Epilogo.

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Atenea Anderson.

5 AÑOS DESPUÉS.

Camine hacia la puerta del edificio enorme, donde habían varias personas con trajes caminando lado a lado.

-Nombre- me dijo la secretaria un poco descortés.

-Atenea Anderson- dije del mismo tono que ella.

-Ay, señorita Anderson, perdone por el tono, ahorita mismo la pasó a la oficina del señor Anderson- dijo nerviosa y camino conmigo hacia el ultimo piso.

Donde se encontraba la oficina de aquel hombre rubio, con brazos definidos y un excelente traje negro.

-Buenas tardes, cariño- me abrazo y me beso.

-Sigo enojada porque no quisiste darle comida a Boris-dije haciendo un puchero con mi boca.

-Nicole, ya era tarde- se excusó.

-¿Y?- dije viéndolo mal- dejaste de darle de comer a mi hijo.

-En un perro- dijo burlón.

-¿Te molesta?- lo mire desafiante.

-Eres una niña todavía- dijo riéndose de mi.

-Que tengas 25 no significa que seas mas grande que yo- lo mire mal.

-25 pero con una empresa multimillonaria de el y para su hermosa esposa- me beso.

Evans había heredado la empresa de su papá, la cual se encargaba de administrar el dinero de varias marcas de ropa y supermarket.

-Y tal vez en algún futuro, de nuestros hijos- dijo besando mi cuello.

Yo me sobresalte un poco.

-Mañana empiezo en el trabajo- cambié de tema.

-Me parece genial, aunque ya no me visitarás en el trabajo tan seguido- dijo triste.

-Si pero si me llego a enterar que me haces algo te corto los - me interrumpieron.

-Hola hermanita- llegó William a la oficina y me sonrió.

- Hola animal- chocamos los puños.

-Me salvaste de que me quitaran una extremidad- rio Evans.

-Ya sabes que Atenea esta loca- yo le pegue en el hombro.

-Creo que el único que Maduro aquí soy yo- dijo orgulloso Evans.

-Traes bóxer de Bob esponja- el negó y volteó a ver a su pantalón.

- Tal vez- dijo nervioso.

-¿Y te dieron el trabajo?- pregunto William tratando de cambiar de tema.

-Obvio- les sonreí.

-Hay que ir a festejar- entró la prometida de William.

Jade casi oficialmente de Ozera.

-¿Está es una reunión?- preguntó Evans y negamos- pues vallanse, solo quiero a mi esposa aquí.

Ellos se fueron de mala gana.

-En que estábamos?- me quiso besar.

-En que te iba a cortar algo- me separé y me senté en su silla- mamá me hablo que tenía problemas con Claire porque anda con un delincuente- rei.

-Quiso seguirle los pasos a la hermana- yo me quede sorprendida, hace mucho que no pensaba en aquel "delincuente".

Observe mi brazo, la S nunca pudo ser borrada, ni por los tratamientos que me hice, ni nada .

-Perdón- me abrazo- no quise que te pusieras así.

-No te preocupes, todo está bien pero ni me acordaba de eso- trague saliva.

[•••]

Camine a dentro del edificio color blanco, estaba algo nerviosa, mi primer día de trabajo, tenía un cruda mortal pero aún trataba de disimular.

-Buenas tardes, su nombre completo por favor- me dijo la chica del mostrador.

-Atenea Nicole Anderson-ella asistió y me dio unos gafetes y un expediente.

-Este es tu gafete general, y esta es la llave para la parte de máxima seguridad, y de tus primeros casos en atender. Nos hablaron maravillas de ti en la universidad de Francia así que decidimos encargarte a uno de los menos fáciles en tratar- yo la mire algo nerviosa- buena suerte.

Le di una sonrisa fingida.

Una enfermera comenzó a guiarme por todo el hospital psiquiátrico, habían varias personas jugando o viendo la tele, o otras siendo cuidadas por enfermeros.

-Se ve muy normal- dije observando niñas jugando el pasto.

-En esta parte, los malos están encerrados, y el que te toco es uno de ellos- me miro algo con pena.

Eso me estremeció.

____

Respire profundo antes de entrar a la sala de terapia, habían dos policías cuidando la puerta.

-Ahí está adentro, con una camisa de fuerza, así que tranquila- dijo uno de los policías.

Observe de nuevo el expedienté, suspire, me adentré a la habitación.

Vi aquel tipo sentado, no volteaba a verme solo observaba en la silla frente a él.

Me senté en esa silla agachada con la cabeza.

-Hola Fan...- lo observé a los ojos y el aquel hombre que ya no era un chico.

Tenía más facciones marcada, pero seguía casi igual, solo con algo de ojeras, pero seguía igual de hermoso que la primera vez que me enamore de él.

-Hola Nicole- su tono era relajante y me sonrió.










FIN.

Obsession (completa) (Noah Schnapp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora