Karmaland fanfic (one shot)

Amigos con derechos (FarganxAlexby)

ADVERTENCIA: Contiene contenido sexual.

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-Joder Alex- suspira David mientras se coloca la remera, tapando su desnudo torso. Estaba exhausto y debía volver rápidamente a su casa para bañarse y prepararse para su cita. En la cama, aquella cama que hace unos minutos presenció un encuentro sexual, se encontraba Alex acostado enredado entre las sábanas tapando su cuerpo desnudo. A pesar de haber mostrado más que su cuerpo hace unos minutos, siempre al acabar y ver a David cambiándose apurado le agarraban nervios y timidez. -Ya hemos hablado de esto, somos follamigos, ¿vale? Nada más, no puedo quedarme a dormir.

-Vale- susurra Ale tristemente, aunque finge una sonrisa y lo observa -Diviértete en tu cita con..Dulce, ¿Verdad?

-Si, Dulce. Nos vemos, te escribo luego- dicho esto, tomó sus cosas y salió por la puerta sin mirar hacia atrás.

Ya iban tres años de esta relación que mantenían Ale y David. Siempre fueron grandes amigos, eran inseparables, el uno con el otro contra el mundo. La gente solía envidiar su amistad, una amistad tan sana. Ale se encontraba feliz y contento, todos notaban eso, sobre todo los fans. En los vídeos siempre irradiaba buenas energías, siempre sonreía ampliamente, siempre charlaba y muy poco le afectaba en realidad. Sus amigos amaban pasar tiempo con él ya que siempre estaba disponible y de buen humor, y cuando los días se ponían duros estaba Fargan allí para ayudarlo. Se sentía como protegido, seguro de que tenía una persona a su lado que la apoyaría en todo. Y él también se mostraba a disposición de su amigo, para que le cuente lo que quiera.

Pero todo terminó como suele terminar. Ale se enamoró, comenzó a ver a su amigo con distintos ojos. Ya no solo quería tontear con él y jugar, también quería abrazarlo, tenerlo cerca, sentirlo, besarlo. Quería llegar y saber como había estado su día, sentía mariposas revolotear en su estómago cada vez que le oía hablar y todo lo que saliera de la boca de David era oro puro. Cuando David estaba triste, Ale también. Estuvo varios meses negando su amor hacia su mejor amigo, creía que estaba confundiendo enamoramiento con amistad, pero luego se encontró despertando todas las mañanas agitado, exaltado, sudando debido a los sueños con Fargan. Era un enamoramiento tanto mental como físico, su cuerpo también deseaba a David.

No le gustó al principio estar enamorado, no quería salir lastimado. Ale siempre salía lastimado en cuanto al amor, no tenía suerte con chicas y mucho menos con chicos. Nunca nadie le correspondía. Eso le brindaba inseguridad de todo tipo, se sentía poca cosa, insuficiente. Por eso guardó los sentimientos por David dentro mucho tiempo. Estaba bien ocultándolos, de hecho, no era tan doloroso como se lo había imaginado. Por que después de todo seguía teniendo a su persona especial, se seguía sintiendo seguro, seguía teniendo a Fargan a su lado y solo eso le importaba. Hasta que en una fiesta que organizó Rubius todo cambió.

Había mucho alcohol. Una cantidad excesiva para las pocas personas. Jugaron todo tipo de juegos, se emborracharon, grabaron historias de Instagram y bailaron. Todos estaban en su propio mundo, nadie entendía lo que sucedía a su alrededor debido a la borrachera. Pero Fargan era el peor, apenas podía mantenerse de pie. Aun borracho Ale estaba muy pegado a él, preocupado. No le permitía tomar más y le entregaba botellas de agua. Buscaba ayuda a sus alrededores, pero cada chico estaba ocupado en su mundo. Guillermo estaba hablando con Samuel, Ruben bailaba junto a Irina y Mangel, Lolito se gritaba con Auron y Luzu estaba dormido en el sillón. Luego de largar un enorme suspiro se levanta e intenta levantar a Fargan. No estaba del todo seguro de poder llegar, sentía que perdería el equilibrio en cualquier momento, pero se obliga a mantenerse en pie por su amigo. David se le apoya y se sostiene de sus hombros, y Ale puede sentir el calor de su cuerpo contra el suyo y se sonroja.