SUNSET - ATARDECER / Aristemo (TERMINADA)

XXVI (FINAL)

Abrí el departamento encontrándome con el comedor decorado con pétalos de rosa por todas partes, justo en el centro de la mesa del comedor había una velas en una mesa decorada para una cena romántica, sonreí amplio mientras dejaba las flores en el recibidor, pero en eso Marco salió de la cocina mientras llevaba la cena en dos platos.

-¡Feliz Aniversario Ari!- comentó dejando la cena en la mesa y se acercó a abrazarme y darme un pequeño beso- Ve a ponerte cómodo para que cenemos.

Asentí mientras me dirigía hacia la recamara donde pude dejar mi chamarra, al momento de colgarla, mi mirada se dirigió hacia el anillo que aún se encontraba en mi dedo anular izquierdo, lo bese un momento mientras tomé el teléfono para mirar el calendario, en unos días más sería el aniversario luctuoso de Temo y cada año yo hacía un viaje diferente para memorarlo, me pregunté este año donde iría, porque aunque Marco era mi pareja el entendía perfectamente mi situación, o eso esperaba.

Regrese hacia el comedor y me senté mientras veía mucha pasta en mi plato, tome la copa de vino y brindamos mientras platicábamos sobre nuestro día en el trabajo, sobre cómo había sido este año y sobre nuestras anécdotas.

-Todo estuvo delicioso- comenté mientras me limpiaba mis labios con la servilleta- gracias

-No tienes que agradecer realmente me siento feliz de estar contigo- respondió emocionado

-Te traje flores- me levanté y fui por el ramo mientras él lo recibía emocionado mirando rosa por rosa intentando encontrar algo- ¿Buscas algo?

-¡No!- respondió mientras las olía- son hermosas, ¡Amo las rosas!

Asentí mientras nos sentábamos para comer el postre.

-Ari muchas gracias por dejarme ser parte de tu vida-sonrió emocionado- te tengo una sorpresa

-¿Otra?- pregunté sintiéndome culpable, de pronto entendí que no le estaba poniendo ganas a este aniversario- pero para mí con la cena era más que suficiente

-¡Claro que no! – Respondió mientras se levantaba- ¡nada es suficiente para celebrar, voy por el!

Asentí mientras por un instante miraba a mí alrededor, todo se veía completamente diferente, incluso yo me sentía diferente, ni siquiera tenía ganas de celebrar un año más con una persona que si quería pero que no amaba, a veces me preguntaba si se podía amar más de lo que amaste al amor de tu vida y la respuesta no la tenía aún, por un momento me sentí desubicado como si no fuera parte del momento y es que realmente no lo era, me levante y tomé una foto que estaba en el estante cercano: era de nosotros, Marco me abrazaba de los hombros y yo ponía mi mano en su cintura, miré mi sonrisa y no la reconocí, entonces entendí que no siempre la gente tiene razón, no siempre es solo dar la página y volverse a enamorar, que cada quien tiene una opinión diferente porque cada amor es completamente diferente. Estaba sumergido en mis pensamientos hasta que escuché que Marco regresaba, me miró observando nuestra foto y se acercó a tomar mi mano.

-Ari- suspiró un poco nervioso- realmente me siento afortunado de encontrar a alguien que ame tanto la música como yo, que quiera compartir mis sueños, que siento que le pertenezco a alguien, tal vez esto te parezca muy pronto, pero nuestra relación ha sido así yo te amo y creo que estoy dispuesto a dar este paso contigo, de la misma manera que esperó que tú lo estés conmigo, Aristóteles Córcega ¿Te gustaría casarte conmigo?

Y colocó ante mí una cajita donde había una pequeño anillo de plata, y al mirar ese círculo de metal tuve la respuesta a todas mis dudas, alce mi mirada para observarlo un momento, sus ojos denotaban emoción, sabía lo que sentía, su corazón latiendo a todo ritmo dentro de él, sus manos sudando, su ilusión en su mente, lo sabía porque años atrás yo sentí lo mismo con la persona que amaba y aunque yo lo quería realmente no era amor y supe que no podía hacerle eso.