LA OTRA CARA DE LA GUERRA

CAPITULO 6

CAPITULO 6

LENA'S POV

Al siguiente amanecer nos encaminamos al castillo de la princesa después de alzar y guardar el campamento, en cuanto llegamos, los soldados estaban colocando los equipajes en un carruaje, me bajé de mi caballo para saludar a los reyes

- buenos días – dije

- buenos días, majestad – saludaron ambos

- ¿ya están listas? – pregunté

- si mi señora, miré, ella es mi hermana Astra, y ella mi sobrina Alexandra – la reina me presentó a su hermana, también tenía un porte regio, me incliné para saludar y ella asintió, la jovencita se notaba arisca, me puse un poco en guardia por si me atacaba

- entonces, por favor suban al carruaje –

- nos iremos a caballo – dice la pelirroja

- como gusten ¿Dónde está la princesa? – pregunto, no la había visto

- es cierto ¿Dónde está Kara? – pregunta la reina Alura, escucho los cascos de un caballo aproximándose, miró en aquella dirección y sobre un semental berberisco de melena amarilla, se veía como toda una amazona

- cuando partiremos – dijo de manera altanera

- buenos días princesa, en cuanto terminen de colocar el equipaje en el carruaje –

- Kara, ¿estás segura de hacer ese viaje a caballo? Son dos días –

- lo haré como todos los demás –

En cuanto todo terminó me subí a mi caballo

- hasta pronto majestades – dí la señal y todos avanzamos

A media tarde el cielo se nubló, y el aire se hizo muy frio

- es mejor que acampemos, al parecer lloverá – anuncié – armaremos el campamento y descansen todo lo que puedan, mañana saldremos al despuntar el alba

Junto a los soldados y Sam nos dedicamos a elaborar pequeños pozos para que el agua no entrara en las tiendas, armamos los campamentos para nuestras protegidas y los demás nos asentamos en tres tiendas, yo dormiría con Sam.

La lluvia caía con fuerza y el cielo parecía querer caerse, mientras Sam afilaba su fiel espada yo me dedicaba a pensar en qué hacer para mejorar mi convivencia con la princesa... y en medio de mis pensamientos me dormí

Al día siguiente fui despertada por Sam, quien me avisaba que ya había amanecido, hice mi ritual matutino y me encontré con los demás

- hoy cabalgaremos todo el día y noche – dije con simpleza, empezamos la marcha no nos detuvimos ni a comer, seguimos galopando durante toda la noche, Sam iba a mi lado en la carrera

Llegamos cuando el sol estuvo en su punto más alto, me bajé del caballo dolorida, no imaginaba como estaban las nobles de Valaquia, volteé a mirar, la princesa Astra no se quejaba, así que deduje su experiencia para cabalgar, a quien si vi al borde del llanto fue a la princesa Kara, me acerqué apresurada para ayudarla, pero me golpeó la mano

- no te atrevas a tocarme – su voz estaba cargada de dolor, y cuando quiso apoyarse en los estribos para bajar resbaló, tuve que agarrarla

- te tengo –

- ¡suéltame! – se zafó de mi agarre y caminó de manera extraña al encuentro de su tía y prima, Sam me miraba a lo lejos e hizo una extraña expresión, negué con mi cabeza, esta era una situación muy seria... si el consejo se daba cuenta de los desplantes de esta muchachita ni me dejarán casarme y lo tomarán como excusa para invadir sus tierras