Akasuna No (Tn_), su madre es la única sobreviviente de su Clan y su padre un Akatsuki.
Llegara y se quedara en Konoha por ordenes de séptimo Hokage, Naruto Uzumaki, y aunque ella se niegue rotundamente e intente escapar, con el tiempo se dará cuent...
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◇◇◇
Ya estábamos cerca de la aldea, no faltaba mucho para llegar.
Últimamente siento que me estoy arrepintiéndome de haber aceptado el acuerdo con el Hokage, esto probablemente me traiga muchos problemas, y no serán del tipo fácil, más enzima que tendré que soportar a un montón de inútiles, que desde luego entre ellos estará Sarada y el hijo del Hokage, el cual por obvias razones no me sé su nombre y tampoco estoy interesada en saberlo.
Claro que, debería de darle una "oportunidad" a la dichosa academia, pero es que de solo pensar en que tengo que aportar a toda clase de idiotas, automáticamente se me quitan las ganas de ir, pero de igual forma tendré que ir. Bueno quien sabe, tal vez podría ser divertido, ya lo veré con el transcurso del tiempo.
-¿En que tanto piensas?-lo mire desde atrás, él iba delante de mi.
-En nada que sea de tu incumbencia- escuche un suspiro de su parte, seguro se debe de estar arrepintiéndose de haber dicho aquello de "Hare que vuelvas a ser la de antes".
-Por que siempre tienes que estar a la defensiva, ya te lo había dicho antes, haré que seas como en el pasado, cueste lo que cueste- yo solo me le quede mirado la espalda, su voz sonaba seria.
-Lo que tú digas- y sin más me adelante lo más que pude.
No tengo nada que ver con esta maldita aldea, solo me iré después de los exámenes Chuunin.
Diablos, tío Obito, ¿que hiciste?, ¿como pudiste dejarme a cargo de este sujeto?, se que era tu amigo y todo, pero... ¿por que?
○Flashback○
Por fin papá me dejo venir a la guarida, extrañaba mucho a todos, pero casi me matan.
La tía Konan me abrazo muy fuerte y casi me deja sin aire.
Ahora mismo es de noche y bueno estamos en la sala, ya que siempre que vengo duermo con alguien diferente y ya sabia con quien dormiré.
-Y bien pequeña, ¿Quien será el afortunado esta noche?- dijo el tío Hidan, no quiero ir con el, siempre se olvida que soy una niña y que tengo que dormir, él siempre me arrastra por las noches a hacer sacrificios con él.
-Hidan, ella no ira contigo, ni nunca lo hará, no sé me ah olvidado aquella vez que la llevaste a uno de tus sacrificios y a la mañana siguiente parecía que le habían extraído el alma- y claro, si las miradas mataran, el tío Hidan ya estaría muerto, aunque es inmortal, pero con la mirada que mi papá le dió, estoy segura que le buscaría una Muerte dolorosa.
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