UN VIAJE AL PASADO

Seis

Ya estamos listo barca, solo faltas tú.  -

Solo me pongo los tenis y ya Roberto. -

Asintió mientras carga en brazos a Ian, el cual estaba jugando con la cara del mayor. Después de unos minutos barca salio con una cangurera/rebozo para bebés puesta, roberto  soltó una risa por como se miraba.

¿Qué? Dame a Ian, que yo lo llevare. -

Este le paso a Ian colocándolo dentro, se miraba malditamente tierno o es lo que al menos pensaba Roberto.

Ya parecen familia y ¿a donde irán? -

Ambos se asustaron un poco volteando a ver a Juan, el cual estaba con su cámara listo para tomar una foto.

No te atrevas o mato a burrito. -

Con burrito no te metas animal. -

Iremos a las praderas, haremos un picnic familiar. -

Que tierno, buena suerte y diviertan se. -

🕊

¿Falta mucho apa? Es que ya tenemos hambre. -

Falta poco, no se desesperen pequeños. -

Esta bien, ¡Alex una carrera! -

Ambos pequeños salieron corriendo, eran perseguidos por Roberto ya que no quería que les pasara nada malo. Mientras barca cargaba a Ian y tomaba la mano de Gael.

Siempre hacen lo mismo. -

¿En serio? Oye Gael, cuando Roberto te tuvo ya no corrió peligró ¿verdad? -

Nop, apa esta muy bien después de tenerme. -

Suspiro aliviado, por lo menos sabía que Roberto estaba bien después de tener a Gael.

¡Barca! ¡Ayuda me joder!. -

No, haz lo tú que yo estoy cuidando a Ian y Gael. -

Idiota, si no me ayudas te juro que me largo y te dejo solo. -

No me importa, ¡vete!. -

Roberto sólo lo miro realmente molesto, camino hasta donde estaban los niños los cuales se habían tapado los oídos para no ir. Los tomo a ambos llevándoselos hasta la pradera, detrás de el venia barca junto a los dos pequeños.

Perfecto, la cague seguramente me odia. -

Apa no te odia. -

Tú que sabes, eres muy pequeño para estas cosas. -

Realmente no entiendo como tú eres nuestro papá -hizo un puchero Gael -  Mi papá es cariñoso a veces se molesta con tito Akim y Juan, Pero conmigo y mis hermanos siempre esta riendo y jugando con nosotros y también le chincha a Apa pero luego le da besos y le dice que lo ama mucho y que nunca, nunca, lo dejará y que nos va a cuidar a los seis y que...-

Espera un poco. - Hablo Barca cortando a Gael - ¿Has dicho seis porque aún no sabes contar?-

Yo si se contar. - Hablo molesto el pequeño mirándolo.

Esta bien, cuenta conmigo; Mateo, Alex, Roberto, Ian y.... Tú total, cinco personas. - Termino de hablar barca con cinco dedos al frente.

El pequeño bufo molesto para poner otro dedo más.

Y Malik. -

¿M-Malik? - El mayor pregunto nervioso.

¡El hermanito! - Hablo con obviedad el pequeño.

¡El que tiene Apa en la barriga, cual va a ser si no! -

¡Santo dios! - Grito asustado, buscando con la mirada a Roberto pero este ya no estaba.

Le extraño, Apa siempre me permite darle besos en su barriga y decirle cosas lindas. -

Van a volver, ya lo verán. -

🕊

Ya se tardaron, niños esperen aquí iré a ver que paso. -

Ambos niños asintieron quedándose quietos en la manta que estaba tendida en el suelo, estaban aburridos así que comenzaron a jugar entre ellos.

Dios pensé que no vendrían, me tenían preocupados. -

No te preocupes más, ten carga a Ian que iré sirviendo la comida. -

Roberto tomo al pequeño en sus brazos el cual tocó su rostro varías veces jalando le las cejas.

Duele, duele pequeño Ian, lastimas a Apa. -

El pequeño solo río divertido haciendo que Roberto se le una, fuero hasta los demás los cuales ya estaban acomodados.

Bien, niños coman mientras yo le doy comida a su hermanito. -

Comenzaron a comer todos por igual, de vez en cuando barca contaba mini historias para entretener a los niños. Miraba disimuladamente a Roberto el cual reía y se le miraba muy feliz, acercó su mano hasta la de el para entrelazarlas.

Roberto lo miro confundido pero solo le sonrió, Mateo y Alex sonreirán felices al ver a sus padres de esa forma.

Estuvieron mas de cinco horas fuera de casa, los pequeños estaban en la manta tendida descansando después de jugar mucho. En cambio barca y roberto estaban en unas bancas cerca de ahí mirando el atardecer.

Fue un día grandioso, me divertí mucho con los niños. -

Si, quien lo diría pero igual me divertí. -

Ambos observaban como el solo poco a poco se fue escondiendo, roberto se levanto para ir hacia los niños. Barca le iba a decir algo pero ya no era momento.

Ayuda me, tenemos que llegar antes de que oscurezca más. -

🕊

Dos mayores se dejaron caer en el sillón agotados, los pequeños estaban ya dormidos cada uno en las habitaciones acordadas.

Estoy muy cansado, debemos dormir barca. -

Si, pienso lo mismo. -

Hasta mañana, descansa. -

Este se fue dejando lo solo en la sala, suspiro pesado y se fue a su habitación.