Capítulo 12. Cambio de planes

Start from the beginning
                                    

Kakashi: ¿Eh? ¿Eso es todo?

Gai: -Los ojos de Gai brillaron con malicia y emoción. - Sabía que preguntarías eso, no es cualquier ave, es la gran ave de mal carácter y paradero desconocido, llamada Bijon. Se dice que aquél que logre tomar una de sus plumas doradas, será premiado con una visión a su futuro.

Kakashi: ¿Dónde escuchaste eso? No creo que sea más que un mito.

Gai: Lo escuche de unos viajeros que llegaron hace poco al lado de la ciudad. Lograron verla, pero no consiguieron tan siquiera alcanzarla. Dicen que su plumaje dorado es inconfundible,

Kakashi: Realmente, me niego a creerlo.

Gai: Lo dice el que se puso paranoico por un dragón que nadie vio.

Kakashi: Es diferente, teníamos pruebas de que existen y al final fue real. Hablando de eso, debería irme...

Gai: No tan rápido, aceptarás el reto, ¿verdad? O acaso el sexto Hokage ha admitido su derrota.

Kakashi: No, es sólo que no creo en algo como eso, pero vale lo acepto. Comenzando desde...ahora.

Gai: ¡Esa es la actitud, Kakashi! espera, ¡¿Tan pronto?!

Kakashi: Saldré de la aldea al anochecer, me aseguraré de preparar lo necesario para que Raiden esté tranquilo bajo tu cuidado. ¿No hay ningún problema con ello o sí? Después de todo dijiste que podrías echarme una mano con eso, sólo serán unos días, no más de tres.

Gai: ¡¿Qué hay de Ayane?!

Kakashi: Ella... -dudó un poco antes de responder. No era buen momento para contarle todo lo que estaba pasando, la misión era secreta, incluso para Gai. - se está recuperando de un enfrentamiento que tuvimos hace poco, está en mi habitación algo eh, inconsciente.

Gai: Nunca antes he cuidado de un bebé.

Kakashi: No es tan difícil, ya verás, tómalo como un, reto y bueno, una misión directa que el Hokage tiene para ti. -Guiñó un ojo, sabía que Gai no podría resistirse a ello si lo manejaba de esa manera.

Gai: ¡¡Acepto!!

Kakashi: Sabía que podría contar contigo, Gai. En cuanto este listo para irme, te lo haré saber, sólo una cosa más, que sea nuestro secreto, ¿de acuerdo? Como Hokage no puedo irme, así como así de la aldea, será un viaje tan rápido que nadie notará mi ausencia. Además, imagina como se pondrán todos cuando sepan que abandoné mi puesto por uno de nuestros retos.

Gai: ¡Entendido! Llámame cuando estés listo.

Kakashi levantó su pulgar en señal de aprobación y volvió a su departamento. Revisó que mientras no se encontraba todo siguiera en orden. Raiden continuaba dormido y Ayane estable. Realmente le parecía la peor idea dejar a ambos con Gai, pero mientras tuviera que mantener oculta la existencia de Ayane en su vida y en la aldea, era un riesgo que estaba dispuesto a correr, sobre todo, la situación lo ameritaba, no podía seguir perdiendo el tiempo sin saber qué es lo que ocurría.

Preparó todo lo que, según él, era esencial para cuidar de su hijo y con lo que Gai no tendría problema alguno. Preparó también provisiones y unas cuantas píldoras de alimento para recuperar fuerza y no tener la necesidad de tomar un descanso, si realmente quería llegar lo más pronto posible, debería realizar un viaje sin interrupciones.

Ya casi era media noche, las calles de la zona de la aldea y la ciudad estaban casi desiertas, gracias al toque de queda que había implementado semanas atrás. Hacía unas horas, había bañado, alimentado y dormido a Raiden, era momento perfecto para irse.

𝗘𝗟 𝗡𝗜𝗡𝗝𝗔 𝗗𝗘𝗟 𝗗𝗥𝗔𝗚𝗢́𝗡 𝗡𝗘𝗚𝗥𝗢 || 𝐂𝐨𝐧𝐭𝐢𝐧𝐮𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧Where stories live. Discover now