Los Últimos Talentos.

Capitulo 2 -PRESENTACION-

CAPITULO 2

-PRESENTACION-

Manos cálidas me despertaron, calor se extendía por mi cabeza y brazos, era la mejor sensación del mundo, ¿dónde estaba?

Mis ojos se abrieron de golpe, una mujer muy guapa en talvez los 31 o 32 años tenia sus manos sobre mis mejillas, su cabello era castaño bastante claro y muy liso, lo tenia corto hasta lo hombros y su piel era muy blanca y limpia. Sus emociones eran claras: felicidad mezclada con preocupación.

Me removí incomoda, ella abrió los ojos dejando ver 2 gotas perfectas de miel, una sonrisa se extendió por su bello rostro y dio un paso atrás.

La habitación donde me encontraba era grande con unas paredes de color azul cielo, junto con lamparas que decoraban las paredes y cuadros de pinturas antiguas. Mire abajo a donde estaba acostada, una enorme cama como para 4 personas y yo también tenia puesta la misma ropa que recordaba.

Antes que yo misma pudiera darme cuenta estaba de pie al otro lado, dejando la enorme cama entre la bella mujer y yo.

-no pasa nada- dijo su melodica voz -no te lastimare- parecía tonto pero le creía. Mi cabeza giraba como rueda de la fortuna examinando todos los lugares de la habitación por cualquier cosa que pareciera sospechoso. No encontré nada.

Un chico alto de cabello marrón y ojos calidoscopicos entro, sus emociones me inundaron: confusión, nerviosismo y una pisca de alegría. Raro.

-Todos están en la sala, señora Amelia- informo el chico y sonrío, sus extraños ojos azules o grises, o entres ambos me examinaron completa justo antes de salir.

-¿Quiénes son todos?- pregunte curiosa aludiendo a lo que el chico había dicho. Mi voz estaba ronca por el sueño. Su sonrisa se hiso mas grande, sip ella me recordaba a mi madre cuando no estaba siendo una perra, claro.

-Todos son solo pocos- camino a donde yo me encontraba -llegaron poco a poco durante los años, o fueron rescatados, como tu- ella tomo mi mano y me jalo amablemente a la puerta.

Y pues bueno, ''todos'' si eran unos pocos 11 o 12 talvez menos o mas y todos... en pijama, genial.

-Soy Arón Ryder- se apresuro un hombre mayor, que si bien recordaba era el que salvo mi trasero -es mi casa- sonrío -ahora también la tuya, si así lo deseas- biennnnn.. esto era raro.

-¿Cómo me encontraron?- fue lo primero que pregunte, mis ojos bien abiertos, talvez ellos eran acosadores, asesinos, roba órganos. Mejor estar preparada. Una risita me saco de mis pensamientos, mis ojos encontraron a una pequeña pelirroja como entre los 16 o 17 años que parecía un arcoiris con su pijama azul, amarilla y pantunflas rojas -¿Qué?-

El señor Ryder sonrío -somos como tu- fue lo que dijo, era una verdadera lastima que no pudiera sentir las emociones de cada uno de ellos por separado, cuando muchas personas estaban unidas me confundía. Entonces la verdad me golpeo ¿de verdad eran como yo? nunca había estado con otro aparte de Ian.

-¿Cómo yo?- tartamudie, dios parecía estupida.

-Como tu- La señora Amelia estaba radiante -mi esposo- hiso un gesto con la cabeza al Sr.Ryder -siente a las personas con dones cuando están cerca, también sabe lo que son, así te encontramos. Por cierto, soy Amelia Ryder- antes que pudiera sonreír siquiera, me estrecho en un cálido abrazo. Eso me sorprendió.

-No nos has dicho tu nombre- señalo el Sr.Ryder

-Azul- me apresure a decir, esto era emosionate - Sheridan-

-Azul es una empatica- anuncio la Sra.Ryder. Ellos ni se inmutaron, bueno: una ellos no sabían que significaba ser un empatico o dos no entendían el español, por que a mi me parecía fantastico, aun que no me ayudara a pelear.