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14; Gracias

•Omnisciente•

Terminaron yéndose a las 7 de ahí. Pasaron el día caminando, recorriendo calles que en sus vidas habían estado, si bien pensaron que el ambiente sería un tanto incómodo luego del beso, fue bastante grato ya que cada uno hizo como si nada hubiera pasado, cuando en realidad por sus mentes pasaba ese momento un millón de veces.

Jungkook estaba confundido y Jimin tenía miedo porque él sentía algo similar. No quería volver a que le gustara alguien y terminara mal como la primera vez.

Se separaron en la cisterna, Jimin prefirió tomar micro, a Jungkook lo iban a buscar en auto. Aunque le ofreció llevarlo, el mayor se negó rotundamente diciendo que tenía que ir a comprar algo que le encargó su madre a último momento. La verdad era que no quería estar en el mismo auto que Jungkook para poder aclarar un poco sus pensamientos.

-Avísame cuando llegues -le dijo Jimin antes de que su acompañante subiera por la escalera mecánica hacia el estacionamiento.

-Tú también avisa -le sonrió estrechando su mano en forma de despedida.

-Despídete bien.

Jimin lo tomó por los brazos acercándolo a él dándole un abrazo más palmadas en la espalda. Esto era nuevo para Jungkook, pero no era molesto. Cree que de a poco se acostumbrará a las muestras de cariño.

Mientras él subía las escaleras, Jimin se dirigía a uno de los andenes a tomar la micro. Aún más confundido, más temeroso y desconfiado.

Se puso detrás que una señora que también esperaba la micro, sacó sus audífonos junto a su celular y puso Fallingforyou de the 1975 para estar en ambiente mientras pensaba.

Cuando Jimin besó a Jungkook sintió algo similar a lo que sintió la primera vez que besó a Miguel, por eso era su miedo. No quería que las cosas pasaran de la misma forma, que todo terminara arruinándose, que sus sentimientos no fueran correspondidos.

En el mes que tuvo algo con Miguel, él le prometía el cielo, la luna y las estrellas. Que terminaría con su polola lo antes posible, que en realidad quería a Jimin. Pero su reputación era más grande que el amor que tenía por él. Le daba vergüenza admitir su homosexualidad, más si todos se enteraban que estaba saliendo con un hombre.

Lo peor de todo era que Jimin realmente creía que todo estaba bien y llegaría el día en que le pidiera pololeo. Lástima que todo terminó en desgracia, penurias y desconfianza.

Luego de ese beso con Jungkook, comenzó a revivir todo lo malo que tuvo que pasar, el llanto, la depresión. Un sentimiento de extrañeza se apoderó de él. No quería pensar en el pasado porque disfrutaba del presente en que se encontraba, de estar mejor ahora, con alguien que sería diferente a Miguel.

Seguía confundido con sus sentimientos hacia Jungkook. En tan poco tiempo se unieron demasiado y la última vez que Jimin se acercó tan rápido a alguien terminó con el corazón roto. De momento era mejor seguir las cosas como estaban y en secreto.

La micro llegó y la canción cambió. Tuvo la suerte de alcanzar a tomar un lugar desocupado y sentarse. Se apegó a la ventana mientras dejaba que Morrisey cantara con nostalgia que todo había acabado.

Todo acabo, Jimin. Debes cerrar esa etapa -pensaba para sus adentros sobre todo lo qué pasó con Miguel.

Y aunque había pasado un año desde esa terrible época, aún no podía superarlo.

♩ Sé que se acabó
Y esto realmente nunca empezó
Pero en mi corazón fue tan real♩

Eso era lo que más le dolía a Jimin, que por un momento todo se sintió tan real, todo ese amor y promesas que no se concretaron. De todas formas, si no hubiera pasado lo qué pasó, él jamás se hubiera dado cuenta de cómo en realidad era Miguel.