Escuela de Novias

Noticia desafortunada

-mama, por favor... no me llames cuando este en el hospital, es frustrante no poder tener una conversar con mi padre tranquilamente-dije desganada mientras me movía de un lado a otro en el pasillo, habían pasado ya algunos días desde la propuesta de Bratt, no sabía nada de él desde entonces, simplemente cada vez que llamaba prefería ignorar sus llamadas, lo único que me importaba era la salud de mi padre

-Nadia... por favor necesito que vengas a comer hoy a la casa- dijo mi madre rogándome

-mama, no puedo... sabes que adoro comer aquí con mi padre... por qué no lo entiendes- dije algo molesta, después de tanta insistencia simplemente se me salió una afirmación con tal de que me dejara en paz

Mi padre se había quedado dormido después de su comida, tome mi bolsa y me dirigí a casa, me sentía agotada, no había comido en todo el día, fue una sorpresa darme cuenta que no comeríamos solos, en la entrada de la casa habían dos coches uno era de los Thompson y el otro no lo conocía...

- Buenas tardes familia- dije saludando cortésmente a todos los presentes- lamento que me encuentre en tales condiciones, acabo de regresar del hospital - dije

- Cariño, debería descansar un poco... te notas agotada- dijo Carly algo preocupada

- No te preocupes Carly, estoy bien- dije sonriendo a la señora Thompson

- Bien pasemos al comedor, la comida esta lista-dijo mi madre quien se encontraba al marco de la sala

- Está bien... adelántense me iré a lavar las manos, en un momento los alcanzo- subí a mi habitación y deje mi bolsa en mi cama

Baje al comedor, todos estaban sentados, a la cabecera mama, a su lado derecho se encontraban los Thompson y al frente Bratt y una silla junto a él que me correspondía a mí, me senté de inmediato no preste mucha atención en él, no me sentí muy a gusto con el después de lo que dijo en la propuesta, comimos silenciosamente hasta que finalmente mi madre dijo la peor noticia...

-Cariño, Carly me hablo sobre una escuela en la cual te pueden enseñar a planear todo para la boda... y nos gustaría que fueras-dijo mi madre, la mire un tanto curiosa

-Eso sería estupendo, lo hare después de quepapá mejore- dije tomando un poco de agua- mi madre y Carly sonreían un tanto nerviosa

-que ocurre??- pregunte a ambas

-Nadia cariño... creemos que deberías de tomar el curso ahora, se que aun no deciden la fecha de la boda, sería bueno comenzar a planearla, además te distraerás un poco y que mejor que planeando una boda- dijo Carly

-ya veo... lo siento pero esto puede esperar, no hay prisa de casarnos o si Bratt?- dije mirando a mi prometido

-por supuesto que no, cariño- dijo tiernamente tomando mi mano

-Nadia, estas agotada, estas tomando un papel que no te corresponde, cuidar de tu padre es mi responsabilidad hija, se que amas a tu padre pero tienes que descansar y dedicarte a lo tuyo , que es tu boda-dijo mi madre

-creo que esto sería algo egoísta de mi parte- me levante de mi silla y eso es lo ultimo que recuerdo...

Unos minutos después desperté en mi habitación, esta recostada en el regazo de mi prometido, mi madre y Carly estaban sentadas al borde de la cama mientras el señor Thompson llamado al médico,desde el marco de la puerta

-Que paso??- dije aturdida, intentando sentarme en la cama pero no podía hacerlo ya que Bratt me sujetaba para mantenerme recostada

-Cariño desmayaste- dijo mi madre

-Vamos salgan, será mejor dejar descansar a Nadia un poco - dijo el señor Thompson

Quería estar sola, sabía que mi cansancio era ocasionado por estar casi todo el día en el hospital

-Bratt ... si no te molesta, me gustaría estar sola- dije zafándome de sus brazos musculosos

-basta Nadia, esta actitud que estas tomando esta colmado mi paciencia, ¿no te das cuenta del daño que te estás haciendo sola?,- dijo molesto

-estoy harta Bratt... estoy cansada de la frialdad con la que me hablas ¿Por qué no eres capaz de tratarme bien ?- dije mientras me daba la espalda, solo esperaba una respuesta a mi pregunta pero mi trabajo fue en vano, a cambio simplemente pude observar su esbelta espalda saliendo de mi habitación.

Eran las 7am cuando llegaba al hospital, mi padre se encontraba despierto, cambie las flores antiguas por unas flores nuevas que había comprado de camino al hospital, su rostro ya no reflejaba el mismo semblante, salude cordialmente a la enfermera quien checaba el suero.

-Nadia, me gustaría hablar contigo de algo que me preocupa... - dijo mi padre desganado, me senté junto a él y preste atención

-Que ocurre padre... te sientes bien??- dije tomando su mano

-Estoy bien cariño... pero tú no... has venido aquí desde el primer día en que enferme y estoy muy agradecido, ayer tu madre me hablo- dijo

-papá, basta!! No vas a creer toda la basura que te dijo o si?- dije algo irritada

-Nadia... por favor escucha... tu madre no miente, ahora tu rostro muestra cansancio, me preocupa que hayas dejado de asistir a la escuela, que no salgas y que tus ánimos estén por los suelos a causa de mi enfermedad, ya no veo a mi princesa con esa gran sonrisa-dijo el preocupado

- papá..-dije tristemente

-Cariño, quiero que vuelvas a sonreír, y no creo que lo logres, siguiendo aquí... será mejor que vayas a esa escuela de la que tanto habla tu madre... tu madre cuidara de mi a partir de hoy -dijo el sonriendo levemente

- papá, permíteme seguir a tu lado... no hagas de mi vida algo doloroso- dije con lagrimas en los ojos

-Nadia, por favor asiste a ese lugar, hazlo por mí princesa- dijo el

-Está bien papá, lo hare por ti-dije y así fue como deje de ver a mi padre durante un largo periodo.