El lado bueno de las cosas: 2a temporada. [Cameron Dallas y tu]

Capítulo 78.

Ayer fui un gran día. Estuve genial con Cameron, los chicos ya se habían enterado de que habíamos vuelto y todos se alegraron mucho. Cameron al contárselo a sus amigos dijo que notó a Jack G enfadado pero que no le iba a preguntar por qué, ya que era más que obvio. La tarde en la casa de Matt se puede resumir en: tarde de risas. Por un momento pensé que todo era como antes, que ellos no eran famosos, que mi madre seguía embarazada, que yo no me había peleado con Cameron. Se puede decir que fue una tarde para recordar.

(…)

Suena “Secret” en mi teléfono. Mierda me están llamando con lo bien que estoy en la cama. ¿Qué te he hecho a ti, que tanto me odias? ¿Qué?

-¿Diga?-mi tono de voz es un poco grave.

-Eh…-duda un poco-¿Bells? Creo que me he equivocado. Lo siento, adiós.

-¡No, no, no, espera!-aclaro mi voz- ¿Qué quieres?

-¡Ah, que susto tía! ¿Cómo tienes esa voz de camionero?

-Porque me acabo de despertar-me corrijo-me acabas de despertar.

-Son las tres de la tarde niña, debería estar despierta desde las 11. Bueno, a lo que voy, estoy aburrida, sé que tú lo vas a estar así que… ¿me puedo auto invitar a tu casa?

Dana y su increíble facilidad para acloparse a todos lados.

Bufo.

-Vente si quieres-indiferencia modo ON-

-Mmmm…a las 4 estoy allí. ¡Adiós, te quiero!

Y colgó, como siempre dejándome con la palabra en la boca. No sé cómo espera que me dé tiempo a arreglarme si tengo que limpiar, ordenar, comer y vestirme en una hora. Pero bueno, tampoco voy a salir de mi casa así que me da igual ir zarrapastrosa. Me levanto a regañadientes de la cama, me hago un moño mal hecho, una sudadera ancha sin capucha con una “C” en rojo, unas mallas de deporte negras y mis converse rojas.  Bajo a la cocina y cojo un paquete de cereales y leche. ¿Almueryuno? Suena bien.

Cuando termino de hacer todo me siento en el sofá y empiezo a ver la tele. Todavía me sobran quince minutos. Soy Usaina Bolt señoras y señores *aplausos y vítores*

Narra Dana.

-¡Eh, tú! ¡Hermano del que me arrepiento ser hermana! ¡Me voy a casa de Bella!

-¡Vale retrasada!-se acerca a mí-Por cierto… ¿Bella tiene novio?

Lo miro extrañada.

-¿Eso a qué viene Mike? ¿Qué estás tramando?

-¡Nada, nada!-levanta la mano y se ríe- Sólo que… es una chica muy guapa y lista y bueno… tal vez está interesada en el tren Mike-levanta las cejas y esboza media sonrisa- ¡Chú chú!-imita el sonido de un tren- ¿lo pillas, hermanita?-pasa su mano por mi pelo-

-Primero de todo: ¡Euuuu, qué asco! Y segundo: Sí, tiene novio, Cameron Dallas.

-Lo suponía-agacha la cabeza- Las mejores lo tienen, bueno… si lo dejan dile que tiene aquí un hombro en el que apoyarse.

Ruedo los ojos y salgo de mi casa.

Caminaba tranquilamente hasta que noto una mirada fija en mí. Me hace sentir realmente incómoda, miro para tener más claridad de quién mestá mirando y le veo a él, esto no puede ser… no va a salir nada bueno de aquí.

¿Qué hago? ¿le saludo, le ignoro? ¿Me hago la tonta? Yo… sé que me ha hecho mucho daño pero también sé que una parte de mí le echa de menos. Más ahora que estoy enfadada con Calum por culpa de sus estúpidos celos. No tengo ni la menor idea de lo que debo hacer y sólo lo tengo a unos metros de mí.

-Hola-dije seca

Se sorprende al escuchar mi saludo.

-¡Vaya, hola! Pensaba que me ibas a ignorar.

Sonreí y seguí mi camino pero él me interrumpió tomándome del brazo. Mierda. ¿Qué es esto que siento? Mi corazón va a mil, mis manos me sudan y tengo la sensación de que como no me sujeten de desmayaré.