𝘽𝙖𝙠𝙪𝙜𝙤𝙪 𝙚𝙨𝙘𝙚𝙣𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨

💣6💣

Híbrido
Segunda parte

- ¡Estoy en casa!

Dejé mi bolso en el suelo, quitándome los zapatos y colgando mi abrigo en la entrada. El silencio que habitaba en la casa era abrumador, incluso podía oir mis pisadas mientras me adentraba cada vez más en mi humilde hogar.

Me paseaba suavemente por las habitaciones de la casa en busca de Katsuki, hasta encontrarlo dormido en su habitación. Me senté en el suelo apoyando mi cabeza en la cama del joven híbrido, observando su rostro adormilado con una sonrisa. El ambiente era tan tranquilo que me envolvió al instante, quedándome dormida junto a él.

Katsuki me sacudía suavemente el cuerpo intentando despertarme, solté un quejido y luego me incorporé quedando sentada, en ese momento me dí cuenta que ya no estaba en el suelo, sino que estaba en la cama.
Aún desorientada por haberme despertado repentinamente, observé el lugar en donde estaba y noté que era el cuarto de Katsuki, volteé a verlo y él también estaba en la cama, aún tapado.

- ¿Qué hora es?- Pregunté mientras recordaba como había llegado aquí.

- Las 7 de la tarde...- Me miraba tranquilo, solté un bostezo.

Espera un momento... ¿¡Las 7 de la tarde?!
¡Eso significa que estuve durmiendo 4 horas!

- ¡Dios, no! ¡Voy a llegar tarde! - Tan rápido como pude salté de la cama levantándome, mareándome al instante por haberme parado de repente.

- ¿Tienes algo que hacer?- Katsuki me miraba confundido mientras yo corría a mi habitación a cambiarme.

- Hoy es la cena con mis compañeros del trabajo, estará el Gerente General y pidió que estemos todos, y yo ya había confirmado mi asistencia... Junto contigo...- Confesé mientras me ocultaba detrás de la puerta de mi habitación. En dos segundos la cara de Katsuki se deformó.

- ¿Qué...?

- ¡Por favor, no te enojes! Es solo que no conozco a casi nadie y no quiero estar sola. Se que no debí involucrarte antes de preguntarte, pero si lo hacía sabía que dirías que no, así que...-

- Está bien, no estoy enojado...- Me interrumpió de inmediato logrando que volteara a verlo, estaba sentado en su cama, con el torso descubierto mientras se masajeaba el ceño que amenazaba con aparecer de forma negativa.

- ¿En serio? Tu cara dice lo contrario.

- ¡Estoy bien! Cómo sea... ¿ A qué hora empieza esa mierda?- Ahí estaba mi querido híbrido de actitud amenazante y malhumorada, con el característico ceño fruncido incrustado nuevamente en el centro de su frente.

- 7:30 jejeje...- Rasque mi mejilla, sonriendo de forma penosa, mientras su paciencia disminuía cada vez más y el ceño en su frente no dejaba de hacer presión.

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Una vez controlada la situación, estábamos listos para salir y dirigirnos al restaurante donde se realizaría dicha juntada laboral. Ambos teníamos que ir presentables: Katsuki vestía un elegante pantalón formal negro a juego con zapatos también formales, y una muy linda camisa azul (elegida por mí, claro) decorada con una corbata negra, y como es invierno, no podía faltar su abrigo, un saco largo de color gris. Se veía muuuy lindo. Mientras que por mi parte vestía una falda tubo de color negro, con zapatos de tacón negros, una camisa blanca sencilla, y luego el abrigo.