las historias eróticas de un adolescente

Y ahora que ?

Sábado por la mañana.

¿?: *Voz tenebrosa*. Por fin podrás ver sabrás de lo que soy capas y lo que te pasará quedará hasta en el más mínimo pensamiento. *Suelta una risa escalofriante muy fuerte*.

Alan: *Intentando comprender lo que sucede*. Cierra la puta boca, ¿!Quién mierda eres!?, ¿En dónde mierda estoy?... *Caminando por la oscuridad de repente cae por un vacío más oscuro de lo que ya estaba, escuchaba susurros, lamentos y al caer suelta un grito que desaparece mientras más cae*

Pasan 2 dias.

Ana: *Se levanta algo dormida*. Cielos que hora será?, 10:30 na que tem.... 10:30!!.

*Se escucha un ruido muy fuerte en su casa*

Ana: *sale corriendo de su cuarto*.
¿!Que paso!?, ¿¡ Todo está bien!?.

Laura (madre de Ana): si hija no te preocupes solo fue un trasto que se me ah caído. *Suelta una sonrisa*

Ana: *Aún algo asustada*. Cielos madre, que buen susto me lleve.

Laura: *Sonríe*. Perdón hija fue error mío.

Ana: *Ya más tranquila*. Bueno, lo que me interesa más es que no te paso nada y no fue algo grabé, me iré a bañar para después desayunar.

Laura: Esta bien te prepararé el desayuno.

Ana: *Suelta una sonrisa grande* Gracias madre.

Pasan 30 minutos

Ana: *Aún desnuda*. Me llevaré una falda hoy con un cachetero de encaje no se verá mal para mí *Se muerde el labio*

Laura: *Grita desde el comedor*. Ana, el desayuno está listo.

Ana: *Grita*. Voy en un momento. *Se termina de poner ropa interior y sale a desayunar*.

Laura: Pero que linda te vez.

Ana: *Se sonroja* Muchas gracias mamá.

Laura: Te recuerdo que es lunes y ya son las 11 en punto.

Ana: No es tan tarde recuerda que entró a la 1.

Laura: Está bien.

Terminan de desayunar.

Ana: *Con voz de satisfacción*. Si que estuvo delicioso, casi no me lo termino.

Laura: Lástima que tú padre no está aquí, sabes que le encanta cuando hago mucha comida.

Ana: *Sonríe*. Si que le gusta mucho, ya son las 12:50, me tengo que ir.

Laura: *Sonríe*. Ten mucho cuidado y estudia mucho.

Ana: *se cuelga su mochila, se pone sus audífonos y sale a la calle*. Creo que será un viaje largo. *Camina al colegio*

Pensamiento de Ana: Esto de estar hablando con Alan no me está gustando, apenas lo conocí y ya le di a entender que me gusta el masoquismo, en que tipo de persona me eh convertido, aún que no puedo mentir en qué me excite mucho al estar tan cerca de el rose de nuestros labios y la forma en que me dice las cosas.... No no basta tengo que dejar de pensar en eso. *Sigue caminando*

Pasan 10 minutos y llega al colegio.

Ana: *Voltea a ver a todos lados y se percata que no está Alan, ni Jair*. A lo mejor y están dentro del aula ya. *Entra y no duda en entrar directamente al aula*.

Jair: *Ve a Ana llegar al salón y pone una sonrisa*. Hola Ana, el lugar está libre, te quieres sentar aquí?.

Ana: *Pone una sonrisa al ver a Jair*. Hola!, ¿Cómo estuvo tu fin de semana?.

Jair: *Desvía la mirada a la ventana y se pone algo triste*. Solo no le vallas a contar a nadie ni mucho menos a Alan.

Ana: *Sin entender lo que pasa*. Que no le cuente a nadie, que?. *Intenta evadir el nombre de Alan, apesar de que esté muy preocupada*.

Jair: *Pone cara de preocupación y miedo*. Pues Alan... Lleva 3 días en el hospital... Tomo droga de más.

Ana: *Intenta que Jair no se percate de la intensa preocupación* No creo, es posible que esté en una fiesta drogándose y ahogado en alcohol.

Jair: *Suspira*. Espero que lo que digas sea verdad.

Ana: *Suelta una palmada en la espalda de Jair*. Ya verás que si.

Jair: *Nota que por cada clase que pasa los profesores automáticamente saltan a Alan*.

Ana: *Se percata de la preocupación de Jair*. Ey, no te preocupes por el, no vale la pena que te preocupes por tan poca cosa.

Jair: *Se anima por las palabras de Ana y la mira directamente a los ojos*. Tienes razón no vale la pena ese pedazo de mierda.

Termina la jornada de estudio

*se escucha mucho murmuró entre los pasillos de que le pasó a Alan*

Ana: *Con una sonrisa murmura*. Valla esa mierda si preocupa.

Jair: *Alcanza a escuchar el susurro de Ana*. Podrá ser una mierda pero te pone nerviosa.

Ana: *Casi al instante se sonroja*. Claro que no es una repugnante persona. *Empuja a Jair*

Jair: *Al chocar se percata que chocó con Alan*. A-alan...

Ana: *Voltea y se va rápido*.

Alan: *Enojado y con mirada rara*. Fíjate pedazo de imbécil. *Camina hasta la puerta de el aula*

Jair: *Toma valor y sigue a Alan*. Tu eres el pedazo de imbécil.

Alan: *Voltea rápidamente y sostiene su cuello y con la otra mano tiene una navaja apuntando a su hígado*. Que dijiste imbécil. *Del enojo pone fuerza en la mandíbula y se le marcan las venas en los brazos*.

Jair: *Siente como rápidamente sostiene su cuello y la navaja casi penetrando su cuerpo*. N-nada nada... *Tiene mucha dificultad al respirar*

Alan: *Le susurra al oído*. Sabes que estoy completamente loco, mejor no me desafíes.

Ana: *Voltea a ver a Jair y ve a Alan súper pegado a él y con una mano en su cuello, rápidamente se acerca*. Alan suéltalo...

Jair: *Casi por desmayarse*. S-sueltame.

Alan: *Con la quijada súper apretada y una mirada psicótica directamente a los ojos de Jair*. Estás advertido. *Lo suelta*

Ana: *Se percata de la navaja que guarda Alan*. Ey que tienes ay.

Alan: *La ve directamente a los ojos y se le acerca demasiado, casi rosando de nuevo sus labios*. Es mejor que no te enteres que voy a hacer y menos lo que tengo. *No le quita su mirada penetrante de los ojos a Ana*.

Jair: *Nota la cara de Ana*.