Eras tú ✔️#Tú 1

Capítulo 34. No Podemos Seguir Con Esto

Después de lo que me pareció una eternidad me decanté por hablar. - Ya que nos va a tocar aguantarnos podrías mirarme al menos.

- Relájate que son 5 minutos.

- No me refiero al tiempo que estemos encerrados aquí, sino a todo el tiempo que aún nos queda por pasar juntos, Nick.

No recibo respuesta, es más me aparta la mirada.

- ¿En serio?! ¿Esto va a ser así lo que queda de año??

- ¿Así como?

- Tú esquivándome y yo como una tonta intentando hablarte. Y sabes perfectamente que no soy como las demás chicas con las que te has acostado.

- Lo sé - dice en un susurro casi inaudible.

- No lo parece. - digo enfadada.

- ¿Que quieres que haga, qué me comporte como si nada hubiera pasado? - pregunta él alterado.

- ¿Y se puede saber qué ha pasado? Ni que te hubiera puesto los cuernos!

- ¡Eso yo no lo sé! - me devuelve el grito.

- ¿¡¿Crees que te he puesto los cuernos, Imbécil?!?

- ¡He dicho que no lo sé!

- Pues para que lo sepas tuve la oportunidad y no lo hice, porque te quiero!! - se queda perplejo mirándome, y eso todavía hace que me enfade más con él por pasar de mí y por ser tan injusto conmigo.

- ¿Por qué no lo hiciste? Tampoco parece que yo te importara tanto. - dice después de unos segundos, volviendo al ataque.

- ¿¡Es que no me has oído!? ¡PORQUE TE QUIERO IMBÉCIL! - No le dejo que hable y le beso. Le beso como nunca antes lo había hecho. Echaba tanto de menos el roce de sus labios con los míos, la sensación de paz que me transmite cuando nuestras lenguas se juntan y juegan entre sí.

Nick me coge por lo hombros y me separa. No hace falta que diga nada porque mi expresión de duda lo dice todo, no sé qué pasa por su cabeza, nunca lo sé, y es algo que me está matando. Agacho la cabeza porque no soporto ver como me está mirando y es entonces cuando él junta de nuevo nuestros labios en un beso todavía más salvaje, con más deseo. Nos necesitamos el uno al otro, nos necesitamos tanto que no podemos soportarlo.

- ¡Para! - me detiene y se separa todo lo que puede dentro de la pequeña caseta de la piscina. Que os informo, no es mucho.

- ¿Qué? -digo aturdida y desconcertada.

- Que no podemos seguir con esto. Ya no estamos juntos.

- Pero eso puede cambiar Nick, hasta hace unas semanas o unos días, no estoy muy segura, teníamos una relación y ...

- ¡Nora, basta! No podemos.

- ¿Por qué no?

- Porque...

(...)

- Venga anímate. Mi hermano no merece la pena es un capullo engreído que solo piensa en si mismo. - me intenta animar Paris.