BELOW HER MOUTH //Jerrie Thirlwards

7

A la mañana siguiente Jade se despertó en una habitación que obviamente no era la suya, entonces comprendió que lo que había pasado la noche anterior no había sido solo un sueño y el ligero dolor que sentía entre las piernas era tan solo una prueba más, la rubia no estaba con ella y no sabia donde podría estar, estaba a punto de levantarse a buscarla cuando su celular sonó

—amor buenos días!—

—Riley!?... aaa... hola buen día—contesto algo fría y nerviosa

—te desperté?—

—sí algo así—

—te escuchas cansada, trabajaste hasta tarde verdad?—pregunto el chico

—ammm... Si... Tuve... Tuve mucho trabajo—contesto recordando la noche anterior

—sólo quería saber si llamaste al organizador—

—no, tal vez más tarde—en ese momento miro como la rubia íba entrando a la habitación con una bandeja en las manos

—de acuerdo, bueno te dejo para que descanses—suspiro—te amo—

—claro y yo... Yo también—colgó y la rubia sé puso frente a ella con una enorme sonrisa

—buenos días!—saludo feliz acercandose para besar la frente de la chica y después sus labios—como dormiste?—acaricio su mejilla

—hola—contesto timida cubriendose  con la sabana—la verdad muy bien—

—Yo también—le sonrió—toma ponte esto—le entrego unos pantalones y una camisa de ella

—gracias—

—espero que te guste el desayuno—

—se ve delicioso—sonrió mirando la bandeja—me voy a cambiar—se levanto y se fue a cambiar al baño

Cuando regreso se pusieron a desayunar, ambas se daban de comer, se daban besos y sonreían, se trataban como si fueran una pareja que ya tenía tiempo junta, habían disfrutado estar así.

Después del desayuno Perrie tomo su guitarra y empezó a tocar, había pasado mucho tiempo que no lo hacia y tenía a Jade fascinada entonces la castaña miro un par de fotos que estaban en el mueble detrás de la rubia

—esta eres tu?—

—si—

—desde entonces eras fuerte—sonrió al tomar la foto donde Perrie tenía unos nueve años y  parecía querer cargar un mueble

—no, recuerdo que al final me rendi—dejo su guitarra aun lado y tomo a siento junto a Jade—mi madre siempre me dijo que debía portarme más como una chica—

—tu... tu querías ser chico?—pregunto algo timida la castaña

—sólo quería que me dejaran ser—

—puedo tenerla?—le mostro la foto

—para que la quieres o donde la podrías?—pregunto con una sonrisa

—puedo guardarla en mi cartera para admirar tu fuerza de marimacha—le dijo en broma dando un leve empujon con sus hombros

—marimacha—contesto seria—no me gustaba que usarán ese termino conmigo cuando era niña—suspiro y se giro para ver a Jade—además soy más legitima que eso—sonrió

—bien marimacha legitima—acaricio su mejilla dando una sonrisa y mirando sus labios—besame—Perrie sonrió con orgullo y se inclino para besarla profundamente—nunca había hecho algo como esto—susurro una sonriente Jade sobre los labios de Perrie quien también sonrió

—anda, daremos un paseo—

—de verdad?—pregunto Jade y la rubia asintió levantandose estirando su mano a la castaña

—y bien, cuéntame algo de ti—Dijo la rubia mientras caminaban de la mano por el muelle

—no suelo hablar mucho de mi, ni de mi pasado—

—porque? Acaso tienes mucho que ocultar?—

—no es eso, pero descuida siento que a ti no te podría ocultar algo—se detuvo y se puso frente a Perrie

—puedes confiar en mi—se acerco y acaricio la mejilla de Jade—Creo que esta demás decirlo—

—talvez más tarde, pero ahora dime que dijo tu madre cuando te convertiste en techadora?—pregunto mientras se sentaba en la orilla del muelle

—estaba demasiado molesta—sonrió ante el recuerdo sentandose junto a la chica—ella quería que fuera a la Universidad de Londres, no quería que trabajara en lo mismo que mi padre—

—debio ser duro no?—

—algo así, pero que se joda!!—se carcajeo—además no tarde mucho en aprender, siempre me subia con mi padre a ayudarle—suspiro—odiaba que quisieran hacerme poner vestidos, moños y esas cosas muy femeninas—abrazo a Jade por la cintura

—pero a pesar de eso debes tener al menos un recuerdo positivo de tu niñez no?—pregunto mientras recargaba su cabeza en él hombro de la rubia

—pues me gustaba jugar en la lluvia, pero mi madre no me lo permitia—suspiro negando con la cabeza—siempre decía "es no lo hace una niña y señorita de bien"—Dijo algo triste—siempre intentaba enseñarme como sea una niña—Jade levanto la cabeza y la miro algo triste—pero dime como ha sido la vida para ti?—pregunto la rubia cambiando de tema

—mi padre me hacia reír todo el tiempo el era muy inteligente—sonrió ante el recuerdo—y mamá me apoyaba en todo—

—qué envidia—

—debo confesar algo—

—que sucede?—

—Yo... Yo... Tuve una aventura con una chica, cuando era adolescente—

—de verdad?—pregunto sorprendida lo rubia

—si, tenía como dieciseis años, se llamaba Denisse—acaricio su mejilla —me recuerdas un poco a ella—sonrió

—porque no me sorprende—

—siempre estábamos juntas todos pensaban que eramos mejores amigas inseparables—se carcajeo—una vez nos besamos y Dios! fueron como cuatro segundos, y mi madre nos vio—

—que sucedio después—

—ella simplemente enloquecio y me alejo de ella, ni siquiera pude decirle adios—suspiro triste—nunca la volvi a ver—

—sólo obedeciste?—

—que podía hacer, era una niña, me costo trabajo perdonar a mi madre—recargo su cabeza otra vez en la rubia—sólo fingi que lo había olvidado—

—pero dijiste que ella te apoyaba en todo—

—al final no fue así, se empeño en que buscara a un buen chico, con un buen trabajo y un gran pene—ambas se carcajearon

—por como estabas ayer creo que no lo tiene tan gran grande—Dijo la rubia y Jade la miro con una sonrisa en su rostro

—dejo confesar que me hiciste sentir cómo hace mucho no lo hacia—se acerco y roso sus labios con los de Perrie—la verdad lo disfrute—

—y apenas es el principio—susurro y la beso—bueno pero luego que paso?—pregunto soltando los labios de la castaña

—pues nada, simplemente hice lo que ellos esperaban que hiciera—levanto los hombros y después se puso de pie — enterre esa historia, como si nunca hubiera pasado—Perrie se levanto y la atrajo a ella, Jade no dudo y enseguida rodeo el cuello de la rubia con sus brazos y la beso...

CamilaEstafasCabello
Trato es trato, así que denle las gracias por los dos capítulos seguidos jajaja