haría lo imposible por matarlo con sus propias manos. O peor aun utilizaria a su hijo, Emiliano, para saciar su odio por Loreto. Inés por nada del mundo quería que su hijo saliera afectado de este problema, su hijo no merecía saber la verdad de su padre y mucho menos el origen de su existencia.

En la Hacienda todo parecía complicarse, todo lo relacionado con el amor y los secretos parecían querer salir a la luz.

El amor parecía ser un invitado en Las Dianas, pero no solo serian los amores mas jóvenes como Emiliano y Constanza los tortolos que caerían. También había un par de viejos amantes que muy pronto darían rienda suelta a su corazón.

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Casa Mayor- Habitación de Diana

Cons: Well, Cassie dinos eso tan importante que querías contarnos. Nos tienes muy intrigadas (dijo mientras se acostaba en la cama de Diana)

Dia: ¡Vamos, desembucha!

Cas: Esta bien... (respiró profundamente) Hace unas semanas atrás llegue un poco tarde a la casa, Alonso me trajo y cuando estaba a punto de entrar a la Casa Mayor, vi a Papá borrachisimo recostado en la fuente.

Cons: You're kidding, ¿right?

Dia: Papa, ¿borracho? Nunca pensé que la derrota con ese tal Mendoza lo afectara tanto.

Cas: ¡Si, ni yo tampoco! Pero eso no fue lo mas raro... Después el empezó a decir cosas sin sentido.

Cons: ¿Que cosas, Cassie?

Cas: Bueno con palabras textuales "La mujer de mi vida se fue, me abandonó".

Dia: ¡Puff! Casandra, pues obviamente estaba hablando de nuestra madre.

Cons: ¡Exactly! El dijo que mamá se fue, es porque ella está en el cielo. No veo el misterio.

Cas: ¡Eso mismo pense yo! Pero... cuando le dije si que mamá se murió, el dijo que no. Y muy bien sabemos que "los niños y los borrachos siempre dicen la verdad" 

Dia: Casandra, ¿estás sugiriendo que nuestra madre no está muerta? ¿Que ella huyó, nos abandonó?

Cas: La verdad, no se. Estoy muy confundida. (Recostándose en las piernas de Diana)

Cons: Un momento, ¿entonces nuestra madre no fue la mujer de su vida?

Cas: Al parecer no... (suspirando con una pizca de temor)

Dia: No, no es posible. Es mejor que no hagamos más conclusiones sin antes tener pruebas. Papa estaba ebrio, él no era consciente de lo que decía.

Cons: Didi, tiene razón. (las hermanas aún seguían intrigadas) Bueno, vayamos al comedor que de seguro nuestra Nani nos preparó algo delicioso.

Las Amazonas: Ines y VictorianoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora